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DÜSSELDORF (EP). El grupo energético alemán E.On obtuvo un beneficio atribuido de 5.853 millones de euros en 2010, lo que representa un retroceso del 30% respecto al año anterior por el impacto de las amortizaciones de activos adquiridos a Enel/Acciona y Endesa en España, Francia e Italia.

La utility germana precisó que sus cuentas de 2010 asumen un impacto por amortizaciones de 6.457 millones de euros, un 69,6% por encima del año pasado, de los que 2.600 millones corresponden a la pérdida de valor de sus activos en Francia, España e Italia, tal como adelantó la empresa en octubre.

La cifra de negocio de E.On aumentó un 16%, hasta 92.863 millones de euros, con un aumento del 11% de las ventas de gas y del 31% en las ventas de electricidad.

Por su parte, el beneficio ajustado de la compañía, que no tiene en cuenta elementos atípicos, se situó en 4.882 millones de euros, un 4% por debajo del dato de 2009.

Por otro lado, E.On informó de que desde el pasado mes de noviembre ha completado ya desinversiones por importe de 9.000 millones de euros, de los 15.000 millones previstos, tras las ventas de su participación en Gazprom, su red de distribución de gas en Italia y su red de distribución eléctrica en Reino Unido. E.On planea utilizar parte de las plusvalías obtenidas por estas desinversiones en reducir su deuda.

Asimismo, la 'utility' germana advirtió de un "significativo descenso" de sus ingresos en 2011 por el impacto de la tasa sobre la energía nuclear en Alemania y del decalaje en los precios de venta de electricidad.

En concreto, E.On prevé alcanzar en 2011 un beneficio neto ajustado de entre 3.300 y 4.000 millones de euros, lo que implicaría una caída de hasta el 32,4% respecto al resultado de 2010.