El gobernador del Banco de España asegura que la recapitalización de bancos y cajas mejorará la confianza internacional en España y admite 100.000 millones en créditos "problemáticos (de dudoso cobro) por parte de las cajas en sus inversiones inmobiliarias

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MADRID (EFECOM).-  El gobernador del Bnco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, defendió ayer la aprobación del real decreto ley de reforzamiento del sistema financiero español y aseguró que su puesta en marcha ayudará a "revertir la desconfianza de los mercados". Para el gobernador esta medida era "era imprescindible y necesaria para evitar una caída de la financiación exterior que hubiera provocado una reducción del crédito muy importante".

Miguel Ángel Fernández Ordóñez compareció en una esperada rueda de prensa ante los medios para explicar la situación del sistema financiero español y el citado real decreto ley que eleva las exigencias de capital de las entidades españolas, un texto que según indicó "ha ganado batallas antes de nacer", ya que servirá para "recuperar la confianza de los mercados".

"Si la situación cambia", dijo el gobernador respecto a las crisis de deuda soberana, "hay que reaccionar", "hay que anticiparse" y "hacer más cosas", como ya hizo el Ejecutivo con la aprobación del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), sin el que "tendríamos ahora entidades zombies" y más cajas intervenidas.

No obstante, Miguel Ángel Fernández Ordóñez reconoció el esfuerzo que han realizado las cajas de ahorros en los dos últimos años y dijo que hay que estar "orgullosos" no sólo por el proceso de reestructuración que han llevado a cabo, también por sus ejercicios de transparencia.

En concreto, el Banco de España dio a conocer la exposición total de las cajas al sector inmobiliario y constructor, que ascendía al cierre de 2010 hasta los 217.000 millones de euros. De ellos, 173.000 correspondían a inversión crediticia, lo que representa el 18 % del total del crédito concedido por estas entidades.

Además, otros 44.000 millones correspondían a inmuebles adjudicados o recibidos en pago de deudas, en tanto que la inversión potencialmente problemática, es decir los créditos dudosos, suponían 100.000 millones de euros.

El gobernador también señaló que aunque las nuevas exigencias de capital supondrán un esfuerzo para las cajas de ahorros, se mostró confiado en que todas las cumplirán.

Fernández Ordóñez también justificó este real decreto ley alegando que la transparencia por si sola "no hubiera sido suficiente", ya que según dijo, "lo que se necesitan son medidas" (en alusión a las reforma del sistema de pensiones o el programa para reducir el déficit).

La aprobación de estas medidas "dejará a España en una situación satisfactoria una vez se recupere y un sistema financiero sólido", según consideró Fernández Ordóñez.

Sobre el citado real decreto ley aprobado el pasado viernes, el gobernador dijo hoy que no habrá restricciones de ningún tipo para los inversores que quieran entrar en el capital de las entidades que necesiten financiación, sean españoles o extranjeros, y que sólo se les pedirá que sean estables y serios.

Además, manifestó que la financiación que las entidades españolas han recibido del Banco Central Europeo (BCE) computará como liquidez.

En concreto, el Banco de España publicó hoy una circular en la que se definen los instrumentos que conforman el capital mayorista, que son las operaciones de financiación realizadas con bancos centrales y con entidades de crédito, las emisiones de valores colocadas a inversores mayoristas o institucionales y los depósitos recibidos de profesionales del mundo financiero o de grandes empresas.

Durante su comparecencia, el gobernador también insistió en que los cálculos del Gobierno que sitúan las necesidades de capital de las cajas en un máximo de 20.000 millones de euros son correctos, y recordó que el 10 de marzo se conocerán estas necesidades "entidad por entidad".