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VALENCIA (EFE/VP). El PSPV de Valencia ha propuesto la puesta en marcha de un plan de rehabilitación de viviendas, que estaría centralizado a través de una agencia municipal dotada con 221 millones de euros entre 2015 y 2019, y que permitiría la creación de 7.500 empleos.

En declaraciones a los periodistas, el candidato del PSPV a la alcaldía de Valencia, Joan Calabuig, ha asegurado que se trata de un programa "innovador", que busca la eficiencia energética, combate la pobreza energética y social, que "va a servir de motor de la economía en los diferentes barrios".

Calabuig ha destacado que también busca facilitar la colaboración público-privada, que Valencia "recupere el liderazgo político", que tenga planes colectivos, que se cree un marco normativo fiscal y de apoyo y que se fundamente en la participación ciudadana.

Ha explicado que, si gana las elecciones, el plan se pondrá en marcha "de forma inmediata" a finales del mes de mayo, especialmente en una veintena de barrios que tengan preferencia "por razones patrimoniales o sociales" para que el Ayuntamiento "ayude a salir de la actual emergencia económica y social".

El candidato socialista ha incidido en que el plan "está alineado con las actuales estrategias europeas de orientar la acción a la consolidación de grupos urbanos en zonas ya consolidadas y no en ocupar, para preservar el entorno".

El "Plan 2015-2019 de Estrategia Urbana Integrada, la energía de un barrio, la energía de tu ciudad" propone crear una Agencia Municipal de Rehabilitación, que no supondrá nuevos costes sino una reestructuración y que "tratará de movilizar más de 220 millones con el objetivo de crear 7.500 puestos de trabajo directos".

BONIFICAR UN PORCENTAJE DEL IBI

Ha hecho hincapié en que "no es una oferta cultural vacía de contenido" y ha explicado que del total del presupuesto, 84'8 millones provendrán de planes estatales de vivienda y de la Generalitat, 40 del propio consistorio, 4 de los fondos europeos Feder, 60 millones de aportaciones de empresas y particulares y 32 de un plan de alumbrado público, lo que supone 220'8 millones.

Calabuig ha destacado que el plan tiene un triple enfoque: de rehabilitación energética para actuar en edificios públicos y privados; la rehabilitación de fachadas y elementos estructurales; y la renovación del alumbrado público con la instalación de 80.000 puntos de luz para ahorro en la factura del alumbrado público.

Para garantizar sus objetivos, el plan se completa con un conjunto de medidas como bonificar entre el 3 y 5 % del IBI a las viviendas rehabilitadas con criterio de eficiencia energética, rebajar el Impuesto de Construcciones y Obras del actual 4 % al 2 % -en algunos casos puede llegar a rebajas del 90 %-, e impulsar el funcionamiento de registros solares y edificios a rehabilitar.

También pretende programar que, al menos, cada año, el 3 % de los edificios municipales se adapte para conseguir el certificado energético, así como modificar las ordenanzas municipales con criterio de eficiencia energética para "garantizar que los equipamientos y edificios privados que se construyan tengan un consumo casi nulo de acuerdo con el objetivo de la UE".

Calabuig ha incidido en el elemento "fundamental" de la participación y ha asegurado que "los tiempos de arrogancia y soberbia van a pasar y se abren los del consenso y la concertación".

Asimismo, ha anunciado que el plan contempla la creación de una Plataforma Social Municipal para el Fomento de la Rehabilitación, con carácter consultivo e integrada por administraciones púbicas, entidades vecinales, sindicatos, asociaciones empresariales, colegio de arquitectos, entidades de crédito y administraciones de fincas.