VALENCIA. El Ayuntamiento de Valencia dispondrá en breve una oficina técnica anticorrupción. Así lo ha avanzado a Valenciaplaza.com Juan Carlos Galindo, presidente de la asociación española de prevención del blanqueo de capitales y también máximo responsable de la asociación por la transparencia y la prevención de la corrupción.
Galindo se define como un experto en la materia "con muy buenas relaciones con PSPV, Compromís, y Podemos... y no tantas con PP y Ciudadanos". Tras muchas conversaciones en campaña electoral con Joan Ribó ha afirmado tener constancia de que el nuevo primer edil del cap i casal no tardará en crear esta oficina de fiscalización y prevención del delito, "porque hoy la administración local es un foco de corrupción continua", manifiesta.
El objetivo es convencer al ciudadano con una gestión independiente de que su Ayuntamiento es plenamente transparente. Por ello, la oficina tendrá como principal tarea la revisión a fondo de toda la documentación municipal "sin interrumpir ningún proceso y actuando como una oficina adicional sin personal nuevo. Únicamente habrá que reconvertir la actual oficina de control presupuestario y dar a la plantilla una formación específica".
REQUISITOS A CUMPLIR POR LAS EMPRESAS
Juan Carlos Galindo ha dado una serie de ejemplos muy gráficos y concretos del cometido de esta nueva oficina.
1. Las empresas que opten a concursos o licitaciones públicas tendrán que presentar una factura del IVA del último trimestre.
2. También habrán de mostrar sus cuentas anuales del último ejercicio.
¿Qué se busca con estas dos propuestas?: "Verificar que las empresas tienen una actividad real"; es decir, que no son "firmas fantasmas" creadas ad hoc (a propósito) o que se compran para acreditar una antigüedad para poder adjudicarse tal o cual obra, explica el experto.
3. Pero no será un seguimiento puntual el que se hará a estas empresas. Una tercera exigencia será el certificado de estar al día con la Seguridad Social y Hacienda. "Hasta ahora se pedía únicamente una vez, al principio de todo proceso, cuando es un certificado que solo tiene validez seis meses. ¿Qué sentido tiene no volverlo a pedir?", se pregunta Galindo. Está muy claro, a su entender, "no puede trabajar con la administración el que no tiene sus pagos al día".
4. Además se llevará a cabo un "bastanteo". Es decir, el documento en el que se acredita la comprobación por parte de la administración de que las facultades o poderes de una o varias personas físicas son suficientes para actuar en nombre y representación de una determinada persona jurídica en la realización de determinadas actuaciones. O sea, "con toda la documentación tramitada la oficina técnica comprobará que toda la documentación aportada es real; que la empresa existe y que los socios son quien dicen ser.
La oficina además, según Galindo, estará facultada no solo para revisar la documentación presente y futura, sino también "todo lo que ya preexiste".
A su juicio, el ejemplo a seguir por esta nueva oficina técnica anticorrupción es el órgano centralizado de prevención que ya funciona en el Notariado de España.
Además, el presidente de la asociación española por la transparencia está convencido de que también habrá que implementar la medida en la Generalitat, pese a reconocer que tiene muchos más filtros de control que los Ayuntamientos. Y aunque reconoce haber hablado del tema con el presidente Ximo Puig cuando era candidato, tiene pendiente una próxima reunión con el nuevo conseller de Transparencia.
"Es cierto que la corrupción en la Generalitat es más complicada, aunque siempre será insuficiente la tarea de fiscalización que realicemos. Ya se ha visto lo que ha pasado con el caso Cooperación y el exconseller Blasco. Únicamente había que haber enviado a alguien de la embajada a comprobar que se estaban ejecutando las obras. La suerte es que solo tenemos unas Corts valencianas; mientras que Ayuntamientos hay 8.500. Y si los multiplicas por los concejales de cada municipio te salen unos 45.000 riesgos de meter la mano", asevera el experto.
José Luis Galindo concluye con una máxima de su profesión: "Mientras exista oportunidad habrá peligro". Por ello aboga cargado de argumentos con la necesidad de prevenir e incrementar el control y la transparencia en las administraciones.
INTERVENCIÓN EN JULIO DE 2014
La propuesta de Galindo no es completamente novedosa, aunque sí será un gran impacto sí se ejecuta. El experto ya habló sobre la materia durante tres minutos en julio de 2014 ante el pleno del consistorio de Valencia invitado por la asociación de vecinos de Patraix y Compromís.
Tomó la palabra y señaló que ante los numerosos casos de corrupción en España y en la Comunitat Valenciana la asociación por la transparencia podía aportar soluciones. Afirmó en su alocución que en la lucha contra la corrupción se confía únicamente en los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. "Pero llegamos tarde. El delito se produce en la administración. Nuestra obligación es intentar dificultar y frenar ese hecho delictivo", inquirió. Por ello, se puso a disposición del Ayuntamiento y ofreció los servicios de su asociación "como experto en prevención del blanqueo, ayudado por un equipo técnico de intervención".
La entonces alcaldesa Rita Barberá no quiso tomar en consideración la propuesta. Mientras que Ribó (junto al diputado en el Congreso por Compromís, Joan Baldoví) optó por reunirse meses después con Galindo y confirmaron que exigirían a las instituciones desarrollar medidas para prevenir el blanqueo de capitales. Así, entre la batería de medidas preventivas apuntaron el establecimiento de un canal de denuncia en las instituciones, la creación de una oficina preventiva independiente y un mayor control de los contratos públicos. Y lo incluyó en su programa electoral.
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