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MADRID (EP). El Grupo Villar Mir prevé que su beneficio neto atribuido cierre el ejercicio 2011 con un crecimiento del 22%, de forma que roce los 380 millones de euros, según anunció el presidente de la compañía, Juan Miguel Villar Mir.

La corporación mantendrá así la progresión media del 20% que viene registrando en los últimos años, pese a la actual coyuntura de crisis y a que OHL, una de las empresas del grupo, "no crecerá" este año en ventas.

Villar Mir calcula que las ventas totales del grupo alcancen los 8.200 millones de euros este año, importe un 15,2% superior al de un año antes. De su lado, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) se elevará un 21%, hasta los 1.800 millones de euros.

La corporación está presente en 34 países, con lo que ya obtiene del exterior más de las dos terceras partes (el 70%) de total de sus ventas. Además, en la última década ha invertido 100 millones de euros en I+D+I y desarrollo de nueva tecnología.

Según sus datos, el Grupo Villar Mir es "líder mundial" en metal silíceo y ferroaleaciones, el mayor productor europeo de amoniaco y fertilizante, el octavo inversor del mundo en concesiones y el primero en Latinoamérica, el primer consumidor de gas natural de España, y el tercero de electricidad.

RECETAS PARA CRECER

Durante su intervención en los Desayunos de Intereconomía Conferencias, patrocinados por BT, el empresario señaló la internacionalización y la innovación como principales recetas, tanto para empresas como para economías, para elevar la producción y crecer.

"Necesitamos un sector empresarial competitivo, lo que implica más innovación, y más sector exportador, lo que supone una mayor internacionalización", declaró el empresario, quien considera que España "no tiene otra alternativa a corto plazo para superar la crisis que impulsar sus exportaciones".

"En España no podemos aumentar el gasto público corriente, y el sector privado tampoco puede elevar sus gastos porque está muy endeudado y desempleado", añadió.

Según sus datos, las exportaciones españolas están un 30% por debajo de lo que le correspondería en función de su dimensión económica.

De igual forma, por lo que a innovación respecta, "se ha avanzado, pero aún se innova poco". En este punto, señaló que la inversión en I+D+I en España representó el 1,38% del PIB en 2009, lo que supone un incremento frente al 0,9% de 2000, pero que aún está lejos del 2% de los países de la UE, el 3% de Estados Unidos, y el 3,5% de Japón.