VALENCIA. ¿Era necesaria una prueba más para comprobar cómo va todo esto a la deriva, cómo no se actúa y cómo la economía valenciana -de la mundial ya hay sabios que la cuentan- se encuentra paralizada, además de por la crisis, por la parálisis que sufre el presidente Camps y, por ende, el Consell desde que asomó la patita el escándalo Gürtel en forma de trajes de tienda de prêt-à-porter? No, no era necesaria.
Todo el mundo está abrumadoramente de acuerdo en que esto es insostenible y que la Generalitat Valenciana está congelada con el nitrógeno líquido que tiran Correa, El Bigotes, Garzón, el Supremo, etc. No era necesaria ninguna prueba de todo ello, pero llegó el lunes desde Alicante. La CAM se la lleva Caja Madrid; no, la CAM se une a Caja Murcia; no, ahora se rompe el acuerdo por la soberbia, como dijo este periódico, de los murcianos... ¿pero no éramos amigos, no se han reunido Camps y Valcárcel más de 50 veces en los últimos años?
Estábamos esperando a ver si cerraba o reabría el Supremo la causa menor de la trama corrupta, los dos o tres trajes del president, y saltó la liebre en el sur. ¿Pero quién gobierna aquí, señor mío? ¿Pero quién marca los tiempos en esta tierra, por Dios? Nadie. La imagen fue casi bananera. Y desde la CAM, no digamos: convocatoria del consejo, convocatoria ordinaria-urgente... para qué? ¿No había acuerdo cerrado? Mala imagen, pues.
Pero lo peor, de verdad, fue la sensación de desgobierno, de descontrol, de ejército de Pancho Villa que transmitía todo eso y que la CAM se nos iba por culpa de la falta de liderazgo de nuestro otrora 'conqueridor'. Eso fue lo peor: el ver ya de cerca que Rodrigo Rato conseguía para Madrid su sueño, su reto, un importante refuerzo en su particular pulso con Barcelona y que aquí nos quedábamos con "cara de gilipollas" como diría en recordada frase Jesús Barrachina...
De acuerdo que el Banco de España ve con muy malos ojos la fusión de Bancaja y la CAM. Pero Feijóo, con el mismo impedimento, marcó el rumbo y lo mantuvo, hasta con manifestaciones en contra. Pero nuestro president no está para echarle el pulso a nadie: ni a Valcárcel, ni a MAFO, ni a Ripoll, ni a la calle. Bastante tiene con el octavo pasajero bigotudo que se le coló en su cabeza. Y así nos va. Encima con una oposición encabritada por la patada histérica que le dio durante la renovación de consejeros de Bancaixa a los socialistas en el culo de José Camarasa. ¿Gürtel nos ha costado una caja? Lo veremos.
La fusión no está en vía muerta porque Caja Murcia no salió y porque a Camps le han llovido las presiones. Mucha gente ha mostrado ahora su interés en la fusión, el miedo a que la CV pierda la CAM. Gente que hasta ahora estaba calladita, al menos en público. En estas negociaciones, quien muestra más desgana y cuenta con más tiempo por delante es quien se lleva el gato al agua, con perdón. Y es posible que esté hablando de José Luis Olivas... la fruta está ya madura y buscando comprador.
¿ Se va o no se va Camps?
Claro que se va. Pero lo importante, lo trascendente es cuándo. Se irá por su propio pie, faltaría más, pero no se sabe a dónde, ni cuándo. Vuelve el reconfortante despacho de Iberdrola, pero eso es ya una recurrencia urbana, si no una leyenda urbana. Pero no es ese el pensamiento. El pensamiento, ya se ha visto, es aguantar y adelantarse. Dos verbos importantes en la estrategia del president, no lo olviden nunca.
Aguantar le gusta, es un reto para sí mismo, una satisfacción íntima que sólo conocen los jugadores de tenis. El tiempo va a estar a su favor: los mejores cálculos que se han hecho sitúan un hipotético juicio - el president lo desecha directamente porque no hay nada de nada y lo sabe todo el planeta- próximo a las elecciones del año que viene. Dilatar pleitos es lo que mejor se le da a su abogado Javier Boix. Con suerte el juez Pedreira une los trajes a la presunta financiación ilegal del PP. Entonces el caso saltaría la barrera de los comicios. Pero, en cualquier caso, se puede llegar fácilmente a las puertas de las urnas y en ese momento obraría el principio de prudencia de los tribunales, que nos habla de esperar a que concluyan los procesos electorales antes de dictar sentencia sobre algún asunto que concierna al debate político.
No obstante sería penoso ver a un candidato del Partido Popular, presidente del Consell por más señas, sentado en un banquillo de la Audiencia y en el parterre de fuera una pancarta electoral colgada de una farola con su cara pidiéndonos el voto.
Aguantar traerá mover el banquillo, cambiar cosas, emprender proyectos importantes, transmitir sensación de gobierno. Su vigorosa y convincente intervención ante la prensa el miércoles, después de apabullar a la convencida junta directiva del PP convocada casi personalmente por él, forma parte del plan, el primer capítulo.
Pero el Partido Popular en Madrid no está por aguantar más. Sabe que cualquier candidato que ponga será bueno, incluso mejor, como es el caso de Rita Barberá o el mismo Alberto Fabra. Sabe además que lo mejor sería encontrar un nuevo candidato con una proyección de otros ocho años de gobierno. Mantener a Juan sin Miedo lastraría el futuro del PP, si bien no de inmediato... O sí, si hemos de creer a Jorge Alarte.
Ante eso puede estar la otra opción, la de adelantar. La de subir a la red, que se diría en el deporte favorito del president. Adelantarse con unas elecciones anticipadas al desgaste del partido, adelantarse al desgaste, más, del presidente y ganarse, con un plebiscito, cuatro años de absolución popular y barrer al PSOE ese periodo de tiempo. El primer paso para ello es montar la gran fiesta del tercer aniversario del triunfo electoral del PP y el segundo, una apresurada convocatoria del comité electoral. Ambas cosas ya están encargadas.
Pero no es tan fácil. Unas elecciones autonómicas adelantadas significa menos participación. Y eso es harina de otro costal. Hay quien ha empezado a echar cuentas, si no las ha echado ya... y no salen. Hay municipios a los que le perjudicaría esta opción, algunos de ellos principales para el PP.
La parábola del petardo
Anda circulando por internet un vídeo de no se sabe qué fallas en Valencia. Parece que es después de la cena que monta habitualmente el Ayuntamiento de Valencia para la "plantà". Rita Barberá tira sin parar trons de bac a los pies de Jorge Alarte y Carmen Alborch en las afueras de una carpa fallera. Ella está algo más que divertida, y vuelve una y otra vez sobre ellos, pero los del PSOE no saben cómo parar ese bombardeo ante la sonríente mirada de una periodista. Se admiten todo tipo de interpretaciones.
El brote verde de la semana
Después del feliz alumbramiento del Punto del Carmen en el que se unen talento e impulso social, arte y ocio, hemos vivido la reubicación de Las Cuevas, establecimiento que no necesita más presentación en Valencia. José Casaña y Pilar Gómez han peleado con normas urbanísticas, bomberos, que esto de invertir en el centro histórico tiene sus inconvenientes, y supongo que con bancos, pero han conseguido trasladar el ambiente de Las Cuevas originales al nuevo local, también en la misma calle pero con otra puerta recayente a la plaza Cisneros.
¿Garzón tira nitrógeno en la Comunitat? Ay! ay! Lo que tira nitrógeno es el 14,3 % del PIB de Déficit Público. O sea 14.500 M€ + los 6.500M€ en facturas por pagar. Por cierto, aquí "también" se pagan votos (Fabra, dixit) y también se tiene "cogidos" a los que se le debe. Luego está el "nitrógeno" del paro. Oiga todo un 23,3%, cuando la media nacional es del 20% ¡que ya está bien pa alimentar el negro o B!. No son menos nitrógeno los 5.700M€ que cuesta la nómina de personal de la Generalitat, que supone el 38,8% del total del presupuesto. Y esos no son funcionarios, porque en otro cuadro "El Mundo" explicaba que en relación a la población el número de funcionarios estaba en la media. O sea los que están en el "machito" se los llevan pero bien!! Eso sí es "nitrógeno" Y desde luego lo es el Mecanismo Popular, que Vd. que ha dirigido un periódico que se"tienta las ropas" a la hora de informar, sabrá que es pagar por obra, bien o servicio 25 lo que vale 5. Sí los "sobre" costes ¡¡eso sí es "nitrógeno puro" Pero en este Levante feliz ¡ a ver quien le pone el cascabel al gato! Los jueces ¡ay! los jueces de por aquí, mamma mía, los que menos. Y esos tienen una gran parte de la culpa, sin que los "actores" la tengan menos. Porque además de "agradecidos", los que cobran y a los que deben, lo primero que hacen "todos" es matar la más minima esperanza de cambio. Eso también en "nitrógeno"puro.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.