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VALENCIA (VP). La distribuidora valenciana de juguetes, Toy Planet, que cuenta actualmente con 198 establecimientos por todo el territorio español prevé superar las 200 tiendas durante el presente ejercicio. La firma con sede central en Ribarroja se ha convertido en la primera compañía nacional de su sector tanto en presencia como en volumen de venta.

El grupo empresarial ocupó una cuota de mercado del 6% en 2010, con 85 millones de euros facturados, un 5,8% más que el año anterior y un 6,5% más de ventas. Además, abrió diez nuevas tiendas, consiguiendo un total de 190 puntos de venta y dando empleo directo a 600 trabajadores. Desde 2003, la tasa de apertura de establecimientos ha sido de entre 15 y 20 al años. En estos primeros cinco meses, la cifra ya se ha incrementado con ocho aperturas más, por lo que la empresa considera probable superar las previsiones iniciales que señalaban que concluirían 2011 con 200 nuevos centros. Actualmente disponen con un total de 50.000 metros cuadrados de superficie. En la Comunitat, cuenta con cinco socios que suman un total de 19 tiendas repartidas por Castellón, Valencia y Alicante.

Pese al contexto general de crisis, el sector juguetero nacional ha logrado mantener una evolución positiva durante los últimos años. Causa de ello es la alta estacionalidad de la demanda del producto. Las ventas en época de Navidad pueden llegar a suponer entre el 70% y 80% del total, contando con el verano y Carnavales como las otras dos temporadas fuertes. Si bien esta temporalidad puede resultar un problema en la expansión y crecimiento de esta industria, a su vez ha resultado un freno al arrastre de la crisis, al no estar sujeto a las variaciones que tiene el mercado.

Precisamente, para combatir esta característica del juguete, este año, la distribuidora proyecta reforzar su línea de puericultura Petit Planet, "dado que nacen niños durante todo el año", explica la portavoz de la firma, y Garden Planet, de mobiliario de exterior.

El modelo de negocio de Toy Planet combina la cercanía de la juguetería tradicional con las ventajas de una gran cadena de asociados con servicios compartidos. Mediante este esquema, se consigue "precios más competitivos al ser una central de compras que adquiere el producto en mayores cantidades y ayuda a abaratar costes".

El plan de expansión que prevé el grupo va encaminado a incrementar los puntos de venta, a ampliar la oferta de productos y a diversificar el mercado con nuevas líneas de negocio. Con todo ello, en un plazo máximo de dos años, tienen previsto inaugurar 30 establecimientos, ofrecer más de 200 artículos nuevos e incrementar un 15% la facturación (hasta 92 millones de euros en 2012, según sus previsiones).

CHINA, ALIADA Y COMPETIDORA

Para mantener un crecimiento positivo, el sector ha debido combatir con la fábrica del mundo, China. Para ello, la firma valenciana ha seguido una política con distintas vertientes. Por una parte, han mantenido "alianzas con la industria juguetera china en lo que se ha podido", sin oponerse a ella por completo. Por otra, compiten "mediante la calidad".

De los más de 5.000 modelos de juguetes diferentes que se encuentran en los lineales de sus puntos de venta, el 80% tiene procedencia nacional y el 20% restante es producto de fabricación propia o marca blanca.

Esta política de diferenciación incluye la promoción de la industria valenciana del 'Valle del Juguete' (Ibi, Onil, Biar, Tibi y Castalla) y la "calidad de servicio y atención, puesto que pese a ser un grupo empresarial muy grande, se presta mucha atención a la pequeña juguetería de barrio".

En febrero de este año, la cadena nombró a su socio de Navarra, Rafael Errea, nuevo presidente de la compañía para los próximos cinco años. Errea es propietario del establecimiento Toy Planet Eregui que la cadena de jugueterías tiene en la localidad navarra de Villava.

Errea proyecta consolidar Toy Planet como grupo detallista de referencia en el sector, "incentivando el crecimiento interno vía apertura de nuevos puntos de venta y consiguiendo captar la atención de aquellos independientes o competencia para que se unan al proyecto, sin perder de vista que en el futuro habrá una concentración de la distribución, quedando sólo dos o tres grupo importantes de detallistas".

Pese a contar con alianzas con los fabricantes chinos, el presidente busca mantener la línea de cooperación y trabajo con proveedores nacionales, "que permita a Toy Planet seguir teniendo la máxima colaboración con ellos para poder mantener el equilibrio de surtido en la tiendas".

Y, sin obviar al aliado y competidor, la distribuidora proyecta a largo plazo optimizar al máximo los recursos puestos en marcha en China "para asentar las líneas propias de producto así como encontrar nuevas oportunidades de negocio".