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VALENCIA. El PPCV no termina de tranquilizarse en su camino hacia otro previsible éxito electoral el próximo 20 de noviembre. Mientras unos se permiten declaraciones que cuestionan la gestión del actual Consell o la existencia de las diputaciones, como hizo el lunes el alcalde de Paterna, Lorenzo Agustí; otros prefieren discreción en sus movimientos estratégicos.

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, continúa sin desvelar si se integrará en la lista al Congreso de los Diputados. Su puñetazo en la mesa con toque de atención a Génova acerca de la poca atención recibida por el PP valenciano por la dirección nacional, ha sido un primer movimiento al que, según aseguran fuentes del consistorio, seguirán otros.

Así, la alcaldesa de Valencia tiene la intención de reforzar su influencia orgánica en los próximos congresos del partido, que se celebrarán después del 20-N. Está previsto que el regional sea a finales de este año o principios del próximo. Según las citadas fuentes, Rita Barberá tiene intención de que el PP de la capital obtenga un puesto de máxima visibilidad en la dirección regional del partido. En la actualidad, aparte de su cargo como Coordinadora Sí al PP -un puesto más bien testimonial-, tiene situada a Marta Torrado como vicesecretaria de Comunicación, un lugar de tercer escalón en el organigrama.

No obstante, si el presidente del PP, Alberto Fabra, optara por confeccionar un equipo propio con un secretario general de su entera confianza, la alcaldesa buscaría situar a una persona de su cuerda en la dirección provincial. Incluso, según señala un cargo del consistorio, propondría a un dirigente para la secretaría general. Los afines a Barberá aseguran que sería "lógico" que la capital tuviera representación en un cargo de esa envergadura en la ejecutiva provincial. De esta manera, quiere preservar que sus herederos políticos -el concejal Jorge Bellver es el mejor situado- dispongan de una buena posición en el partido para controlar la ciudad sin problemas.

Esta posibilidad es rechazada de plano desde la dirección provinical de Valencia. "La Ejecutiva de la ciudad la organiza Rita Barberá y la provincial, Alfonso Rus. Aunque dentro de la provincial sí están Silvestre Senent y Jorge Bellver, concejales de Valencia", destaca un alto cargo del PP provincial, que considera que con esta representación, la capital ya está "bien servida".

Con la llegada al poder de Alberto Fabra, la división del PP alicantino, el debilitamiento del presidente provincial de Castellón, Carlos Fabra, y del coordinador del PP, Juan Cotino; los dos ‘pesos pesados' del partido son Alfonso Rus y Rita Barberá. Desde ambos bandos aseguran que la ‘convivencia' entre estos líderes ha sido "aceptable" hasta la fecha, aunque admiten que existe "férrea vigilancia". Ahora, con el cambio de liderazgo en la dirección regional, la alcaldesa de Valencia tiene la intención de poner el acento en dirigentes de su confianza para que tengan mayor participación en el aparato orgánico.

EL FUTURO DE RITA BARBERÁ, EN EL AIRE

Mientras hay quien asegura que la alcaldesa de Valencia sólo saldría del Ayuntamiento de Valencia si le llegara la oferta de Mariano Rajoy para presidir el Congreso de los Diputados si el PP gana las elecciones, las fuentes consultadas por este diario se inclinan más por la continuidad de Barberá al frente del consistorio. Otra opción, esta menos probable, sería que la primera edil fuera la encargada de llevar el timón en el Senado. Así, la alcaldesa sigue barajando posibilidades mientras estudia las combinaciones para manejar la herencia de su reinado en al ayuntamiento. Eso sí, lo que nadie contempla es que Barberá pueda abandonar sus responsabilidades municipales por ser diputada rasa en el cámara.

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