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VALENCIA. Inmochan, inmobiliaria del Grupo Auchan -propietario de Alcampo-, tendrá que pagar unos 26 millones de euros a la promotora valenciana Llanera por el incumplimiento del contrato que existía entre las dos empresas para el dearrollo y explotación del futuro parque comercial que se incluye en el programa de actuación integrada (PAI) Nou Mil.lenni. En este sentido se ha pronunciado la Audiencia Provincial de Valencia, cuya sentencia confirma la dictada por el Juzgado de lo Mercantil Número 2 de Valencia, que se encargaba de tramitar el proceso concursal de la compañía valenciana.

Inmochan planteó su retirada del proyecto ante la situación de concurso de acreedores de  Llanera, que logró superar tras la firma de un acuerdo con sus acreedores. De hecho, el PAI de Nou Mil.lenni es el único de los grandes proyectos de la compañía por el que ha seguido apostando en su nueva etapa. El plan financiero presentado por la compañía a sus acreedores para llegar a un acuerdo que salvara su situación concursal está directamente ligado a los ingresos derivados del desarrollo de Nou Mil.lenni en los próximos años. La sentencia supone, por lo tanto, un respaldo a la viabilidad futura de Llanera.

Inmochan considera que no se han cumplido los plazos de construcción del centro comercial, al estar paralizado el proyecto, pero el juez dio la razón a Llanera y condenó a la compañía francesa al pago de los 20 millones de euros que había acordado en el contrato, más seis millones de euros en concepto de intereses de demora. Para garantizar el cumplimiento de la sentencia, el juez decretó, asimismo, la intervención judicial de Inmochan, nombrando administradores para controlar que se cumpliese el abono de la deuda con Llanera.

El proyecto urbanístico, que contempla la promoción de unas 12.000 viviendas -la mitad, de protección oficial- zonas terciarias y de ocio en el municipio de Catarroja (Valencia), es promovido por la sociedad mixta Iniciativas y Promociones de Viviendas Valencianas (Inprova), participada por Llanera y el Instituto Valenciano de la Vivienda (Ivvsa). La tramitación del proyecto ha sido objeto de polémica y, de hecho, fue paralizada judicialmente por la posible falta de recursos hídricos.

NUEVA ETAPA

Llanera fue la primera gran inmobiliaria en declarar el concurso de acreedores como consecuencia de la actual crisis, en octubre de 2007. Las deudas ascendían en ese momento a unos 750 millones de euros. La firma salió del concurso el pasado mes de diciembre, tras llegar a un acuerdo con los acreedores de sus sociedades. Según el convenio aprobado, Llanera Urbanismo pagará el 50% de los importes que debe en un plazo de ocho años, en tanto que la matriz y la firma Arenal aplicarán quitas del 35% y del 25% en sus deudas, respectivamente. Los pagos se afrontarán en el mismo plazo y en todos los casos se establecen tres años de carencia.

Los intereses de Llanera en el conflicto con Inmochan fueron defendidos por el bufete Cuatrecasas Goncalves Pereira.