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VALENCIA. Las empresas innovadoras son las únicas que en el medio plazo resistirán y crecerán en la coyuntura actual. Esta fue la advertencia que lazó ayer Miguel Juan, presidente de Avant, l'Associació d'Empreses Innovadores Valencianes, que afirmó que aunque en la patronal habían tenido algunas bajas por la crisis, la mayoría de las sociedades habían resistido haciendo las cosas "de otra manera".

"La manera de aumentar la productividad de las empresas, sin bajar el sueldo de los empleados, es innovando", declaró Juan durante la presentación del I Congreso Innovalencia, una reunión que se celebrará el próximo 7 de abril y cuyo objetivo será difundir casos de buenas prácticas empresariales y motivar a los emprendedores en el ámbito de la innovación.

Según matizó Juan, el centenar de empresas que forman parte de su asociación habían conseguido resistir en su mayoría la crisis con una facturación media de 800.000 euros al año, sin embargo, enumeró varios problemas que dificultaban su crecimiento, como las trabas burocráticas o la financiación a través de business angels o sociedades de capital riesgo. Habría que cambiar el sistema español por el anglosajón, dijo.

Las necesidades de las empresas innovadoras valencianas para crearse y prosperar son por una parte, un "marco jurídico complicado y agresivo para el empresario" y las dificultades de financiación con que se encuentran los emprendedores a diario. "Aquí, si la empresa fracasa el empresario puede arruinarse y estar endeudado de por vida. En EE UU sin embargo, a veces exigen que hayas creado una empresa y haya fracasado para darte el crédito", explicó Juan.

ESCASO CAPITAL PARA CRECER

El escaso capital riesgo en la Comunitat fue otro de los problemas que destacó el presidente de Avant, ya que según dijo, ahora hay menos dinero fácil tras la crisis del ladrillo y cuesta que éste se destine a la creación o impulso de nuevas empresas. En cuanto a los bancos, afirmó que las empresas tienen que tener una solvencia "muy demostrada" para acceder a créditos que le permitan crecer en tamaño.

Entre los objetivos que se plantea la asociación están el fomento de la colaboración e innovación entre empresas valencianas y la transferencia tecnológica para mantener una estrecha colaboración entre las pymes y los centros de conocimiento. "Es un drama que en la universidad se generen muchos conocimientos y que estos no lleguen a las empresas. A los estudiantes no se les enseña cómo crear una empresa en ninguna asignatura", denunció Juan. Según los datos de Avant, una media de seis empresas al año colaboran de forma conjunta en proyectos financiados por la administración y entre 10 y 15 lo hacen al margen de las ayudas e impulsados por encuentros de networking o grupos de innovación.

El congreso organizado para el mes que viene tratará de reflexionar y analizar un modelo económico sostenible para la Comunitat y se establecerán las bases para desarrollar una Red de Emprendedores y Emprendedoras por la Innovación (REI) que facilite la cooperación y el acceso a recursos.