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VALENCIA. El exconseller Fernando Castelló, actual presidente del Tribunal de la Competencia, cambiará de aires en breve. El jueves, el nombre del exalto cargo aparecía como número cuatro en la lista del PP al Congreso de los Diputados por la circunscripción de Castellón, candidatura que fue aprobada ayer por la dirección nacional del partido que lidera Mariano Rajoy.

El Tribunal de la Competencia, como ya publicó Valenciaplaza.com semanas atrás, es un organismo de baja actividad que consume anualmente más de 620.000 euros. Los siete miembros del mismo cobran una media de 64.500 euros a cambio de elaborar cinco sentencias concluyentes al año y algún que otro informe.

Ahora, con la posible marcha del exconseller Fernando Castelló, el organismo, que no parece  imprescindible en tiempos de acuciante crisis económica, parece tener los días contados. La propia portavoz del Consell, Lola Johnson, declinó pronunciarse sobre la continuidad de este tribunal tras ser preguntada en la rueda de prensa posterior al pleno del Ejecutivo celebrado ayer.

Cabe recordar que, en la provincia de Castellón, la proporción de parlamentarios será, con toda probabilidad, de tres para el Partido Popular y dos para el PSOE. Esto dejaría a Castelló a la espera de que la lista corriera un puesto para acceder al escaño. No obstante, todo apunta a que el exconseller de Sanidad Manuel Cervera será aupado a un cargo en el gobierno de Mariano Rajoy si éste cumple los pronósticos y gana las próximas elecciones generales. De esa manera, Cervera dejaría el acta de diputado que recogería prestamente Fernando Castelló.

A día de hoy, el Tribunal de la Competencia, considerado el guardián del juego limpio entre las empresas valencianas tiene para gastar 622.880 euros y con sólo siete miembros, destina un 72,4% a gastos de personal: 451.430 euros en 2011. Esta plantilla está formada por distintos perfiles profesionales: un presidente y dos vocales (los tres exaltos cargos  y elegidos por designación política), un secretario del Pleno, técnicos y administrativos y, en consecuencia, por muy dispares retribuciones. 

OTROS MOVIMIENTOS POSIBLES

Según apuntan fuentes del PP, el número de la cinco por la circunscripción de Valencia y  hasta ahora al frente del Centro de Investigación Príncipe Felipe, Rubén Moreno, impuesto por el líder de los ‘populares' valencianos, Alberto Fabra, también opta a un cargo en el Gobierno de Rajoy. Moreno ha trabajado en diversos cargos relacionados con la Sanidad en la administración autonómica y nacional y, además, tiene buena relación con Manuel Cervera.

Correría entonces la lista (el PP prevé lograr nueve diputados por Valencia) y entraría la número diez de la candidatura, Teresa García, exasesora en Presidencia y pareja del jefe de Gabinete de Alberto Fabra, Jesús Lecha.

Cervera y Moreno no son los únicos que suenan para ocupar un puesto en el gobierno de Mariano Rajoy. Según fuentes del PPCV, aparte de los que suenan como ministros, como Esteban González Pons o Federico Trillo, existen otros nombres de las candidaturas valencianas que pueden obtener un cargo en el segundo escalón. Así, Belén Juste, Gerardo Camps, Mario Flores o Vicente Ferrer (este último ha sido señalado por muchos como próximo Delegado del Gobierno) tienen opciones de hacerse sitio en el futuro organigrama de Rajoy si gana las elecciones, lo que produciría la entrada en el Congreso de los Diputados de dirigentes en puestos más retrasados de la lista.

Por otro lado, ayer se produjo la dimisión de la secretaria de Estado de Infraestructuras, Inmaculada Rodríguez Piñero, cabeza de lista del PSOE por Valencia y también la de la presidenta de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL), Asunción Figueres, que aparece como número tres en la lista del PP al Congreso de Castellón. Todo apunta a que su relevo en la institución será Ramón Ferrer, catedrático de Historia Medieval en la Universidad de Valencia.