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La empresa prevé implantar en España las innovadoras 'SmartHigway' (autopistas inteligentes) del premiado diseñador Daan Roosegaarde y la constructora Heijmans

VALENCIA. La empresa valenciana Inersys ha iniciado la comercialización en España de las "carreteras inteligentes e interactivas del mañana", obra del multipremiado artista y diseñador holandés Daan Roosegaarde.

Los empresarios valencianos Francisco Mollá y Germán del Valle han encontrado un filón en sus atrevidas propuestas. Roosegaarde ha sido seleccionado por la revista Forbes como uno de los 100 agentes mundiales del cambio creativo; es internacionalmente conocido por crear diseños sociales que exploran las relaciones entre las personas, la tecnología y el espacio; y acumula incontables galardones como el Index Award 2013, o el Talento del Año 2015.

De momento se han quedado con dos de sus creaciones, las cuales vienen avaladas por la constructora Heijmans Infraestructure (también holandesa y que opera en su país, Alemania y Bélgica).

Del Vallle describe con minuciosidad el proyecto 'SmartHigway' (autopistas inteligentes) y las dos aplicaciones concretas adquiridas por Inersys: por una parte las 'Glowing Lines' (líneas brillantes), y por otra las 'Electric Priority Lane' (carril eléctrico prioritario).

UN BUS ELÉCTRICO QUE SE CARGA MIENTRAS CIRCULA

Los responsables de Inersys presentaron la semana pasada al Departamento de Tráfico del Ayuntamiento de Valencia el carril eléctrico prioritario. Aunque de momento sin resultado, porque han sido remitidos al día después de las elecciones municipales con el argumento de que ahora no es el momento de abordar ni de concretar ninguna inversión.

Pero del Valle es optimista: "Quizás aquí no nos compren la idea, pero seguro que en Madrid, Barcelona o alguna ciudad del País Vasco sí. De hecho hemos presentado también el proyecto en San Sebastián y Vitoria y allí lo han visto con buenos ojos", afirma.

Y describe la propuesta como una nueva línea de autobús eléctrico (silencioso y sin emisiones contaminantes) que, aunque pueda parecer una tecnología en uso, subraya que (a diferencia por ejemplo del trolebús de Castellón) la patente holandesa no necesita cableado aéreo. Para alimentar al autocar y permitirle plena autonomía el vehículo va recargando su bateria mientras circula en una serie de estaciones instaladas en determinadas paradas. "Dependiendo de la línea con tres, cuatro o cinco estaciones podría ser suficiente", manifiesta.

Germán del Valle no da cifras de su coste, "porque será necesario hacer estudios ad hoc", pero añade que podrá financiarse fácilmente con el ahorro del combustible y también con préstamos de la propia empresa a las obras de las estaciones de carga. En ese sentido, Inersys se presenta como una empresa de "innovación para sistemas energéticos que integra al fabricante y creador de la tecnología, instala la propuesta más adecuada y financia la actuación".

Según del Valle, también han visitado con su proyecto a la empresa Irizar (Guipúzcua), fabricante líder de autobuses. Allí han podido conocer que la adaptación de un autocar híbrido a su sistema podría tener un coste relativamente bajo, e incluso han confirmado que la mercantil vasca tendría capacidad para fabricar flotas enteras de autocares (100, 200, etc) adaptadas a este novedoso proyecto.

LÍNEAS BRILLANTES

Por otra parte, Inersys también prevé comenzar a contactar con administraciones autonómicas y provinciales (en concreto con sus departamentos responsables de carreteras) para presentarles un novedoso proyecto de líneas brillantes. Se refiere a las mismas líneas de la calzada, adaptadas por la tecnología inventada por el estudio de Roosegaarde, que permite cargarlas de día y que tengan capacidad para brillar durante ocho horas durante la noche.

Además de su efectividad como alerta y mayor visibilidad para el conductor la propuesta se enriquece con la posibilidad de poder interactuar con el tráfico y con el estado de la meteorología: es capaz en algunas de sus opciones de avisar si hay placas de nieve, o de cualquier otra contingencia; de ahí el sobrenombre que reciben de autopistas inteligentes.

PISCINAS CLIMATIZADAS A MENOR COSTE

Pero Inersys trabaja con otras empresas y otras ideas europeas innovadoras, como es el caso de una firma alemana de la que han conseguido la patente de Eureka: un intercambiador de calor que califican de "único en el mercado internacional". 

La propuesta cuenta con numerosos premios internacionales a la innovación y lleva más de 20 años en el mercado con un grado de fiabilidad del 100%, aplicado sobre todo en hospitales y hoteles. 

Del Valle explica que la maquinaria "intercambia calor directamente de la tubería de descarga del compresor, en vez del condensador como en los intercambiadores tradicionales y sin pérdidas de calor". Ello permite calentar grandes volúmenes de agua a una temperatura de 60 grados centígrados, cubriendo todas las necesidades de agua caliente de una instalación industrial o terciaria, con ahorros que pueden llegar a estar por encima del 95% del consumo de combustible para calderas.

Los responsables de Inersys contactaron con los creadores del intercambiador y desarrollaron la maquinaria para adaptarla a piscinas climatizadas. Así, según sus estudios, una piscina como la de Abastos de Valencia, que gasta anualmente unos 150.000 euros solo en agua, podría amortizar la inversión de 100.000 euros del intercambiador en dos años y tener gastos anuales de solo 15.000 o 20.000 euros.