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El Informe de Fiscalización de la Sindicatura de Comptes de 2009, entregado ayer en les Corts, supone un duro golpe para la Generalitat y sus cuentas. Según desprenden los números, el Gobierno valenciano debe más de lo que tiene, ofreciendo un fondo de maniobra negativo
-COMUNICADO DE LA SINDICATURA: "No se trata de una quiebra técnica"
VALENCIA. El órgano de control externo pide al Gobierno mayor rigor en determinados apartados de su balance en los que no hace cuenta, por ejemplo, de los intereses que tiene que pagar a los acreedores.
El capítulo de los gastos no reconocidos es uno a los que el órgano de control externo le dedica especial atención. Atendiendo siempre al informe de la Sindicatura, la Generalitat gastó en 2009 en asistencia sanitaria 1.543,3 millones de euros fuera de presupuesto. Esta cantidad, a pesar de estar plasmada en la contabilidad financiera de la Administración no figura en ningún presupuesto, por lo que pasa a engordar la lista de las deudas.
A estos 1.543,3 millones de euros, la Sindicatura le suma otra cantidad relacionada también con el gasto en Sanidad: 962,6 millones de euros. Esta última cifra corresponde a las obligaciones no reconocidas (ONR) a 31 de diciembre de 2009, lo que significa que la Generalitat gastó dicha cantidad sin tan siquiera preverlo en su presupuesto. En total, la deuda sanitaria asciende a 2.505,9 millones de euros.
El documento de la Sindicatura pone de manifiesto que el fuerte aumento de los gastos sanitarios de la Generalitat se ha debido a causas "numerosas y complejas", destacando por encima de todas los "problemas estructurales derivados de la financiación insuficiente del sistema sanitario valenciano". El reflejo está, según el texto, en el volumen de gasto realizado y no contabilizado.
PROVISIONES POR INSOLVENCIAS
Otro de los agujeros que tienen las arcas públicas valencianas y que va restando a los fondos propios de la Generalitat es el relacionado con cobros que tiene pendiente de 1990 a 2004.
Dado el tiempo transcurrido, todo parece indicar que el Gobierno dejará de ingresar 633,9 millones de euros considerados "derechos definidos", por lo que el apunte que hace la Sindicatura es que deberían aumentar el fondo para insolvencias hasta dicha cantidad y no sólo con 401 millones como sucede ahora. La diferencia entre lo que previsiblemente ha perdido y lo que tiene es de 232 millones.
Los fondos propios o patrimonio que tenía la Generalitat a 31 de diciembre de 2009 apenas superó los 800 millones de euros, un dato que contrasta con el del año anterior, cuando la cantidad superó los 3.600 millones de euros. Teniendo en cuenta esta cifra y restándole las dos anteriores, el resultado es que la Comunitat tiene unos fondos propios negativos por valor de 394,4 millones de euros.
EXPEDIENTES DE ENRIQUECIMIENTO INJUSTO
Una de las conclusiones del Informe es que la Generalitat no contabiliza todo lo que debe con exactitud, por lo que se deduce que su endeudamiento podría ser mayor de lo que reflejan sus cuentas. En concreto, el texto argumenta en uno de sus artículos que el pasivo del balance no recoge ninguna cantidad en concepto de intereses de demora a sus proveedores. "Aunque se desconoce el importe exacto que pudiera ser exigible, dicha cantidad podría ser significativa".
El suma y sigue de los gastos no previstos en un primer momento por la Generalitat con proveedores queda también reflejado en el número de expedientes de enriquecimiento injusto, es decir, aquellas partidas que en su momento quedaron fuera de los Presupuestos Generales aprobados pero que igualmente se gastaron.
A CORTO Y LARGO PLAZO
El Informe señala que 26 documentos revisados, cuya suma asciende a 11,6 millones de euros, se refieren a gasto reconocidos y pagados mediante expedientes de e'nriquecimiento injusto', por lo que aconseja regular "legalmente" esta forma de reconocer las obligaciones de años anteriores y que no hayan sido reconocidas en su momento. "Dichos gastos deberían ser objeto, además, de una contabilización independiente respecto a los gastos corrientes", señala el texto.
El balance que recoge la Sindicatura señala que la deuda de la Generalitat a largo plazo ascendió en 2009 a 5.707 millones de euros, un 25% más que el año anterior. De esta cifra, 4.236,9 se correspondían a emisiones de obligaciones y otros valores negociables y 1.253 millones de euros a deudas con entidades de crédito. En cuanto a la deuda a corto plazo, de 2008 a 2009 creció un 42,5% al pasar de 6.765 millones de euros a más de 9.642 millones. El activo circulante del Gobierno autonómico era, sin embargo, de 1.736 millones de euros. Una vez más, la suma de estas cantidades tiene un resultado negativo que roza los 8.000 millones de euros.
Las diferencias detectadas entre los reusltados presupuestarios y contables derriban la falsa creencia de la superioridad del presupuesto por sobre la contabilidad gubernamental. Al conbtrario, esta última posibilita evaluar el grado de transparencia fiscal y de confiabilidad en la rendición de cuentas. No todos los profesionales lo comprenden. De allí la poca importancia que le asignan a las normas de contabilidad generalmente aceptadas para el sector público a nivel internacional Cordialmente
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