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VALENCIA. La debilidad del euro, que cada vez está más próxima a su paridad con el dólar, sigue relanzando las exportaciones valencianas, uno de los principales motores de la economía regional avivado por la histórica decisión de Mario Draghi del 22 de enero pasado en lo que fue un auténtico soplo de aire fresco para la Comunitat Valenciana.

A priori las medidas no iban a tener un impacto inmediato -más que nada porque las compras del Banco Central Europeo (BCE) se iniciaron el 9 de marzo-, pero ya comienzan a dejarse sentir. Sin ir más lejos, el Ministerio de Economía y Competitividad informaba la semana pasada que las exportaciones valencianas habían crecido un 20,8% en enero respecto al mismo periodo del pasado año, pero lo más destacado fue que las exportaciones hacia Estados Unidos se dispararon hasta prácticamente duplicarse.

Concretamente el crecimiento fue del 92,2%, según los mismos datos del ministerio, lo que significa más que duplicar el aumento del 36% experimentado durante todo el pasado año. "La mano de Draghi comienza a sentirse ya sobre las economías como la valenciana que exportan mucho a áreas geográficas fuera de la órbita del euro y principalmente hacia las vinculadas a la divisa norteamericana", apuntan desde una gestora de fondos de inversión madrileña.

Y no les falta razón porque basta ver el gráfico adjunto del debilitamiento de la moneda única, "que va a tener continuidad porque el QE solo ha hecho que iniciarse y al BCE le queda más de un billón de euros para seguir comprando deuda y, de paso, apuntillando más y más al euro, por lo que no descartamos que cierre el año por debajo de la paridad", advierten las mismas fuentes consultadas por este diario.

Para la Cámara Valencia son cuatro las razones que están detrás de la depreciación del euro: la ralentización del crecimiento de la Eurozona, el retorno del dólar como moneda refugio ante la desconfianza inversora por el posible 'Grexit', el estancamiento de la 'locomotora alemana' y las perspectivas alcistas de los tipos de interés en Estados Unidos, tal y como ya dejó entrever la presidenta de la FED, Janet Yellen,  la semana pasada tras 'agotar su paciencia'.

INFORME CÁMARA VALENCIA

El informe publicado por la Cámara Valencia el pasado viernes advertía de las consecuencias sobre la economía valenciana de la depreciación del euro en los mercados, "dado que constituye un factor de impulso muy significativo para consolidar el proceso de recuperación del crecimiento económico". Los expertos de la institución hacían hincapié en seis aspectos:

• Impulso a las exportaciones de bienes y servicios: la depreciación del euro implica que los productos valencianos son más baratos en los mercados internacionales donde la divisa de referencia es el dólar (Estados Unidos, algunos países latinoamericanos, Hong Kong,...). Pero el euro también se ha depreciado con respecto a otras divisas como el yen, la libra o el rublo. En consecuencia, las exportaciones valencianas van a ser más competitivas por precio en los mercados internacionales fuera de la zona euro -compensando en algunos países un crecimiento económico más moderado-, lo que implicará un crecimiento de las mismas a lo largo del presente año. Las empresas valencianas han de aprovechar que son más competitivas en el exterior para posicionarse en nuevos mercados y afianzarse en los que ya operan.

• El impulso económico que la depreciación del euro tenga sobre la economía valenciana también la va a tener sobre otras economías europeas, lo que se traducirá a medio plazo en una mayor recuperación de la zona euro y una mejoría de dichos mercados para los productos y servicios valencianos.

• Pero también otras actividades del sector servicios de la economía valenciana son más baratas para el extranjero no europeo. El sector más beneficiado es el turismo. Para los turistas extranjeros les está resultando más barato visitar los países del euro, y también las playas españolas.

• La depreciación cambiaria afecta también positivamente al sector inmobiliario, dado que se conjugan dos factores: la caída de los precios de los inmuebles en los últimos años y la caída del precio del euro. Por tanto, se espera que se produzca un significativo incremento de las compras de inmuebles residenciales (sobre todo de segunda residencia) por parte de extranjeros, reduciendo el exceso de oferta que actualmente. De hecho, en los tres primeros trimestres de 2014, las ventas de viviendas a extranjeros se incrementó un 22% en la Comunidad Valenciana.

• La economía valenciana se ha vuelto más atractiva para los inversores extranjeros en capital productivo (empresas, bonos, acciones,...), dado que al menor precio de los activos nominados en euros, se le une la recuperación de la actividad económica, de los márgenes empresariales, dentro de un marco de estabilidad salarial, social y político. Asimismo, y al margen de la cotización del euro la confianza de los inversores en la economía española es positiva (la prima de riesgo se sitúa en 95 puntos básicos).

• Por el contrario para el mercado interior y las empresas valencianas, los precios de los bienes importados nominados en dólares y otras dividas se han encarecido. Dicho aumento de los precios está siendo parcialmente compensado por el descenso de otros costes, como es el de la energía. La incidencia sobre la inflación no es especialmente negativa dado que no existe un demanda interna fuerte que presione al alza los precios y la tasa de inflación se sitúa actualmente en tasas negativas (-1,1% en febrero).