23/03/2011

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ATENAS (EFE). El ministro de Finanzas griego, Yorgos Papaconstantínu, dejó  entrever este martes en Atenas nuevas medidas de austeridad de su gobierno por 1.800 millones de euros, tras un año de severos recortes de gastos y reestructuración de la economía.

En una reunión en Atenas con los medios, Papaconstantínu reconoció que Grecia, en los primeros dos meses del año, no ha cumplido con los objetivos del presupuesto general y que ha tenido menos ingresos de lo esperado, pero esta disminución es compensada, en parte, con el recorte de gastos aplicado por el Ejecutivo.

Añadió que, si no se resuelve pronto el problema, Grecia estará obligada en los próximos meses a aplicar un nuevo paquete de medidas de austeridad de 1.800 millones de euros, con una nueva reducción del gasto público y un aumento de la recaudación fiscal.

Por otra parte, el ministro precisó que el proceso actual de privatización de propiedades del Estado será presentado en una inspección en mayo a los controladores de la eurozona y del Fondo Monetario Internacional (FMI), que han otorgado a Grecia un préstamo de 110.000 millones de euros a un tipo de interés del 5,2%.

En esa visita, el Gobierno consultará con esos expertos el paquete de medidas que debe aportar 22.000 millones de euros al Estado entre 2012 y 2015, y que según el ministro, no incluirá adicionales reducciones de sueldos ni recortes en las inversiones estatales.

Entre las medidas, los organismos internacionales piden que Grecia reduzca la cifra de efectivos en sus Fuerzas Armadas por cinco años, de los 200.000 actuales que están en filas, y sugieren una reducción del 30%, según el diario ateniense "Eznos".

Hace una semana, Grecia logró el compromiso de la eurozona para extender el vencimiento de los préstamos pendientes en 7 años y medio hasta 2023, que Papaconstantínu espera sea ratificado en la cumbre europea los 24 y 25 de marzo.

El ministro informó de que los compromisos de deuda de Grecia para 2012 alcanzan los 66.000 millones de euros, de los que 24.000 millones de euros deben ser concedidos por la zona euro y el FMI, otros 25.000 millones, por los mercados internacionales, y el resto, por las privatizaciones y la emisión de Letras del Tesoro.

Grecia quiere reducir su elevado déficit fiscal, que en 2010 fue del 9,4% del Producto Interno Bruto (PIB), hasta menos del 3% en 2014, así como su enorme deuda pública, que supera los 340.000 millones de euros.