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EL GRANO.
El nuevo líder de la patronal valenciana, José Vicente González, ya lo era desde antes de su elección. De fuerte carácter independiente, directo y claro, ha sabido ganarse el respeto del presidente del Consell frente a las insidias, y también el abrumador apoyo de los empresarios para alzarse ccomo la voz de los empresarios valencianos en tiempos muy difíciles.

EL GRANERO

-"La Generalitat ya en septiembre tiene que dar señales inequívocas de por dónde va a cortar"

-"Caso Camps: Las responsabilidades políticas se condonan con las elecciones, las judiciales, no"

-Cámaras: Que hagan lo que saben hacer bien y nosotros, lo que sabemos. No dupliquemos las cosas"

-"Euro: Los estados de la UE deben ceder más soberanía en bien de una política común"

-"Deuda: El Reino de España podría colocar, de alguna manera, la deuda autonómica en los mercados"

-"Bankia: Bajar el precio tanto parece que esté diciendo que la mercancía no es muy atractiva"

-"CAM: Tengo que pensar que la solución de la participación del Banco de España es temporal.

-Camps será juzgado por el caso de los trajes. ¿Esto debe llevar a la dimisión del presidente?
-Esa es una decisión que le corresponde al presidente. Quiero recordar que está imputado, no condenado. Habría que ver en el supuesto de que le condenen de qué le condenan, que parece que no está claro. En cualquier caso esta judicialización de la vida pública no es buena. Y este caso nos viene al pelo para decir: ¿Y la justicia no podría ir un poquito más deprisa? Porque llevamos con esta historia mucho tiempo y no parece que juzgar sobre esto sea algo complicadísimo. Y ya llevamos demasiado tiempo. Y ahora hay que constituir el jurado popular, y no sé qué más. Esto dura mucho. Y eso no es bueno para la persona en cuestión, ni para la institución.

-¿Cree que el caso está amortizado ya con las elecciones pasadas?
-Tengo muy claro que la justicia es una cosa y las elecciones son otra. No creo que unas elecciones puedan sustituir a la justicia. Ni la justicia a las elecciones.

-¿Y en la opinión pública?
-Eso es otra cosa. Las responsabilidades políticas que hubiese apreciado la gente, sí. Se pueden condonar con las elecciones. Las judiciales, no. Aunque hay mucha gente que dice que Montesquieu ha muerto, yo creo que el espíritu de la separación de poderes no podemos olvidarlo.

-Resultó muy peculiar que el patrón de patrones terminara su discurso de toma de posesión con un verso de Raimon...
-Porque es un cantante como Serrat, Miguel Rios, Victor Manuel de mi época de juventud. Coincidí con él haciendo milicias en Ronda.

-Sí, pero citar a un icono de la izquierda... ¿es su particular 15-M?
-No, no es mi particular 15-M. La respuesta a su pregunta es ¿por qué no citarlo? Venía bien al final aquel verso. Realmente la parte que adapté es la de "...tots junts si no volem perdre-ho tot". Yo quité lo de "eixint al carrer", porque eso sí que era 15-M puro. Lo cambié por "tenim que trebajar tots". 

-Desde que tomó posesión a principios de mes, ¿han empeorado las cosas?
-Hemos pasado lo peor, pero tenemos siempre una espada de Damocles encima. Hemos pasado lo peor porque nosotros estábamos el año pasado con un crecimiento negativo de poco más del 3% y estamos ahora en un crecimiento positivo, raquítico, pero previsiblemente acabemos el año con un crecimiento positivo del 0,8% o el 1%. Cierto que es positivo respecto a un año que era muy negativo. El problema es que con esos crecimientos no vamos a generar empleo.

-Usted habla de un 3% para crear empleo...
-Con un 2 o 2,5% ya se empieza a crear empleo... con el modelo tradicional español. Pero está habiendo un cambio en el modelo productivo, poco a poco, y claro el objetivo sería que en unos años lo cambiáramos de verdad para que nos pasaran cosas como Alemania, que con un 1% ya genera empleo. Ese es el gran reto para nuestro futuro, pero pero va a llevar tiempo coneguirlo.

-Pero volviendo al inicio de la respuesta...
-Sí. Efectivamente tenemos esa espada de Damocles de los mercados, que nadie sabe muy bien quienes somos, pero pueden pasar cosas como con Grecia o con Italia, ahora. Yo espero que los mercados se calmen un poquito estos días. Pero nos queda un tiempo de vivir con un sobresalto permanente.

-Y también Estados Unidos...
-Bueno, pero yo creo que la diferencia sustancial entre Estados Unidos y Europa es que Estados Unidos tiene un presidente. Si eso que ha dicho Obama de que si el Congreso no aprueba la ampliación de la deuda el país entra en bancarrota, lo dice cualquier dirigente europeo, nos borran del mapa los mercados internacionales. Europa, como Europa, no tiene ningún liderazgo y los mercados necesitan la confianza de que hay alguien que toma las decisiones.

-Trichet proponía crear un ministerio económico europeo. ¿No sería mejor ir más allá, a crear un gobierno europeo?
-Es posible que con las mismas instituciones que tenemos las cosas pudieran funcionar. Si hubiera líderes, pero es que no hay. Yo no veo ningún liderazgo en Europa, ninguno. Lo que pasa es que creo que el euro nació cojo porque tenemos una unión monetaria, pero sin una unión económica y una unión fiscal queda muy débil. Estoy de acuerdo con Trichet. Ir hacia adelante en el euro significa que los estados miembros de la UE cedan más soberanía de la que han cedido hasta ahora. ¿Estamos dispuestos? Deberíamos porque yo no veo muchas más soluciones.

-Y de Valencia. ¿Cómo ve los primeros pasos del nuevo Consell?
-Hay una actitud positiva en sus primeros pasos. Reconocer que hay un problema importante ya es un paso. Los consellers tienen que aterrizar y despegar a mayor velocidad de la que se hace normalmente, porque no hay tiempo. Sinceramente creo que en eso están, pero después habrá que tomar decisiones probablemente impopulares y algunas de ellas que exigirán determinación política.

-Pues el aterrizaje es que el nuevo conseller ya es consciente de que la situación es tan grave que tiene que decidir entre pagar los salarios, a los proveedores o los vencimientos de la deuda...
-No, no. La situación es que no hay otra alternativa que la Generalitat, como cualquier institución, como cualquier ciudadano, tiene que pagar las nóminas, tiene que pagar a los proveedores y tiene que pagar lo que deba. Porque no cabe otra posibilidad. Tomándose las precauciones que haya que tomarse con un plan consesuado. Es verdad que es un momento muy difícil en el que la Generalitat tiene dificultades para renovar las líneas de créditos porque los mercados están cerrados para todas las autonomías, para todas. Ninguna tiene financiación en el exterior y no hay suficiente ahorro en el interior. Si hubiera suficiente ahorro en el interior todos colocarían los bonos patrióticos y saldrían del problema. Pero no hay, aparte de que es carísimo: el 7,75% es una barbaridad.

-¿Y qué solución ve para eso?
-Pues que de alguna manera el Reino de España, que sí está colocando sus emisiones, no diré que avale, porque no sé si es posible, pero sí que de alguna manera se encargue busque la forma de colocar en los mercados internacionales la deuda autonómica, porque las autonomías no van a poder, al menos en el horizonte próximo. Eso lo hace Alemania, con los landers. Sin olvidar que hay que revisar el actual sistema de financiación de las autonomías con el que la Comunidad Valenciana está claramente perjudicada.

-Usted ya criticó la pérdida de las dos cajas valencianas, ¿cómo ve el resultado final de Bankia y la situación actual de la CAM?
--Es de interés nacional -aunque nunca he tenido metro (ironiza) para medir el interés nacional- que la colocación de Bankia se cumpla satisfactoriamente en la salida a Bolsa. Y se va a cumplir. Porque en esta vida todo se compra y se vende y la propuesta tiene un precio fenomenal. Aunque a mí no me gusta que se vendan las cosas tan baratas porque que parece que estés diciendo que la mercancía no es muy atractiva o por lo menos no muy atractiva. Creo que van a colocar la emisión porque está a muy buen precio y además nos vendría muy bien a los españoles porque sería una señal muy clara a los mercados.

-¿Y en el caso de la CAM?
-Es distinto porque está en una fase mucho más embrionaria que Bankia. Realmente empezó la carrera antes pero ha pasado por un sinfín de avatares, anda buscando financiación de socios que aporten capital, pero de momento no los encuentra o los que ha encontrado imponen una serie de condiciones que no son aceptables. Ojalá todavía encuentre socios adecuados. Nacionalizar o no, dependerá de la valoración que se haga de la empresa. Pero me gustaría pensar en el futuro. Se saneará, se pondrá bonita y, como es lógico, el Estado saldrá del capital ¿quién la va a comprar y a dónde vamos a ir a parar? Esa es la historia. Porque tengo que pensar que la solución de la participación del Banco de España es temporal.

-¿En las reformas laborales y fiscales se ha avanzado suficiente?
-La UE europea reconocía que se han hecho avances pero urgía a acabarlas. Por ejemplo la ampliación de la jubilación a los 67 años todavía está dando vueltas entre el Congreso y el Senado y eso hay que acabarlo ya. Tenemos delante un examen brutal y es que si no vamos a ser capaces de cumplir el déficit del 6% de este año, lo que nos dice la UE es que se tiene que cumplir sí o sí y que si hay riesgo de incumplimiento que se tomen las medidas suplementarias para que se cumpla. Y en las advertencias también avisaba sobre el riesgo de incumplimiento de las comunidades autónomas.

-¿Está avanzando la Generalitat en esa dirección? Porque llevamos mucho retraso...
-Llevamos mucho retraso... aquí y en todas las comunidades. Y a medida que pasa más tiempo a nosotros nos queda menos tiempo. La Generalitat ya en septiembre tiene que dar señales inequívocas de por dónde van los tiros, por dónde van a cortar. Estamos muy mal financiados por el Estado pero hasta que se resuelva tenemos que vivir y aquí hay que coger la tijera y cortar todo aquello que no sea imprescindible.

-A usted, que fue el primero en lanzar el debate, no parece que le hayan hecho mucho caso en su propuesta del copago.
-El copago no creo que sea una solución económica. Dije que el copago debería ser algo testimonial.  No podría aplicarse a los enfermos crónico, personas con la pensión mínima, etc.Estamos por debajo de la media europea en cuanto a gasto per cápita en Sanidad, digo de la CV, pero bastante por arriba en el número de visitas al médico, cosa que no parece tener mucho sentido. De todas maneras hay mucho que hacer en la Sanidad, como los gastos farmacéuticos o ese 20% de absentismo, cuando la media es del 3,5%. ¿Qué pasa? ¿Es que cuidan de nuestra salud los que están más enfermos? Muy raro, ¿no?

-Una de sus líneas programáticas es reducir el número de asociaciones, ¿cómo lo han recibido? ¿de uñas?
-No. Igual los que no están de acuerdo no me lo dicen, pero al menos con todos los que he hablado están de acuerdo. Otra cosa distinta va a ser cuando la tijera le toque a uno mismo. Por eso digo que es un objetivo, que nadie espere milagros, porque eso no se puede hacer por real decreto. Cada uno es libre y los empresarios también para organizarse y reunirse con quien le parezca oportuno. Creo que debe empezar una labor de convencimiento que tiene que empezar desde aquí y ya ha empezado.

-¿Y por qué empeñarse en mantener las cámaras?
-Porque es un activo empresarial. Aunque sea una entidad de derecho público. Están ahí y hay que utilizarlas. Y las cámaras hay cosas que hacen muy bien. Por ejemplo, el centro Luis Vives es un ejemplo muy positivo. ¿Qué tenemos que hacer con las cámaras? Que se dediquen a hacer lo que saben a hacer bien y nosotros, las organizaciones empresariales, lo que sabemos hacer bien. Y no dupliquemos las cosas.

-El nuevo estilo empresarial que usted encarna incide mucho en la Administración, pero me parece que se corre cierto peligro de pretender gobernar desde la sociedad civil, sin que nadie les elija en las urnas.
-A veces nos echan sobre las espaldas más responsabilidad que la que nos corresponde. Tengo muy claro que nosotros no somos la sociedad civil, somos parte de la sociedad civil, una parte importante, y los gobiernos representan a todos los ciudadanos. Nosotros no podemos caer en la tentación de querer gobernar, pero habida cuenta que esta sociedad civil nuestra está muy desestructurada, dentro de esa desestructuración, las asociaciones empresariales somos de los más organizados. Por tanto tenemos que asumir nuestro papel y decir qué es lo que pensamos, y lo que creemos que debería hacerse desde el punto de vista empresarial, pero cada uno en su sitio ...Y por cierto quiero rebatir la mayor. ¿Que a nosotros nadie nos ha votado en las urnas? No, perdón, los empresarios me han votado, a mi con la misma legitimidad, sólo referido al mundo empresarial, pero con la misma legitimidad que al presidente del gobierno.

-¿Se han acabado las reticencias con Castellón?
-Si, yo creo que aquello fue fruto de un momento que ha pasado. He recibido todos los apoyos de Castellón.