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VALENCIA. Manuel Cervera es, probablemente, el cabeza de lista del Partido Popular al Congreso de los Diputados por una provincia valenciana que menos rechazo causa entre el electorado afín a otros partidos políticos. Tras ocho años como alto cargo en la Conselleria de Sanidad, los últimos cuatro como conseller y, por tanto, responsable del departamento autonómico de mayor presupuesto, Cervera ha logrado construirse una imagen más técnica que política y proyectar un perfil de gestor moderado y razonable pese a la caída de los índices de la sanidad valenciana.

A diferencia del ex conseller Font de Mora, a quien buena parte de la ciudadanía identifica con el deterioro de la enseñanza en la Comunitat Valenciana y de quien se pidió la dimisión en una multitudinaria manifestación convocada en Valencia, el cabeza de lista por Castellón ha logrado mantenerse a resguardo de las críticas de la opinión pública.

Cervera es médico de profesión y trabajó como oftalmólogo en el Hospital Provincial de Castellón y en el de La Plana de Vila-Real antes de incorporarse a la Conselleria de Sanidad en 2003 como Director General de Calidad y Atención al Paciente de la mano de Vicente Rambla. En 2005 fue nombrado Secretario Autonómico de Sanidad, cargo en el que se mantuvo tras la sustitución de Rambla por Rafael Blasco en 2006. Ya en 2007, el paso de Blasco a la Conselleria de Solidaridad y Ciudadanía facilitó su ascenso a conseller. Fijo en todas las quinielas para seguir en el nuevo ejecutivo autonómico tras las elecciones de mayo de 2011, si no repitió en el Consell de perfil técnico formado por Camps fue porque pidió un cambio de cartera.

En su buena imagen han pesado más acciones efectistas como la construcción del nuevo macro hospital La Fe de Valencia -inaugurado con numerosas deficiencias- que los resultados de su gestión. Cuando abandonó la Conselleria, la Comunitat Valenciana disponía de menos gasto sanitario, menos camas hospitalarias y menos centros de salud que la media estatal, además de listas de espera más abultadas. Cervera continuó la extensión del modelo de gestión privada de hospitales públicos con la construcción de los centros de Denia, Manises y Elche, que se sumaron así a los ya existentes en Alzira y Torrevieja, y privatizó también la gestión de algunos servicios del resto de hospitales, como los de limpieza o cocina.

Pese a proyectar un talante más moderado que otros compañeros de gobierno, Cervera no evitó la estrategia victimista tan explotada por Camps y Barberá. Recurrió a ella, por ejemplo, cuando a principios de 2011 los proveedores sanitarios se plantaron y amenazaron con cortar el suministro de sus productos si la Generalitat no les pagaba los "miles de millones" que les debía.

Si Cospedal responsabiliza al anterior ejecutivo autonómico socialista de Castilla-La Mancha de los impagos actuales, Cervera culpó de ello al Gobierno central. Sostuvo en todo momento que era un problema nacional y responsabilizó de la situación al déficit de financiación de la sanidad valenciana por parte del ejecutivo presidido por Rodríguez Zapatero. La estrategia dio resultado y Cervera, con varios premios por su gestión en la Conselleria y con su imagen pública intacta, concurre ahora como cabeza de lista por Castellón.

PRIMEROS PUESTOS DE LA LISTA

El primer puesto de la lista de Cervera evidencia la progresiva pérdida de peso en la organización autonómica de Carlos Fabra, presidente provincial del partido en Castellón y ex presidente de la Diputación que durante el proceso de elaboración de listas barajó la posibilidad de situar a su hija, Andrea Fabra, como cabeza de cartel.

Finalmente, deberá conformarse con el segundo lugar de la candidatura, puesto en el que ya se presentó en las Elecciones Generales de 2008, un año después de ser designada senadora territorial de la Comunitat Valenciana con 34 años, pese a haber llegado a estar imputada en la misma causa que su padre. También están presentes en la lista la ex presidenta de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, Ascensión Figueres, como número 3, y el ex Conseller de Industria y Comercio, Fernando Castelló, en el cuarto lugar.

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(*) José Vicente Gámir es periodista