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VALENCIA. Un fondo norteamericano y británico de capital árabe invertirá seis millones de libras esterlinas (9 millones de euros) en la empresa tecnológica valenciana Sai Wireles, propiedad de Joaquín Rieta. El empresario valenciano ha adelantado algunos detalles de la operación a Valenciaplaza.com y ha asegurado que supondrá una auténtica revolución para la firma con la que podrá afrontar con garantías su expansión internacional. En ese sentido, anuncia que antes del verano crearán la empresa holding en Londres Sai Wireles UK y la intención es que cotice en el mercado alternativo inglés AIM (el segundo mercado bursatil del Reino Unido, al nivel del MAB español).

La importante inyección de dinero se ha llevado a cabo a través de una ampliación de capital, aunque Joaquín Rieta conservará la mayoría del accionariado de la firma. De hecho la entrada del fondo ya está suponiendo una auténtica reestructuración de la empresa valenciana. "El director general del fondo lleva dos meses viviendo en Valencia. Ellos están aportando un nuevo enfoque estratégico y una comercialización de nuestos productos en nuevos mercados a partir de sus contactos internacionales", ha explicado el empresario.

Además de entrar en Reino Unido y su inminente cotización bursatil Sai Wireless también prepara su salto internacional a países como la India (donde se implantará a través de un potente socio local), Brasil, Polonia y Rumanía. Según Rieta, "no es un tema a corto plazo, ni tampoco van a poner dinero y olvidarse, sino que se han implicado realmente porque creen en nuestros productos", ha afirmado concluyente.

MIMOV TELECARE

La compañía tecnológica valenciana se ha especializado en aplicaciones para 'smartphones' destinadas a la salud. Y el producto estrella con el que han conseguido interesar a los gestores del fondo ha sido el Mimov Telecare; un dispositivo de teleasistencia móvil que, a juicio de Rieta, revolucionará la atención de las personas mayores, discapacitados o enfermos que vivan solos. "Está diseñado para facilitar el uso de la tecnología a personas que tengan necesidad de comunicarse de la manera más sencilla, para que puedan sentirse seguras allí donde estén", ha apuntado.

Hasta ahora estos aparatos estaban conectados a un 'call center' (o central de llamadas) y solo podían utilizarse en casa. La gran novedad que presenta Mimov es que al ser móvil permite ahorrar costes (se elimina la central), el usuario gana en autonomía porque consigue una plena movilidad, e implica a sus familiares ya que la aplicación les permite estar permanentemente conectados.

"Nos ha costado cuatro años de desarrollo de la marca, el logotipo, el molde, la electrónica, el software, etc. Pero hoy tenemos hasta 170 versiones diferentes", ha confirmado Rieta. En total ha señalado que habrán invertido cerca de tres millones de euros (de un total de 3,5 millones de euros que recibieron como créditos blandos por parte del IVF a devolver a largo plazo). 

Además, cuidadores y familiares podrán monitorizar y localizar a los usuarios en movilidad. Y tanto la aplicación como la plataforma web de seguimiento recibe de forma proactiva la comunicación de diversas alertas generada por Mimov. Además el propio usuario dispone de un botón de emergencias y también de varias líneas directas de teléfono.

MEDICAME Y HABLATAR

Pero no es el único producto pujante que ofrecen porque también disponen de otras aplicaciones para smartphones destinadas al área de la salud e incluso la comunicación y el márketing en general: Medicame y Hablatar.

Medicame parte de la necesidad de hacer un seguimiento personalizado a la medicación de los más mayores. Y para conseguir que el usuario sienta esa comunicación directa paciente-médico proponen un recordatorio del medicamento a tomar, la dosis, etc, a través de imágenes y textos en forma de preguntas.

E incluso en las últimas versiones en las que trabajan Sai Wireless ha llegado más lejos todavía: "Estamos generando avatares con voz e imágenes 3D muy reales a partir de fotografías. Ello permitirá por ejemplo a un hijo ausente preguntar a su madre cómo se encuentra y que el procesador de voz pueda entender la respuesta de la mujer y lanzar una alarma si es necesaria", ha explicado Rieta.

Hablatar, por su parte, nace de esta última idea, de la imagen 3D y la voz. Y se presenta como la nueva herramienta de marketing y comunicación que combina voz e imágenes. "Cualquier empresa puede a través de una plataforma web enviar mensajes promocionales a sus clientes, notificaciones, ect, con un mensaje mediante personajes de animación 3D".

Las ventajas pasan por el aumento de información directa al usuario de la aplicación de la empresa, un incremento de su uso y una mayor fidelización. Así como un aumento de visitas a los enlaces promocionados y mayores ofertas comunicadas.

Tanto en el caso de Mimov, como Hablatar y Medicame, ya tienen sobre la mesa distintas propuestas interesantes para su próxima implantación. Por una parte, Telefónica ha hecho un pedido de 2.200 unidades de Mimov. Respecto a Hablatar, Rieta señala que están negociando con diversas cadenas de televisión para un uso directo de la aplicación en grandes lanzamientos de próximos programas.

LA ÁRDUA BÚSQUEDA DE FINANCIACIÓN

La larga travesía en busca de fondos para desarrollar Mimov finalmente ha llegado a buen término. Pero por el camino Rieta refiere las mil puertas a las que ha tenido que llamar desde que gestara en 2002 Sai Wireless.

"Un año conté 180.000 kilómetros en vuelos desde España a los Estados Unidos, China y Alemania, entre otros países, en busca de financiación", ha recordado. "Y siempre me encontré con buenas palabras, pero con negativas". Aunque confiesa que al principio erró en el planteamiento: "Pensamos que teníamos mercado en España, pero tropezamos con la crisis, los aparatos fijos estaban subvencionados y por último el que lo necesitaba ya tenía uno (fijo). Por tanto, no necesitaba el nuestro". Y aunque miraba al exterior, recuerda que no tenía suficientes fondos para iniciar la aventura.

Pese a ello, con el prototipo de Mimov, Joaquín Rieta ganó varios concursos, inclusive una escapada a Sillicon Valley pagada por Anetcom (la ya extinta asocciación de fomento del comercio electrónico empresarial y las nuevas tecnologías). En ese viaje estableció contactos y aprendió modelos de negocio. Además llegó a entrevistarse en la Feria Tecnológica de las Vegas con un dirigente de la compañía Verifone America, pero comprobó que su productor chino no estaba capacitado para servir el producto que le pedía dicha multinacional.

Rieta rememora como estuvo tres años buscando financiación "y no había nadie. Agoté todas las posibilidades y no había manera. Lo que yo he visto en España... Han llegado a decirme que no le veían valor al dispositivo en el mercado", asegura.

Pero un día todo cambió. Hace tres años y medio, después de quedar terceros en un concurso internacional convocado por Telefónica-Movistar Rieta decidió asumir los consejos de la multinacional y mejorar el producto. Cambió de fabricante y consiguió incorporar más de 130 novedades a su propuesta inicial.

Finalmente Telefónica dio luz verde a Mimov para un lanzamiento en España y en enero de este año presentó el dispositivo de forma pública en Madrid. Poco antes, en noviembre de 2014, se habían producido las primeras negociaciones con el fondo de capital árabe. La suerte había cambiado. Dice un viejo proverbio chino que "un viaje de diez mil kilómetros empieza por un solo paso". Rieta los ha dado ya todos. Y se muestra convencido en continuar andando.