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La actividad productiva del sector del metal en la Comunitat Valenciana ha crecido un 4,5 por ciento en el primer trimestre, pero la caída del 30% registrada en 2009 sigue pesando demasiado y no se prevé una recuperación en el corto plazo
VALENCIA (VP). El último Informe de Coyuntura del sector metalmecánico de la Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana (Femeval) indica que todos los subsectores que integran el metal presentan signos de recuperación excepto la construcción de maquinaria, que ha registrado una caída del 16% entre enero y marzo.
La caída de la inversión productiva y el exceso de capacidad instalada en las empresas son los factores causantes del mal dato del subsector de la maquinaria.
A pesar de que los datos del primer trimestre son en generales positivos tras dos años de descensos, el índice de actividad productiva muestra un aumento menor que el experimentado en el último trimestre de 2009, que tuvo un incremento del 10,2% respecto al mismo periodo de 2008.
Estos resultados, según Femeval, indican una normalización de la actividad tras el "empujón" que recibió el sector gracias a los planes de estímulo a la automoción.
Ante el bajo crecimiento económico, las empresas han paralizado cualquier inversión no esencial y están manteniendo las plantillas en los niveles mínimos.
En relación al índice de ventas generales, sigue ascendiendo por segundo trimestre consecutivo debido a la mejora de los resultados de los subsectores de industria y comercio, así como a la ralentización de la recesión que afecta al sector de las instalaciones.
El sector del metal continúa sin crear empleo y se ha producido un descenso de más de 600 puestos de trabajo de enero a marzo, un 0,85% menos respecto al cuatro trimestre de 2009 y un 21,2% en relación al primer trimestre del año pasado. En total, existen 21.833 puestos de trabajo menos que a principios de 2009.
La debilidad de la demanda aparece como principal factor limitador de la actividad de las empresas, seguida de las dificultades de financiación y tesorería.
La morosidad y los largos plazos de pago, junto a la dificultad de acceso a financiación externa, son los principales problemas financieros señalados por las empresas.
Las exportaciones arrojan datos positivos, con un incremento del 43% del valor de los productos exportados, aunque el sector de la iluminación ha tenido una caída de las ventas del 5,5%.
La encuesta de Femeval indica para el segundo trimestre de este año que la situación es de estancamiento en la actividad y los empresarios no esperan una recuperación y expansión en un largo periodo de tiempo.
En cuanto al empleo, se apunta a una ralentización de la destrucción del empleo ya que el 74% de las empresas tiene intención de mantener el mismo número de trabajadores en plantilla, mientras que el 20% considera reducirlo.
Para los próximos meses destaca la mejora de las expectativas del comercio, que por primera vez se sitúa en valores positivos, mientras que el subsector de venta y reparación del automóvil espera una tendencia al empeoramiento como resultado del fin de los planes de ayuda del Gobierno y el incremento del IVA.
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