MADRID (EFE). El grupo francés de distribución Carrefour anunció hoy que prevé abrir entre 450 y 750 establecimientos de su filial Dia cada año, hasta sumar un total de 8.000 tiendas en el 2013.
Carrefour, que presentó este martes su nueva estrategia en una jornada dedicada a los inversores, señaló en un comunicado que Dia -que saldrá a bolsa en España- pretende incrementar el peso de las franquicias del 32 % en 2010 al 40 % en 2013, así como reducir los costes en 230 millones de euros de aquí a 2012, incluyendo los 100 millones del periodo 2009-2010.
La casa matriz justificó la escisión y la salida a bolsa de Dia, una vez que obtenga la autorización de la Comisión Nacional del Mercado de Valores de España, porque "consagrará la emergencia de un valor estrella de la distribución en el segmento del descuento".
Dia facturó cerca de 10.000 millones de euros el pasado año, con una red de 6.373 establecimientos en siete países y 45.000 empleados.
Para el periodo 2010-2013, la filial se ha marcado como objetivos un incremento medio anual de la facturación del 7 %, un alza media del resultado bruto operativo (Ebitda) en efectivo y ajustado del 10 % e inversiones de entre 300 y 350 millones de euros.
Por otro lado, Carrefour aportó algunos detalles sobre el giro en su estrategia que supuso el pasado día 5 cuando anunció un aplazamiento de los planes para sacar a bolsa su filial inmobiliaria, así como la sustitución del director ejecutivo en Francia, James McCann.
Hoy, el gigante francés de la distribución reiteró que Carrefour Property "está unida con una relación única y creadora de valor" con su casa matriz, y eso "sirve los intereses tanto de la una como de la otra".
En este nuevo contexto, Carrefour Property tratará de sacar partido de los activos inmobiliarios de Carrefour en Francia, España e Italia a través de la realización de proyectos por un monto de 2.000 millones de euros en los próximos cinco años, y con ello "se prepara a una futura" salida a bolsa.
La filial inmobiliaria cuenta con unas 900 tiendas, de las cuales 300 son hipermercados en estos tres países, y eso representa una superficie de 4,4 millones de metros cuadrados y un valor bruto patrimonial de 10.400 millones de euros y unos ingresos por alquiler de unos 700 millones de euros el pasado año.
El grupo francés de distribución minorista Carrefour ha confirmado sus objetivos de ventas y beneficio operativo para 2011, aunque reconoce que la situación en Europa occidental sigue siendo "difícil", pese a los "signos alentadores" vistos en España y Bélgica.
Durante la celebración del 'Día del Inversor' en París, Carrefour presentó además la escisión de Dia y la implementación de su programa de desarrollo de su filial inmobiliaria, Carrefour Property, como "dos movimientos decisivos" para apoyar la estrategia de la compañía e impulsar la creación de valor para los accionistas.
"Carrefour está dando un nuevo paso hacia adelante en la implementación de su estrategia. Con la propuesta escisión del 100% de Dia, que ya está lista para convertirse en una empresa independiente, Carrefour será capaz de concentrar su atención en nuevos desarrollos de la marca y el estandarte Carrefour", defendió Olofsson.
Asimismo, subrayó que, implementando la estrategia de Carrefour Property en Francia, España e Italia, obtendrá todos los beneficios de una gestión más centrada de su cartera de propiedades que vaya "mano a mano con la puesta en marcha de Carrefour Planet".
La firma defendió que Carrefour será una compañía "más ágil, más fuerte, más centrada y más dinámica", así como que sus accionistas se beneficiarán directamente del crecimiento futuro de Carrefour, el valor creado por Carrefour Property y el potencial de crecimiento de DIA.
"Los alentadores resultados que estamos viendo de Carrefour Planet, nuestro nuevo concepto hipermercado, y la ejecución continua de nuestro Plan de Transformación subrayan nuestra confianza de que vamos por el buen camino para lograr nuestros objetivos", incidió.
Respecto a la previsión para 2011, el grupo francés destacó que, en general, el mercado se ha caracterizado por un importante incremento de los precios de las materias primas, que han afectado a las negociaciones con los proveedores.
En esta línea, destaca que la situación en Europa occidental sigue siendo "difícil" en la mayoría de los mercados, pero se han visto "signos alentadores" en Bélgica y España. En Francia, el consejero delegado ha tomado temporalmente el control directo del negocio para mejorar la ejecución y el desarrollo de su política comercial tras los "insatisfactorios" resultados registrados este año hasta la fecha.
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