El informe de la Cámara de Comercio de Valencia sobre las perspetivas empresariales de la provincia muestran un crecimiento moderado a pesar de que el desempleo no se reducirá

-Resultados y perspectivas empresariales en la provincia de Valencia

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VALENCIA (L. MASERES). En 2011 no se recuperará el empleo ni la coyuntura dará un giro de 180 grados, pero habrá una ligera recuperación de la economía valenciana. A esta conclusión ha llegado la Cámara de Comercio de Valencia en su informe sobre los resultados empresariales de este año y las perspectivas para 2011. Por segundo año consecutivo, las exportaciones se convierten en el motor de la actividad económica, con expectativas más dinámicas para 2011.

La escasa inversión que prevén hacer los empresarios será el principal freno de la economía de la Comunitat, aunque la recuperación de la cifra de negocio permitirá que a partir del año que viene la destrucción de empleo no sea tan aguda como en los años anteriores. Según el estudio, la mejora llegará a casi todos los sectores, a excepción de el de la construcción, donde los ingresos podrían caer todavía más.

Después de tres años en los que se ha registrado un saldo negativo de la cifra de negocios, tanto en la provincia como en el ámbito regional y nacional, esta variable volverá a alcanzar cifras positivas el próximo año en Castellón, Valencia y Alicante. A pesar de ello, lejos queda del crecimiento que experimentarán los países europeos, donde la confianza empresarial ha aumentado respecto 2009.

LA CIFRA DE NEGOCIOS

La moderación de la caída de la actividad económica en la provincia de Valencia durante este año ha sido menos intensa que en el resto de España, incluyendo Alicante y Castellón. Así, el saldo de la cifra de negocios se ha situado en los -35 puntos, retroceso muy superior al de España y la Comunitat. Esta evolución ha sido negativa en todos los sectores productivos, pero destaca sobre todo la actividad del sector servicios.

Las previsiones para 2011 apuntan a una sensible recuperación, alcanzando tanto en la provincia como en el conjunto de la autonomía un saldo positivo superior a los 10 puntos.

Las ventas de los productos valencianos han seguido una senda similar a la de la cifra de negocios, es decir, negativa. Según la Cámara, el principal motivo ha sido la débil demanda interna. No obstante, para 2011 los empresarios son más optimistas, especialmente los del sector de la industria y el comercio.

EXPORTACIONES, EL MOTOR VALENCIANO

Uno de los pocos datos que se salva de esta debacle ha sido el de las exportaciones, cuyo comportamiento ha sido "muy positivo" superando incluso la media de la Unión Europea. "Los empresarios esperan que las exportaciones sigan constituyendo un motor para la actividad de las compañías valencianas", se puede leer en el texto. Después de Cataluña y Navarra, la valenciana es la autonomía que más esperanzas tiene para 2011 en cuanto a sus ventas en el extranjero.

Una de cal y otra de arena. El desempleo, que en la Comunitat supera la barrera del medio millón, podría mejorar muy levemente si las perspectivas de recuperación se cumple. Aun así, no se prevé que la cifra del paro baje, sino que se mantengan las plantillas. En el peor de los casos, los puestos de trabajo en el sector de la construcción continuarán disminuyendo.

Analizando el tejido empresarial valenciano por sectores, la industria es la que más brotes verdes verá a partir del próximo enero, ya que la cifra de negocios pasa de obtener un saldo negativo de -64 en 2009 a -2 puntos en 2010.

El origen de esta recuperación viene de la mano del impulso de las ventas de los productos industriales valencianos en el exterior, ya que el mercado nacional todavía se encuentra algo debilitado. Más de la mitad de las empresas encuestadas afirma haber incrementado las exportaciones en 2010, mientras que tan sólo el 9% las ha reducido. Sin embargo, el empleo todavía se resiente a pesar de que la inversión ha mejorado durante este año.

Todos los datos negativos posibles los acumula la construcción cuyo saldo negativo de la cifra de negocios en 2010 apenas ha variado respecto a 2009, situándose en -88 puntos. El desempleo, la paralización de obra pública y el stock inmobiliario acumulado no dan un respiro al ladrillo.

Para el año que viene el panorama no resulta esperanzador, ya que ninguna de las empresas que han participado en el informe prevé un aumento de ventas ni de inversión. La cifra de negocios continuará reduciéndose para un 62% de las empresas y la destrucción de empleo apenas se moderará. Las exportaciones serán las únicas que se muestren algo dinámicas en este sector.