VALENCIA (EFE). El pleno del Consell ha aprobado este lunes el decreto que regula las ayudas del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE- Energía) para combatir, con un presupuesto inicial de un millón de euros para este año, la pobreza energética a través de un cheque energético social de 100 euros.
Según ha informado en la rueda de prensa posterior el conseller de Economía, Máximo Buch, el Consell entiende por "pobreza energética" la incapacidad de un hogar para asumir el coste de los suministros energéticos necesarios para cubrir sus necesidades básicas, entre las que se encuentran mantener la vivienda a una determinada temperatura mínima o poder disponer de agua caliente.
La Generalitat asegura ser ahora "sensible" al incremento detectado en los últimos años del número de familias que tiene dificultades para hacer frente al pago del suministro de la energía eléctrica.
Este cheque viene a completar al bono social que ya se aplica a los consumidores vulnerables y estará destinado a las familias con hijos menores a su cargo y que tengan unos ingresos totales de la unidad de convivencia no superiores al indicador público de renta de efectos múltiples (IPREM), establecido en 532 euros/mes.
Según Buch, la cifra inicial de posibles beneficiarios por esta medida, avanzada el mes pasado desde el Consell, se establece en 10.000 hogares, número que podrá ampliarse en caso de que aumente el volumen de solicitudes que cumplan los requisitos.
"La salida de la crisis, desgraciadamente, no está siendo igual para todo el mundo", ha reconocido el conseller, quien ha añadido que el presupuesto global de esta medida nunca pasará de los cinco millones de euros.
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