Un total de 180 consejeros generales forman parte de la asamblea general, que se reúne con carácter extraordinario para formalizar la segregación de los activos y pasivos del negocio bancario de CAM a favor del Banco Base, la nueva entidad compartida con Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria.
La asamblea ha comenzado minutos después de las 12 horas con dos decenas de delegados del sindicato CGT protestando a las puertas contra el SIP porque rechazan la conversión de la entidad en un banco.
Precisamente este sindicato y el mayoritario de la caja alicantina, SICAM, previsiblemente votarán en contra del traspaso del negocio al Banco Base, mientras que se espera que UGT y CCOO respalden la operación.
Están previstas diversas intervenciones, entre ellas la del presidente del Banco Base, Modesto Crespo, y la directora general de CAM, María Dolores Amorós, entre otros.
Aunque las cuatro cajas celebran hoy asambleas similares para posicionarse definitivamente sobre el SIP, la de CAM es la única que se celebra por la mañana mientras que el resto serán por la tarde.
La fusión fría entre las cuatro cajas ha sido puesta en duda en los últimos días después de conocerse que para cumplir con los requisitos es necesario doblar la cuantía a pedir al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), hasta los 2.784 millones de euros.
Además del traspaso del negocio al Banco Base, en la asamblea está previsto ratificar las cuentas del ejercicio 2010, modificar los estatutos para cumplir con la nueva Ley de Cajas y aprobar la partida para la Obra Social, entre otros puntos.
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