VALENCIA. Pocas cosas pueden destacarse de un ‘debate' tan insípido y encorsetado como el de anoche. Una de ellas, la activación como líder del candidato de Compromís (formada por Bloc, Iniciativa y Verds), Enric Morera. Dentro de las formaciones que integran la coalición hubo división de opiniones sobre la conveniencia de impulsar al líder del Bloc como aspirante en vez de a la activa Mònica Oltra. Sin embargo, Morera ganó puntos ayer transmitiendo sobriedad, credibilidad y cercanía al espectador.
Marga Sanz, aspirante de EU, no estuvo mal, aunque en conjunto su aportación fue más bien gris, sin ‘punch'. En su primera intervención, con el tema de señas de identidad como eje central, fue fiel a los postulados de su partido: País Valencià, unidad de la lengua, defensa de TV3... Vistos los resultados electorales que se dan en la Comunitat, pasar de puntillas sobre estos asuntos tal vez le permitiera abrir el abanico de votantes. Estuvo bien recordando las competencias en empleo de la Generalitat y mostró su mejor versión en el apartado de Educación aunque no terminó de redondear sus intervenciones.
Jorge Alarte, candidato socialista, pecó del ‘síndrome del espejo'. Su discurso parecía mil veces ensayado y poco espontáneo, aunque puso tesón y ganas en transmitir su repetida dignidad al televidente. Fue el que pegó primero al criticar con firmeza el modelo de debate propuesto por la cadena pública valenciana. Un formato que el moderador Xavier Carrau, insistió en atribuir al Consejo de Administración de RTVV "compuesto por varios partidos políticos" (unos con más representación que otros, claro).
El líder del PSPV, no obstante, tuvo su momento más ofensivo en las conclusiones, donde encadenó varios dardos envenenados al candidato del PPCV y presidente de la Generalitat, Francisco Camps. Su amistad con el 'Bigotes', la inexistencia del trasvase del Ebro en el programa electoral del PP... Resultaba extraño y a la vez inexplicable que Alarte se girara a su derecha para interpelar y referirse al responsable del PPCV y... claro, la cámara no viajara hasta el aludido. Ni un cambio de plano siquiera. "Las normas de este debate han sido aprobadas por la Junta Electoral", subrayó el moderador. Bien, pues esas normas son una basura.
Por su parte, Francisco Camps podría haber realizado sus intervenciones a mil kilómetros y nadie lo hubiera notado. El candidato del PPCV estuvo algo tenso al principio pero luego se fue soltando. Se centró en el ámbito nacional sin tapujos e ignoró todas las alusiones de sus compañeros de ‘debate' pese a que fue interpelado, acusado y atacado en diversas ocasiones por cada uno de ellos. La premisa era clara: no entrar al trapo, pasar el mal trago obligado y ahí os quedáis. Inteligente, efectivo e incomprensible para el espectador no iniciado en el arte (o las malas artes) de la política.
Enric Morera fue el que más seguridad mostró desde el principio y utilizó un tono alejado del discurso clásico y rígido del que pecaron sus contertulios. El candidato de Compromís habló como quien le cuenta a un amigo las cosas que están pasando en su casa. Fue el que supo diferenciarse. Además, repartió a izquierda y derecha y tocó temas populares como el peaje de la AP-7, las bandas de música o asuntos por los que todos pasaron de puntillas como las cajas de ahorros. Pegó duro con las víctimas del metro, el aeropuerto de Castellón y concluyó con un certero: "Quien no vaya a votar que luego no se queje". Una lástima para él que sólo le estuvieran viendo cuatro gatos.
Morera ganó el ‘debate'. Alarte mostró cosas aunque no convenció. Sanz no estuvo desacertada pero sí algo descafeinada. Camps hizo de Camps y así le va bien. En cualquier caso, si tras cuatro años de espera este es el debate electoral que uno va a ver: ¿para qué ser periodista?
¿Destacar por ser mujer?...si eso es lo único que hace destacar a una candidata.... flaco favor le haces...y por dirigirse en castellano?...tiene todo el derecho a hacerlo pero no lo utilizes como bandera...sobre todo cuando se está defendiendo la lengua...otro flaco favor...
Oye Ximo yo creo que no hemos visto el mismo debate, o a lo mejor si, yo vengo pensando que el gran problema de los cuatro candidatos es su falta absoluta de sentido del humor, lo que en mi opinion es un pecado mortal. Marga destaco por ser la unica mujer y porque eligio dirigirse a los espectadores en castellano.
Enric Morera estuvo mas natural, dentro de un aburrido monologo de todos los candidatos. Compromis tiene otro líder muy carísmatico: Mónica Oltra que le hubiese dado mas vida a su exposición por su claridad, tocando los asuntos sensibles de las personas que vivimos en esta Comunidad Valenciana. De todos modos solo 33.000 personas lo siguieron... por que lo habra hecho esta TVV a esas horas
Efectivament l'únic que es diferencià fou l'Enric. Si efectivament ho ha vist tan poca gent estaren contents els del PP- que desitgen o que els voten o que s'abstinguen i es desencanten els ciutadans- i tristos nosaltres que volem que la gent crega que la política és necessària perque algú ha de portar el vaixell de la governació
primero los valencianos, no a la inmigración ilegal. Ya está bien de ayudar primero a los inmigrantes. Sobra inmigración!!!!
M'ha sorprés molt gratament en Morera, el tema de les caixes d'estalvis fou un encert, pena per a ell que l'audiència haja sigut de 33000 espectadors. Sanz ha fet el típic discurs del PCE, és a dir convèncer als seus votants. Camps ha sigut Camps, una barreja de castellà i valencià, i l'última intervenció ens ha deixat bocabadats"València és lo (sic) millor del món. I Alarte molt avorrit, excessiu, a més que la meitat del seu discurs estava ocupat per "los valancianos y las valencianas", només al final del discurs pareixia que tinguera sang i orgull.
Este debat, a canal 9 i a les hores que el fan, està condemnat al fracàs, i més sapiguent de la parcialitat de la cadena. Alarte, sobreactuat. Sanz, sosa. Camps, anguniós. Morera va ser el més plà, sencill, sincer i convincent. Compartitxc la filosofia del bloc i crec que necessitem un canvi urgent, i com diu Morera, si no voteu no es queixeu. Que la boqueta és molt fàcil de moure, però els que s'hem de moure som nosaltes, a les urnes. Som-hi.
Comparto la opinión del articulo. Probablemente Camps ganó el debate, "haciendo de Camps", mostrando el mismo discurso de toda la legislatura (si funciona: ¿porqué cambiarlo?) pero Morera a mi me gustó y me convenció por momentos. Fue mucho mejor orador que Alarte (cuando se pasó al castellano se le notó más fluido, pero aún así estuvo muy flojo y dubitativo) y Sanz (menos dubitativa que Alarte, pero no tubo la decencia de hablar valenciano ni cuando se hablaba de nuestas señas de identidad ) No voy a decir que el líder de Compromís fuera Winston Churchill (le queda mucho a este hombre) pero mostró una imagen centrada, alejada de la izquierda de pancarta. Fue sintomático que el president tuviera que añadirse a su reivindicación de la AP-7 sin peajes.
Grande la descripción del sídrome del espejo. Siempre que veo a Alarte me da la sensación que se da los discursos a sí mismo. Y que vergüenza de debate, sin debate. No sé como la RAE permite que se utilize esta palabra cuando en realidad significa micromitin. Basura también es un buen sinónimo...
compromis es una resposta clar per els valencians del Pais Nalencià, en tots els pobles el sentiment valencia creix, es hora NOSALTRES ELS VALENCIANS
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