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MADRID. La economía de la Comunitat Valenciana descendió un 0,6 por ciento durante el año pasado, cinco décimas más que la media nacional, que se contrajo un 0,1 por ciento, según se desprende de los datos de la Contabilidad Regional de España del Instituto Nacional de Estadística (INE)

Este informe también destaca que la Comunitat fue la quinta región con menor desarrollo económico entre 2000 y 2010, con una subida del 1,92 por ciento de su PIB regional durante la última década, frente al incremento de dos puntos que se registró en el conjunto de España durante ese periodo.

En términos de PIB por habitante, la Comunitat, con 20.465 euros, se volvió a situar por detrás de la media española, establecida en 23.063 euros. País Vasco encabezó la lista de comunidades en 2010, con 31.314 euros, un 35,8 por ciento superior a la media española (23.063 euros) y también muy por encima de la media europea (24.486 euros). Así, la renta per cápita en España se situó en 2010 un 6 por ciento por debajo de la media europea.

CRECIMIENTO POR DEBAJO DE LA UE

Por otro lado, los datos indican que a pesar de que todas las comunidades autónomas crecieron en 2010 por debajo de la media de la UE (1,8 por ciento), algunas de ellas superaron ampliamente la media nacional, como Navarra (1,2 por ciento), País Vasco (0,8 por ciento), Castilla y León (0,8 por ciento) y Asturias (0,3 por ciento).

Además de estas cuatro, otras siete comunidades obtuvieron registros de crecimiento mejores que la media nacional en 2010: Cantabria (0,2), Cataluña (0,1) y Galicia (0,1), Comunidad de Madrid, Extremadura y Ceuta registraron un crecimiento cero y Melilla igualó la tasa nacional (-0,1).

Finalmente, el INE destaca que el diferente crecimiento del PIB de las comunidades en 2010 se debe, especialmente, a la evolución de las ramas agrarias y de la industria, ya que, en términos agregados, el resto de las actividades han registrado crecimientos más similares entre los distintos territorios.

El mayor crecimiento de Navarra (+1,2 por ciento) se sustenta en la notable aportación de la industria del sector del automóvil y, en menor medida, en la industria ligada a la metalurgia; factores que también se han dado en País Vasco (+0,8 por ciento), pero con una intensidad más moderada.