MADRID (EP). Fitch considera que la capacidad de actuación del Banco de España en el decreto para reforzar la solvencia del sistema financiero español es positiva, y que su implicación en el proceso mitiga incertidumbres respecto al plazo dado a las entidades para cumplir con las nuevas exigencias.
"Los mayores requerimientos de capital y la potestad del Banco de España de modificar el plan o de exigir medidas adicionales es un desarrollo positivo", aseguró ayer la agencia de calificación en un informe sobre el decreto ley de endurecimiento de las exigencias de capital aprobado por el Gobierno el 18 de febrero.
A su parecer, el papel que la nueva norma de capital otorga al organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez ha permitido despejar algunas dudas surgidas tras el anuncio realizado por el Gobierno el pasado 24 de enero.
Asimismo, Fitch valoró que bancos y cajas han desvelado información sobre su exposición a los sectores de la construcción y la promoción inmobiliaria, transparencia que, junto a las mayores exigencias de capital, "podría ayudar a despejar las dudas de los inversores".
No obstante, la agencia de calificación de riesgos agregó que aún persisten incertidumbres respecto a la profundidad de las pérdidas en el balance de las entidades financieras que podrían surgir de dicha exposición al ladrillo.
Por otro lado, apuntó que siguen sin conocerse los criterios para definir qué se considera un exceso de financiación mayorista por encima del 20%, aunque recuerdó que el Banco de España desvelará próximamente las referencias para calcular dicho ratio en una circular.
El informe de Fitch publicado ayer y titulado 'Las mayores exigencias de capital a la banca española, un importante paso adelante', sigue a otro en el que la agencia dudaba de si el plan presentado por el Gobierno estimularía el interés de los inversores privados.
Dicho análisis cuestionaba si el Gobierno español lograría restaurar la confianza del mercado en las entidades y la economía, pero reconocía que las medidas son "un paso adelante" en cuanto a mantener la estabilidad financiera.
Asimismo, consideraba "largo" el plazo dado por el Gobierno hasta el próximo mes de septiembre a bancos y cajas de ahorros para que refuercen su capital por sus propios medios, ya sea por la venta de activos o por su acceso a los mercados.
Frente a las necesidades de capital por importe de hasta 20.000 millones de euros identificadas por el Gobierno, Fitch cifra el hueco de capital entre 23.000 y 85.000 millones de euros en un estudio realizado el pasado mes de julio.
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