EL GRANERO
-"El gran mal de la sanidad es el déficit de financiación"
-"En la CV damos mejor sanidad que otras comunidades con bastante menos"
-"Tenemos muy poco presupuesto para premiar la productividad de los profesionales"
-"Los inversores podrán entrar en nuestra investigación biomédica a partir de 2011"
-"La ministra Pajín está a favor de la externalización en la sanidad pública"
-"Algunas autonomías incluyen vacunas no obligatorias en función de pactos con la industria farmacéutica"
-"Va ser difícil que se ajusten los envases de medicinas al tratamiento"
-"Es importante que los proveedores trabajen para un acuerdo nacional de financiación"
EL GRANO
VALENCIA. Manuel Cervera (Valencia, 1962) era tan ajeno a la política que cuando su amigo Rambla le propuso unirse al Partido Popular preguntó, por situarse, cuál era el horario de un político. En 2004 fue secretario autonómico y en 2007 sustituía a Rambla como conseller de Sanidad, con un perfil, sobre todo, de gestor eficaz y de político discreto. Pero el tiempo no pasa en balde y Cervera se torna apasionado cuando aborda los asuntos políticos -las acusaciones contra su amigo Camps le enervan-, su mirada se ha hecho más próxima a la agenda política y eso tendrá su reflejo tras las próximas elecciones. Tiene ganas de seguir aunque no sea en Sanidad. Pasará a la historia como el conseller que puso en marcha la nueva Fe. Ahora sabe que su cargo no tiene horas.
-Aunque suene a ramplona la pregunta ¿cuáles son los males de la Sanidad, en general, y en la CV?
-El déficit de financiación es el gran mal porque tenemos una sanidad de las cinco mejores del mundo y resulta que la financiamos muy por debajo de los países del entorno. Damos mucho más que los países del entorno con bastante menos. Ese es el gran mal.
-¿Y en la Comunitat Valenciana?
- Lo mismo. Damos más que otras regiones pero con una financiación que está muy por debajo de la media nacional.
-¿Qué ha estado usted contando en su gira por La Toscana?
-Fue espectacular ver en Florencia cómo en una semana 150 personas, gerentes y directivos de las consejerías de sanidad, venían a escucharnos para comprobar que el sistema valenciano es el de más vanguardia que hay en Europa a nivel de gestión de recursos, de tecnología y de indicadores. He contado que en el modelo valenciano hay objetivos de productividad lo mismo para el conseller que para cualquier profesional. Eso es la primera vez que se hace en Europa en sanidad pública.
-¿Pero está funcionando bien la gestión por objetivos?
-Desde 2004 está funcionando muy bien porque hemos mejorado la calidad de indicadores. Estamos gestionando el servicio público de salud como en cualquier empresa en la que se valoran los objetivos de los profesionales con una productividad variable. El punto débil es que tenemos muy poca parte en el presupuesto para poder premiar a los profesionales por lo que hacen. Es un 4 ó 5%. Si fuera un 30% de la valoración del profesional, obtendríamos grandes logros porque al profesional hay que valorarlo por lo que hace y no por lo que es.
-¿Y no se puede aumentar ese porcentaje?
-En este momento nos han pegado el tijeretazo del 5% con el sueldo de los funcionarios... haría falta una reforma estructural del sistema nacional de salud. Eso lo hemos pedido en Madrid, a la nueva ministra en el último consejo interterritorial de Santiago de Compostela. Y va en el programa del PP de la CV y queremos que vaya a nivel nacional.
-Hablando de programa, ¿incorporará también la investigación biomédica?
-Lo anunciaremos en las próximas semanas. La apuesta por la investigación biomédica valenciana permitirá que los inversores puedan donar fondos para que nosotros sigamos investigando y ellos sacar beneficios a esta investigación con patentes de desarrollo de esa red de innovación de tecnología. La puesta en marcha será en 2011 y queremos que sea un paradigma de la investigación valenciana.
-Hablando de empresas, ¿la experiencia de Ribera Salud va a seguir y por dónde?
-La ministra Pajín está a favor de la externalización de ciertos servicios. Es lo que venimos diciendo: utilicemos todos los recursos que hagan falta para que esto sea sostenible en el tiempo. Si podemos dar una sanidad con una eficiencia que supera el 25%... ¿cómo no la vamos a dar? Y eso está pasando en Madrid, en Baleares, Galicia y en toda España. Y fuera, van de cabeza a este modelo. Es muy sencillo: cuando alguien apuesta su dinero y su conocimiento sanitario por hacer la gestión de la sanidad pública los resultados son buenos, muy buenos.
-¿Va a haber más concesiones?
-Habrá más concesiones en el futuro cuando planteemos más hospitales. El Hospital de Torrent, que queremos sacarlo a concurso en el primer cuatrimestre del año, irá por el modelo concesional también.
-¿Están dando buenos resultados, para el paciente, los avances tecnológicos que se han implantado en el sistema o continúan los problemas del principio?
-Hay más de dos millones de citas por sms o por internet. Sí, la gente se coge a eso. Pero eso es el resultado, no el origen, de la apuesta tecnológica, de la historia clínica electrónica, que todo empieza por ahí. Ese sistema que se llama Abukasis y que costó ponerlo en marcha. Esa historia clínica nos ha permitido tener toda la información de salud de los valencianos, hay más de 5.200.000 historias, tenemos información para hacer campañas de vacunación y otras, y ha permitido desburocratizar las consultas y el poder seguir avanzando con la receta electrónica, la historia clínica en el móvil y la tarjeta sanitaria con la que puedes cambiar de médico.
-¿Cómo va el supuesto pacto entre las comunidades autónomas para la sostenibilidad de la sanidad?
-Trinidad Jiménez avanzó bastante y Leire Pajín ha dicho que va con esa idea. Hoy he podido leer que el secretario general del ministerio reconoce que hace años que el consejo interterritorial ya no es un parlamento bis, donde ya no hay esos debates políticos. Eso es un logro de todos, sobre todo de las CC AA que están en la oposición al Gobierno de España y que podían haber seguido con el debate político. No lo hemos hecho, pero le hemos dicho a la ministra que en febrero volvemos a hablar del pacto porque es necesario.
-Y tanto que es necesario para conseguir una sanidad sostenible...
-El sistema sanitario va a quebrar si no se llega a un pacto. La continuidad del sistema actual como lo conocemos está en manos de la UE. Cuando las consultoras independientes ya hablan de que el año que viene puede haber un déficit de 12 a 15.000 millones de euros del sistema nacional de salud, entonces hay que hacer algo. ¿Porque si no, qué pasa? Que seguiremos aumentando la deuda de los proveedores. El sistema es insostenible y no puede crecer cuando el gasto ha crecido mucho más que el producto interior bruto. Se ha juntado la tormenta perfecta que es una crisis estructural -somos más, vivimos más y además tenemos más enfermedades- y la crisis coyuntural y económica.
-¿Hacía dónde se dirigiría ese pacto, entonces?
-Serviría para reordenar por ejemplo los recursos humanos, para hacerlos más eficientes y ahí lo que yo propongo de valorar al profesional por el trabajo bien hecho. Serviría también para coordinarnos en política, la inclusión de nueva tecnología, de nuevos medicamentos, nuevos servicios... No puede ser que una comunidad autónoma ponga una vacuna porque le dé la gana, ni que compre tecnología porque quiera. Cuanto más vayamos de la mano, mucho más fácil será controlar y racionalizar el gasto sanitario. En medicamentos, en un centro de compras común. Todo haría ver al ciudadano que tener 17 comunidades autónomas es positivo.
-Y a qué deberían renunciar las comunidades autónomas y la CV?
-Todas las CC AA deberíamos renunciar a la inclusión de nuevas prestaciones en la cartera de servicios si no hay un consenso nacional sobre su evidencia científica o conveniencia. Un ejemplo claro es el calendario vacunal, no es lógico que determinadas autonomías estén incluyendo vacunas no obligatorias en función de pactos con la industria farmacéutica. Desde la CV llevamos años defendiendo en el Consejo Interterritorial la necesidad de establecer una cartera de servicios única y consensuada.
-Esa colaboración se ensayó cuando la crisis de la gripe A.
-Y funcionó muy bien y quitamos el debate político de la sanidad. Y le vino muy bien a la Comunidad de Madrid, a la Valenciana, Murcia y al Ministerio. ¿Por qué no hacer un pacto de la Sanidad como hay un pacto de Toledo para las pensiones que quite el debate político?
-¿Por qué no se penaliza la excesiva frecuencia de algunos pacientes o el gasto excesivo en los medicamentos?
-Una cosa es la hiperfrecuentación del sistema sanitario y otra las medicinas. No se puede permitir que vayamos tres veces más al médico que los alemanes, franceses o belgas. Estoy a favor de controlar la hiperfrecuentación. El 25% de las consultas de nuestro país en atención primaria son de gente que va al médico más de ocho veces al año, más de lo que recomienda la OMS. Por tanto podemos actuar sobre eso. Y luego trabajar -y aquí estamos trabajando- en que el profesional sea partícipe de un uso racional del medicamento y que el ciudadano también sea partícipe de ese uso racional.
-Parece una buena idea lo que ha propuesto la nueva ministra de ajustar las dosis de medicamentos.
-De momento va a ser difícil hacerlo. Sus propias CC AA se lo han paralizado. Las comunidades del PSOE tumbaron la propuesta del ministerio.
-¿Por qué?
-Porque la política del ministerio tiene que ser consensuada con las CC AA que tienen esas competencias y no se hizo. Porque hay que ajustarlo bien para que no sea más caro que beneficioso. Y, en tercer lugar, por las cuitas internas que tengan esas comunidades con el Gobierno de España que no me las sé... o las sospecho.
-Otro de los males es lo que le he oído reclamar en muchas ocasiones a líderes empresariales como José Vicente González: "El absentismo por incapacidadtemporal en los centros sanitarios públicos duplica en incidencia y prevalencia el de la población general". ¿Por qué se da y por qué no se acaba con eso?
-Una de las causas de mejora de nuestros sistema sanitario es combatir la incapacidad temporal. Por eso a los inspectores les hemos dado una productividad específica para que vigilen de una forma más intensa y con objetivos muy concretos. Hay bolsas de gente que tiene una mayor incidencia que ahora han disminuido con respecto a otros años.
-¿Es imposible que los gobiernos extranjeros paguen la sanidad que gastan aquí sus ciudadanos?
-Es un problema de acuerdos europeos, de voluntades. Ya es un adelanto que los gobiernos nos paguen una cantidad por sus ciudadanos que residen aquí: un poco más de dos mil euros por residente. Eso no era y ya es. Pero el turista, no. De todas formas es más importante el turista nacional, el desplazado. Y eso que es mucho más fácilmente facturable y es una reivindicación constante que no me cansaré de hacer.
-¿La de cobrarle o de que paguen las comunidades autónomas?
-Crear un balance entre comunidades autónomas. En la propia conselleria hay balances entre departamentos que se facturan servicios.
-¿Por qué no se hace?
-Primero porque los fondos de cohesión que estaban previstos para estas cosas han disminuido y es ridícula la cantidad que hay para compensar el gasto interterritorial en ese aspecto. Y, segundo, porque las CC AA con el saldo más negativo no van a mover ni un dedo para que se ponga en marcha.
-¿La Conselleria de Sanidad especialmente está llevando a situaciones muy angustiosas y de cierre a sus proveedores? ¿Qué va a hacer Sanidad con el cumplimiento de sentencias que le obligan a pagar? ¿Qué pasa con las facturas que están en los cajones?
-Que tratamos por todos los medios de conseguir dinero. En la Comunitat Valenciana hemos hecho esfuerzos durante los últimos años para disminuir la deuda con los proveedores... y seguimos. No es un problema de la CV, es un problema general de financiación. Y los proveedores saben perfectamente que soy de las personas que más incide a nivel nacional en la responsabilidad que tiene el sistema para con los proveedores. Les diría a los proveedores que es importante que ellos también, en la medida que tienen trascendencia ante el Gobierno de España, sigan trabajando conjuntamente para que se llegue a un acuerdo nacional que permita una adecuada financiación del sistema. Este año los presupuestos han bajado. Pero esa bajada no es real porque somos cada vez más y hay que dar más atención. Somos más, vivimos más, tenemos más enfermedades. La primera vez que operé de una catarata la paciente tenía 74 años y se veía como una abuelita, hace casi ya 30 años. Y ahora se operan personas de cataratas de 96 y 97 años. Lo mismo las artrosis, las prótesis, etc. Todo eso va en aumento.
-Pero de ahorro no me ha hablado hasta el momento. Sí de reducir el gasto, que es distinto.
-Ahorro farmacéutico. En los últimos tres años hemos pasado de ser el furgón de cola de España a estar entre las tres o cuatro comunidades autónomas que más control del gasto tienen y ahora ya se puede decir mayor descenso de la factura farmacéutica, porque ya desde el mes de noviembre estamos con un 1,5% aproximadamente respecto del año pasado. diferencien del resto.
-¿Y qué más?
-Nosotros, pese a tener 300 euros menos de financiación por habitantes que la media nacional y damos lo mismo, tenemos la estancia media más baja de España, la cirugía sin ingreso más alta, la hospitalización domiciliaria más alta, que son indicadores de calidad. Hemos abierto cinco hospitales esta legislatura, alrededor de 50 centros de salud y consultorios. Tenemos una central de compras que en el último consejo interterritorial de Trinidad Jiménez lo propuso para toda España, tenemos una subasta "on line", facturas en la sombra...
-Me ha extrañado mucho que usted esté en contra del copago.
-El copago por sí solo no soluciona nada. Porque las medidas aisladas como el recorte del 5% del sueldo de los funcionarios no solucionan nada. ¿A un sistema con 15.000 euros de déficit para un año qué le supone tener un ahorro de 1.000 millones? No se entiende el copago en un momento de crisis en el que se le ha retirado el subsidio a los que no tenían derecho a paro, explíqueme usted cómo a esta gente se le puede poner una tasa añadida. Se deben estudiar reformas estructurales donde las administraciones actúen conjuntamente. Antes de que empezara el inicio de la crisis en 2007 las CCAA se peleaban por pagar un euro más la hora de guardia o peleábamos por tener la carrera profesional un poquito más cara que el resto. Eso ha generado una distorsión del sistema muy importante.
-Pero todo eso no da ingresos como el copago.
-Habría que estudiar quién utiliza bien los recursos y quién no. A lo mejor estamos hablando de eso, de controlar la frecuentación sanitaria o quién va a urgencias del hospital sólo cuando realmente tiene que ir... y eso, dentro de un paquete de medidas completas, sí que se entiende pero decir ahora necesito recaudar tres mil millones más, pues voy a cobrar cinco euros por visita, eso no lo veo.
-Pero sería disuasorio, habría menos gasto y obligaría a un comportamiento más racional de la gente.
-Pues entremos a hablar de reformas estructurales en el que el ciudadano se responsabilice, pero dentro de un paquete general. Lo que no puede ser es cobrar por disuadir. Habría que valorar más al ciudadano que utiliza bien los recursos. Eso es lo que habría que enseñar cómo y a través de las sociedades científicas. Y no aplicar ese tipo de disuasión para que no vaya la gente a los centros sanitarios que podría provocar algún tipo de incidencia en la esperanza de vida porque la gente se retraiga y no vaya al médico cuando tenga que ir.
-¿Cómo llevamos el traslado de la nueva Fe?
-Pues hoy empiezan a trasladarse especialidades pediátricas y va todo dentro de lo establecido, con mucho control y mucha tensión de trabajo porque es muy complicado, pero dentro de lo previsto.
-¿No se habrá pecado, una vez más, en hacer un edificio público más pensado en su valor arquitectónico que en su funcionalidad?
-En este caso, no. Los quirófanos son mucho mejores, los espacios son mejores y no inventamos un hospital que no había, sino que trasladamos a 250.000 ciudadanos a otro con los mismos servicios, pero con una dotación potente y novedosa.
-Pues no opinan así los pediatras.
-Cada uno diseñaría de una forma distinta. El Hospital Infantil de la Fe seguirá siendo la referencia, con mejoras muy evidentes, con consultas, quirófanos nuevos, autonomía total... cuando llegue el verano de 2011, nadie cuestionará la gran obra de la sociedad valenciana en los últimos 15 y 20 años.
-La apertura ha sido un poco de tapadillo teniendo en cuenta la gran trascendencia que tiene. Supongo que se hará cuando estemos más cerca de las elecciones.
-Está bien que lo diga usted porque eso significa que existe ese convencimiento. La inauguración se hará cuando corresponda. Podíamos haber hecho la inauguración antes de abrir el hospital, pero todas las que hemos hecho durante estos años ha sido con el hospital funcionando. Si lo hubiéramos hecho antes de la entrada del primer paciente hubieran dicho que no nos atrevíamos a hacerlo, etc. Prefiero que el hospital funcione y cuando sea así inaugurarlo como se merece una obra de todos y para todos, la mayor obra que se ha hecho en esta comunidad.
-¿Al final cuánto nos ha costado y cuánto ha puesto el Gobierno en este hospital que debe ser de referencia nacional?
-Ha costado 383 millones, con el equipamiento. En cuanto a la aportación del Gobierno el otro día me apuntaban que los fondos de compensación interterritorial han financiado hasta 30 millones...B ueno yo no suelo hablar de este tema en los últimos meses porque creo que ahora es el momento del trabajo conjunto y ya está. Pero sí que es cierto que ha faltado sensibilidad por falta del Gobierno de España. Falta constantemente sensibilidad pero en esta ocasión también porque hay otros ejemplos, que se han cofinanciado como el Clínico de Barcelona. Pero esto ahora lo aparco.
-¿Y es conveniente construir en estos tiempos un edificio tan gigante como ese, tan caro como ese?
-Yo no haría un hospital de estas características como segundo o tercer hospital de esta Comunidad. Hospitales de esta categoría tiene que haber cuatro en España o cinco. Pero un hospital La Fe con estas características ya lo había con 40 años de servicio y ahora tiene que haber uno moderno. No se entienden grandes obras cuando acercamos la sanidad a los hospitales, se entiende mejor hospitales más pequeños, pero un hospital de referencia para 5,5 millones de habitantes tiene que tener estas características.
-¿No hubiera sido mejor pagar a los proveedores o a los farmacéuticos en vez de construir esta barbaridad de edificio?
-Es que hace 10 años los técnicos decidieron que era mucho más caro reformarlo que construir uno nuevo. No se puede mezclar churras con merinas. La Fe tiene que existir y la deuda con los proveedores la tenemos aquí en Andalucía, en Cataluña, en todos sitios... mucho más en esas regiones que llevan pocos años con las transferencias de sanidad. La Comunidad tiene que tener un centro donde se haga trasplante hepático, donde las enfermedades raras tengan su referencia, donde la pediatría tenga su centro de estudio... Y eso requiere un hospital de estas características. Esta será la obra más utilizada y más útil de las grandes obras que se han hecho porque estará atendiendo la salud de los valencianos.
-¿Cómo afectó el virus Gürtel a esta conselleria?
-Aquí hay cinco mil proveedores y un presupuesto de 5.700 millones de euros y lo que intentamos es gestionarlo de la mejor forma posible. Sí que contratamos con esta empresa un acto en concreto, pero, en general y cuando dimos cuentas en las Corts, si ve el volumen de los 16.000 millones de euros de un año de presupuesto de la Generalitat... pues podemos mejorar en la eficiencia pero somos un ejemplo de austeridad y de rigor. Otra cosa es que la situación ha ido como ha ido y yo tengo mi opinión sobre eso.
-Pues dígala.
-Considero que ha sido una persecución política y personal hacia el presidente Camps. Una campaña de dos años en la que otros datos que han aparecido en los medios de comunicación se diluyen como un azucarillo y desaparecen rápidamente: el presidente del Congreso, la Junta de Andalucía... duran dos días y aquí, gracias a un sistema de información constante, hemos permanecido impertérritos ante un ataque constante que ha sido nefasto para la Comunidad, pero sobre todo nefasto para la visión que tiene la ciudadanía de los políticos. Y eso hace que en el futuro quien quiera meterse en la política se lo piense dos veces.
-¿Piensa seguir en la política?
-Pues depende de dos factores: Del refrendo de la ciudadanía al PP y eso parece que va a ir bien. Y dos, está que el presidente Camps decida seguir contando con mi trabajo.
-Pero se le ve a usted que quiere seguir... ¿en la Conselleria de Sanidad?
-Esto es un esfuerzo tremendo. Cuando a Rambla lo nombran conseller de Sanidad en el año 2003...
-¿Fue él quien le metió en la política? Veo una foto suya en esa estantería.
-Fueron el presidente Camps y el vicepresidente Rambla quienes, además de ser buenos amigos, consideraron que podía ser útil al proyecto del PP. La Conselleria de Sanidad no es una conselleria en la que descanses. Tiene una ventaja que es que da mucho orgullo trabajar en ella por los profesionales y porque el tema que tratas es tan sensible... puede ayudar a mejorar las cosas de una forma que afecta tan directamente al ciudadano que es satisfactorio. Ahora, con todo el lío que hay del trabajo de la Fe, sólo pienso en cada día que pasa y en que las cosas vayan bien y nada más del futuro. En cualquier caso me gustaría seguir en la Conselleria de Sanidad o en cualquier otro sitio en el que pueda ser útil a los ciudadanos".
¿Por qué será que los de gestión siempre logran y obtienen un rendimiento superior a médicos y enfermeras. en los objetivos? O quizás sea, porque no tienen que dormir de día, ni trabajar el viernes, sabado y domingo por la noche. También tienen mejores ratios en accidentes laborales que las enfermeras. Claro que el mérito sería un pinchazo accidental en alguien de gestión sanitaria. No quiero ni SABER que ocurrirá si a mi enfermera de hospitalización le aumentan más el trabajo que tiene.
¿Por qué será que los de gestión siempre logran y obtienen un rendimiento superior a médicos y enfermeras. en los objetivos? O quizás sea, porque no tienen que dormir de día, ni trabajar el viernes, sabado y domingo por la noche. También tienen mejores ratios en accidentes laborales que las enfermeras. Claro que el mérito sería un pinchazo accidental en alguien de gestión sanitaria. No quiero ni SABER que ocurrirá si a mi enfermera de hospitalización le aumentan más el trabajo que tiene.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.