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Peláez, consejero delegado

VALENCIA. La demanda no sólo existe, sino que está en crecimiento en algunos segmentos del sector inmobiliario. La vivienda social en alquiler con opción a compra se está consolidando como uno de los nichos con más demanda, en un contexto en el que el acceso directo a la adquisición de una vivienda es difícil por los aún altos precios y las dificultades para acceder a financiación bancaria. 

Ecisa ha unido fuerzas con Caja Madrid para operar en este ámbito, según explicó ayer el consejero delegado del grupo alicantino, Manuel Peláez, que participó en el 2º Foro Económico Empresarial organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) en Valencia. Ecisa y Caja Madrid constituyeron hace año y medio la sociedad Inmocan, de la que cada una controla un 47%, mientras que el 6% restante está en manos de Inmobiliaria Espacio.

Inmocan ha entregado ya una primera promoción, de cien viviendas de protección oficial en alquiler con opción a compra, en la localidad madrileña de Meco, y tiene en marcha otras 400 en diferentes puntos de las comunidades de Madrid y Valencia, ámbito geográfico de acción de la sociedad.

El objetivo es alcanzar el millar de viviendas promovidas en los próximos ejercicios, que serán gestionadas por la sociedad durante el periodo de arrendamiento. Peláez explica que Inmocan se presenta a licitaciones públicas de promociones, de cuyo desarrollo se encarga la propia constructora de Ecisa o bien se contrata a otras compañías, como FCC. El grupo constructor tiene también una alianza con Caja Mediterráneo (CAM) que opera en el ámbito de los aparcamientos.

"NOS EQUIVOCAMOS CON LAS EXPECTATIVAS DE CRECIMIENTO"

Ecisa sigue trabajando también en la internacionalización como estrategia de crecimiento. La firma constituirá una sociedad en el país, junto a un socio local, que trabajará tanto en el ámbito de la obra pública como en la promoción privada. Peláez explica que se seguirá un modelo similar al aplicado por el grupo en Qatar, donde cuenta con tres contratos por más de 40 millones de euros. En ambos casos opera a través de una sociedad participada al 51% por el socio local, que debe tener mayoría, según la legislación vigente en la zona.

Ecisa adquirió en 2009 la compañía ferroviaria lusa Steconfer, por seis millones de euros. Esta firma opera en Portugal, España e Irlanda. Su actividad exterior supone ya en torno al 15% de la cartera de obras del grupo, que ronda los 250 millones de euros. "Hace cinco años nuestro plan estratégico no contemplaba salir fuera de la Comunidad Valenciana, debido a las estimaciones de crecimiento inmobiliario; es evidente que nos equivocamos", apunta Peláez.

Esta estrategia de diversificación de mercados está dando buenos resultados a Ecisa. A pesar del difícil momento que atraviesa su sector, el grupo cerró 2009 con una facturación de en torno a 165 millones de euros, sólo un 10% inferior a la cifra de negocio de 2008. La previsión para este año contempla una reducción "de en torno al 5%", según Peláez.

Los planes de futuro de la firma contemplan también la participación en el desarrollo de infraestructuras bajo la fórmula de cooperación público-privada.