VALENCIA (X. A). El mitin central de una campaña electoral siempre es motivo de debate. En el PPCV lo tienen claro desde hace años: la Plaza de Toros de Valencia es 'su' casa. No obstante, llegaron a celebrar actos históricos en otras ubicaciones como el estadio de Mestalla, que consiguieron llenar (55.000 personas) en el año 1996 con José María Aznar como estrella invitada. Más tarde, en 2003, se volvió a intentar en el estadio del Valencia CF pero, pese a concentrar a un importantísimo número de simpatizantes, no pudo repertirse el hito. La dirección popular estimó que era una exhibición de 'músculo' agotadora e innecesaria y regresó a la Plaza de Toros, donde suelen conseguir que quede gente fuera del recinto por encontrarse lleno hasta la bandera.
En el PSPV, por el contrario, habían abandonado el coso taurino por la Fuente de San Luis, con menor capacidad. El aforo de la Plaza de Toros se estima en torno a 15 o 16 mil personas, mientras que el pabellón puede albergar a entre 9.000 y 11.000 espectadores, aunque es susceptible de realizar trucos para reducir su capacidad para evitar 'patinazos' si la situación lo requiere.
Cuando Joan Lerma presidió la gestora del PSPV tras la dimisión de Ignasi Pla, incidió en la importancia de regresar a la Plaza de Toros si querían recuperar la hegemonía en la Comunitat. Así se hizo en la campaña electoral para las elecciones generales de 2008, cosechando un lleno absoluto.
De cara a los comicios autonómicos surgió el debate. El secretario general del PSPV y candidato a la Generalitat, Jorge Alarte, pujó fuerte por arriesgar y celebrar el mitin central de campaña en el recinto utilizado por el PP. Pese a existir discrepancias dentro de la formación socialista, el líder del PSPV impuso su criterio y hoy verá cumplido su objetivo. Si consigue el lleno, claro. De no ser así, el candidato socialista se verá en un apuro en presencia del presidente del Gobierno y todavía secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero.
Sillas vacías hoy en la Plaza de Toros de Valencia -los medios estarán ojo avizor con esta posibilidad- simbolizarán ante la cúpula del PSOE una inminente derrota electoral que, además, podría perjudicar la ya 'tocada' imagen del propio Zapatero y dejar en evidencia su poder de convocatoria. Pocas bromas con esto.
280 AUTOBUSES Y PREVISIONES DE LLENO ABSOLUTO
Para conseguir su objetivo, el PSPV ha fletado más de 280 autobuses que partirán de diversos puntos de la Comunitat Valenciana para acudir al acto en el que, además de Rodríguez Zapatero y Jorge Alarte, también participará el candidato a la alcaldía de Valencia, Joan Calabuig.
Así lo explicó a los medios de comunicación el coordinador electoral del PSPV, Víctor Sahuquillo, quien se mostró "convencido" de que asistirán más de 16.000 personas, por lo que llenarán el coso de la calle Xàtiva.
Sahuquillo, acompañado del coordinador de Organización de actos centrales del PSPV, Vicent Sarriá, y el vicecoordinador de Planificación y Organización de actos públicos, Rafael Rubio, recorrieron la Plaza de Toros para comprobar los trabajos que se están realizando con motivo del acto central de los socialistas valencianos.
"Los socialistas valencianos estamos completamente movilizados", destacó el coordinador electoral del PSPV, quien incidió en que todo el partido está "volcado" en el acto del sábado. A juicio de Víctor Sahuquillo, va a suponer "el punto de inflexión de esta campaña", a ocho días de las elecciones autonómicas y municipales del 22 de mayo.
Asimismo, el dirigente del PSPV hizo hincapié en que el acto en el que participará Rodríguez Zapatero será "un gran fiesta y una gran inflexión para el final de la campaña de los socialistas valencianos".
"ALGO MÁS QUE UN MITIN"
Por su parte, el secretario general del PSPV y candidato a la Generalitat, Jorge Alarte, preguntado por esta cuestión tras reunirse con una delegación de CCOO-PV, aseguró que el mitin del sábado "supone un acto de dignidad, no sólo un acto del PSOE, que por supuesto lo es, sino una reivindicación de nuestro proyecto de honradez, de dignidad y de futuro para los valencianos".
En este sentido, insistió en que "es algo más que un mitin" y supone "un mensaje para el conjunto de la sociedad valenciana", porque "hay algunos -afirmó- que están empeñados en que la izquierda de esta tierra y los progresistas de la Comunitat Valenciana nos veamos ad eternum como derrotados", a lo que, proclamó, "les digo que no".
A su juicio, "es posible, estamos decididos y estamos resueltos" y mañana (por hoy), vaticinó, "será una buena demostración de los ciudadanos y de las ciudadanas de que es posible", porque "hay un voto de honradez, hay un voto de dignidad y hay un voto de futuro en esta tierra, y además, creo que es el mayoritario; tenemos que hacer que vayan".
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