VALENCIA (VP). ¿Bandera blanca por la crítica situación económica? Tal vez. ¿Ánimo de rebajar la tensión ante una opinión pública cada vez más defraudada por la clase política? Es posible. Fueran cuales fueran las razones, el desfile de portavoces de la oposición por la calle Caballeros en dirección al Palau de la Generalitat ofreció, además de un hecho insólito en los últimos años, un punto de partida en diversos asuntos que, hasta hace unos meses, resultaban inabordables de forma consensuada para las formaciones políticas valencianas.
El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra y los tres portavoces de la oposición, Jorge Alarte (PSPV), Enric Morera (Compromís) y Marga Sanz (Esquerra Unida), consiguieron, eso sí con matices, acercar posturas sobre la transparencia, infraestructuras, urbanismo o austeridad. El tiempo dirá si todo queda en un ‘brindis al sol' o si finalmente la clase política valenciana da un paso al frente ante la grave situación económica existente.
La primera en reunirse con Fabra fue Marga Sanz, en su debut en el Palau. A la salida del encuentro, la portavoz de Esquerra Unida aseguró que el presidente de la Generalitat se había mostrado "receptivo" en facilitar a la oposición los contratos que han solicitado a través de la cámara autonómica sobre el ‘caso Gürtel' o respecto al arquitecto Santiago Calatrava, algo que ya dejó entrever el jefe del Consell en su discurso de investidura. En este encuentro, también asumió la propuesta para "consensuar" el nuevo modelo de RTVV, una de las reivindicaciones ya casi históricas de la oposición.
Enric Morera, portavoz de Compromís, otro que pisaba por primera vez el Palau para reunirse con un presidente autonómico, fue el segundo en reunirse con Fabra. El dirigente también obtuvo una vía de diálogo en relación a los contratos de Gürtel y la transparencia pero, al igual que Sanz, no logró una respuesta positiva para abrir en Les Corts una comisión de investigación sobre la CAM. Morera se mostró especialmente incisivo con el ahorro en las arcas públicas, instando a que Fabra aplicara el "recorte" a los "enchufados" de las sociedades, fundaciones y empresas públicas de la Generalitat. El portavoz de Compromís subrayó a Fabra la intención de esta formación de "recuperar la credibilidad" en las instituciones y recordó lo ocurrido con la fallida designación de Joan Francesc Mira para el Consell Valencià de Cultura.
En cuanto al síndico del grupo socialista, Jorge Alarte, exigió un "radical saneamiento" de la Administración valenciana más "contundente" que el anunciado por la presidenta de la Castilla-La Mancha y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, una idea en la que también había incidido Morera. El líder del PSPV insistió en anteriores propuestas de su partido sobre la reestructuración del sector público, con el recorte de 130 empresas públicas y fundaciones que supondría, según Alarte, un ahorro 2.000 millones de euros.
El portavoz socialista remarcó el momento clave para el futuro del Corredor Mediterráneo, algo mentado también por los otros portavoces, y en lo que Fabra se mostró de acuerdo. También abordó la cuestión de RTVV y la transparencia, donde los otros síndicos ya habían abierto fuego anteriormente. Además, Alarte reclamó a Fabra el impulso de un gran acuerdo territorial con una nueva legislación urbanística, que el jefe del Consell aceptó debatir.
Según el presidente, dentro de los próximos 10 días, la vicepresidenta del Consell, Paula Sánchez de León, se pondrá en contacto con los portavoces de los grupos parlamentarios para escuchar sus reclamaciones, ya que será ella la interlocutora entre la oposición y el Consell.
FABRA AVANZA UN NUEVO RECORTE DE 400 MILLONES EN EL SECTOR PÚBLICO
Tras atender a los portavoces de la oposición, Alberto Fabra, anunció que se el Consell se encuentra ultimando un plan de reorganización de la administración pública, cuyo borrador será presentado este mes, en el que se prevé un recorte del sector público de un 20 por ciento. Esto supondrá un ahorro para las arcas de 400 millones de euros y se encuentra integrado en un "decálogo de consenso" que entregó ayer a los grupos.
El ahorro de los 400 millones de euros será complementario al Plan de Austeridad que ya está en marcha y con el que se prevé un ajuste de 1.800 euros para este año. Fabra destacó que la Comunitat "ha sabido hacer frente a los recortes de la administración central" y "seguir" con las políticas sociales.
Como medida de ahorro, Fabra se mostró dispuesto a estudiar un plan para que los altos cargos de la Administración no cobren un sueldo mayor que el del propio presidente quien, en tono distendido puntualizó: "En eso estoy de acuerdo y mi mujer también".
Preguntado por las medidas de ajuste previstas por el gobierno de Castilla-La Mancha, Fabra indicó que el déficit castellanomanchego es mayor que el de la Comunitat y que su situación "no es comparable" con la valenciana.
Dentro de este decálogo, también anunció una nueva ley de funcionamiento para RTVV y espera "consensuar" el nuevo modelo del ente público con la oposición para que "nos represente a todos". En cuanto a su director general, apuntó que la elección se realizará en las Corts Valencianes. En este sentido, añadió que RTVV no entra dentro de este plan de recorte anunciado.
VÍCTIMAS DEL ACCIDENTE DE METRO
A preguntas de los medios de comunicación, Alberto Fabra aseguró que este mes de septiembre se reunirá con la Asociación de Víctimas del Accidente de Metro, ocurrido en Valencia en julio de 2006 y en el que fallecieron 43 personas, algo que el anterior presidente de la Generalitat, Francisco Camps, había evitado en estos años.
Actualmente no hay comentarios para esta noticia.
Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.