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VALENCIA (VP). Una exalcaldesa (Rita Barberá) en representación del Ayuntamiento de Valencia; un alcalde (Joan Ribó) con voz pero sin voto; y un presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (Rafael Aznar) en tiempo de descuento. Este es el panorama que puede darse el viernes en la próxima reunión del consejo de administración del Puerto de Valencia si Barberá y Ribó acuden finalmente a un encuentro en el que, entre otras cuestiones, está previsto que se aprueben las cuentas de la APV correspondientes a 2014.

El consejo de la APV será uno de los primeros órganos, de entre los muchos en los que el Consistorio tiene la potestad de nombrar a representantes, en los que se escenificará esta transición entre pasado y presente del Ayuntamiento de Valencia. Aunque ya no es alcaldesa, Barberá sigue siendo formalmente consejera del Puerto en representación del Ayuntamiento, y lo será hasta que el Consistorio señale un sucesor y el Consell lo nombre vocal del consejo.

¿Por qué Compromís no ha propuesto entonces a Joan Ribó? El Consell se reunió ayer en sesión plenaria y, de haber tenido la propuesta, podría haber aprobado por decreto el nombramiento de Ribó como consejero en representación del Ayuntamiento. Sin embargo, el consejo que se celebra mañana fue convocado antes de que Ribó fuera formalmente alcalde, lo que impedía elevar la propuesta a la Generalitat.

Así las cosas, el cambio del representante municipal será aprobado por el nuevo Consell de PSPV y Compromís. Y puede que no sea el único, ya que la intención de la Coalición es acelerar el relevo del actual presidente de la APV, con quien ha sido muy crítico al estar siendo investigada por un juez su gestión en la APV.

Para resolver entuerto de la reunión de mañana viernes, la APV ha convocado a Barberá como consejera con voz y voto e invitado a Ribó como nuevo alcalde y futuro miembro del consejo. Lo mismo sucede en el caso del alcalde de Sagunto, ayuntamiento que también ha pasado a manos de Compromís y que igualmente tiene un asiento en el consejo.

La exprimera edil, pese a todo, rara vez se ha dejado ver en las reuniones del Puerto durante los 24 años que ha ocupado la alcaldía, ya que solía delegar su voto en el presidente.