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VALENCIA (VP). El consejo de administración de Caja Mediterráneo (CAM) aprobó ayer el plan de viabilidad que presentará hoy jueves al Banco de España y que incluye la solicitud al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) de 2.800 millones de euros para recapitalizar el banco al que la caja trasladará su negocio.

El plan, según informó ayer la entidad, se ha diseñado con una perspectiva de cinco años vista, teniendo en cuenta tanto la evolución previsible del mercado como los requerimientos del regulador tanto en materia de solvencia como de liquidez. CAM espera al final del proceso alcanzar un capital principal del 10,3% y una solvencia del 12,3%.

Estas cifras, que superan ligeramente el mínimo exigido por el Banco de España, no se podrían alcanzar sin la inyección económica del FROB ni sin aplicar un duro plan de ajuste de gasto que ya se ha empezado a poner en marcha. De hecho, la caja anunció la semana pasada un adelgazamiento de su estructura directiva que continuará para ajustar los costes y alcanzar un ahorro de unos 120 millones anuales.

También se incluye en el plan un proceso de desinversión de activos de la caja que se consideran no estratégicos. CAM ya vendió participaciones empresariales el ejercicio pasado para poder hacer frente a las dotaciones por las insolvencias. Ahora la caja tendrá que ampliar ese proceso de salida ya sea de las empresas en las que aún está o de los activos inmobiliarios que pueda colocar en el mercado.

La directora general de CAM, María Dolores Amorós, destacó que "los mayores niveles de solvencia y eficiencia, junto con la recuperación paulatina del margen financiero, mejorarán la rentabilidad de la entidad que se situará en niveles de ROE superiores al 15% al final del año 2015".

Ese horizonte de 2015 es el que, pese a que el plan lo dibuja, más difuminado está en el futuro de CAM. Lo primero que deberá superar es el examen del Banco de España. No habrá problema para que apruebe el plan de capitalización ya que ha sido diseñado con su supervisión.

El otro gran escalón es el que se deriva de la entrada en el capital del banco del FROB. Es una nacionalización de hecho de la caja, ya que con los 2.800 millones públicos se tomará prácticamente el 70% del capital. Esto debe implicar un cambio en los órganos de gobierno.

Ayer en la caja se mostraban prudentes sobre el desembarco de consejeros nombrados por el Gobierno en el banco resultante de la operación de salvamento de CAM. "Tendrá que aprobarse el plan y aplicarse. Quién sabe qué pasará de aquí a septiembre, puede que llegue un inversor privado", señalaban fuentes oficiales de la caja. Una posibilidad que hoy por hoy se antoja complicada.