06/11/2010 Sin embargo, según un informe de CatalunyaCaixa, a lo largo del primer semestre de este año se produjo un ligero repuntea ante la reactivación del consumo privado

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BARCELONA (VP/EP). Las familias españolas han reducido su endeudamiento casi siete puntos en dos años, pasando del 137,4% de la renta disponible en 2007 al 134,2% en 2008 y el 130,5% en 2009, según el último informe sobre el consumo y la economía familiar de CatalunyaCaixa.

El servicio de estudios de la caja ha constatado que "las familias han respondido a la crisis con una intensa contracción del gasto, tanto en consumo como en inversión, lo que ha supuesto un notable incremento en su preferencia por el ahorro y en su capacidad de financiación".

El año pasado se produjo un incremento del activo financiero de 47.869 millones, y una reducción de 13.224 millones en el pasivo financiero.

Esta reducción neta del pasivo representa una mayor amortización de préstamos respecto a la contracción de nueva deuda, fenómeno que tiene lugar por primera vez en la historia reciente, señala el estudio.

En 2009, la tasa de ahorro alcanzó un máximo del 18,1% de la renta disponible y la variación neta de activos financieros fue positiva en 61.092 millones de euros, un volumen equivalente al 8,4% de la renta disponible.

Estos valores están lejos de los registrados los años anteriores, con un promedio del 11,3% en el período 2000-2007 para la tasa de ahorro y un saldo negativo en la variación neta de activos financieros entre 2004 y 2007.

REPUNTE EN 2010

En el primer semestre de 2010 se ha producido un ligero repunte del endeudamiento familiar, hasta el 133,4% de la renta disponible acumulada en el último año.

CatalunyaCaixa lo atribuye a la reactivación del consumo privado, impulsado por las ayudas a la compra de automóviles y un cierto anticipo de gasto por la subida del IVA en julio.

Sin embargo, una vez absorbidos los efectos de estos factores coyunturales, la entidad espera que el endeudamiento familiar continúe con su proceso de desapalancamiento.

El proceso vivido en España se asemeja al experimentado por las familias de Estados Unidos, que también acumularon un notable incremento de la deuda durante la fase expansiva previa a la crisis.

En 2007 alcanzaron máximos de endeudamiento, con un pasivo financiero equivalente al 137,8% de la renta disponible, mientras que en 2008 y en 2009 se ha reducido esta ratio hasta el 130,3% y el 127,5%, respectivamente, algo más de 10 puntos en dos años.