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VALENCIA. Diversas metrópolis europeas han aplicado en los últimos años severas restricciones al tráfico para conseguir mejorar la circulación y reducir su elevada contaminación. Madrid y Barcelona han  comenzado ya a abordar la cuestión. Pero ¿y Valencia? ¿Cuál podría ser la solución a sus colapsos de tráfico?

Valenciaplaza.com ha preguntado al experto Ángel Ruiz, responsable del sector de automoción en Everis, una consultora internacional de origen español. Ruiz pone la mirada primero en las pioneras ciudades europeas: París ha restringido desde marzo de este año el tráfico de vehículos con una circulación alterna (según matrículas par e impar). Londres, en 2003, estableció un peaje para coches privados que bquieren circular por el centro; y Roma por su parte impuso una cuota anual a los residentes, únicos autorizados a circular.

Pero en el caso de Valencia el experto no apuesta por ninguna de estas soluciones. En su opinión aquí se impondrá el 'car-sharing'.

'CAR-SHARING'

¿Y en qué consiste este método? Según la Asociación Española de Car-Sharing "es un innovador servicio de movilidad que ofrece una alternativa a la tenencia en propiedad de un coche, poniendo a disposición de los usuarios una flota de vehículos de los que se puede hacer uso, pagando solo por el tiempo y kilometraje empleados", explican. Y las ventajas del sistema pasan por "olvidarse de los inconvenientes del vehículo propio, tener el aparcamiento garantizado, y ahorrar dinero pagando únicamente por lo que se usa. Sin mantenimiento, reparaciones ni engorros", concluyen.

Ángel Ruiz cree que "todo dependerá de la tensión demográfica que sufra Valencia en el futuro. Sobre todo del crecimiento del tejido empresarial que al final es el que condiciona los movimientos migratorios y el tráfico que pueda tener la ciudad". Pero a su juicio es la tendencia que se implantará, "con grandes parkings a la entrada de la ciudad y junto a las estaciones para poder acceder luego a la flota de vehículos 'car-sharing', posiblemente eléctricos", añade.

EL NUEVO PERFIL DE CLIENTE

El analista de Everis cree que hay que hablar de un nuevo cliente de coches: por una parte hiperconectado; en segundo lugar, muy concienciado por no consumir combustibles fósiles (tienen muy en cuenta las opiniones de los demás); y en tercer lugar, el precio. Además, hay que añadir que ahora "no tienen el mismo concepto de libertad que teníamos las anteriores generaciones (los que tienen 40 para arriba) ya que asocian el coche a un smartphone; es decir, para nosotros un coche era libertad de poderte mover, para ellos es libertad de poder estar conectado". En definitiva los jóvenes "ven el coche más como un problema, que como una solución".

Ruiz retoma el hilo del 'car-sharing' y para defender esta opción explica que "el cliente joven busca más la experiencia y no el producto en sí mismo. En ese sentido, las grandes marcas ya se están empezando a posicionar; por ejemplo, BMW está implantandolo en Alemania, donde puedes coger un vehículo y compartirlo durante unas horas. Es un hecho que te permite sentirte joven y experimentar la conducción de uno de sus coches", apunta Ruiz.

En definitiva, las marcas "están reorientándose para ofrecer muchos más servicios y experiencias al cliente joven para cuando este decida algún día comprar un coche".

Y prevé la implantación del 'car-sharing' en Valencia, aunque no en un horizonte temporal próximo de cinco ni diez años, sino en 20 o 25 años. Podrá ser una realidad en 2035 o 2040.

GRANDES AVANCES Y PRÓXIMAS NOVEDADES

Pero no es la única predicción que hace el analista de Everis. Desde un punto de vista del diseño lo más sorprendente que veremos son vehículos como los de Tesla Motors, que "tienen un cuadro de mandos central, salpicadero, con una pantalla táctil, en la que controlas el coche sin ningún tipo de botón", describe.

También comprobaremos pronto los avances en realidad aumentada, "sobre todo en el parabrisas frontal, de modo que eliminarás la pantalla del navegador y la tendrás integrada en la luna", apunta.

Ante la demanda de mayor renovación de los coches, grupos como Wolkswaguen ya han anunciado que el ciclo de vida de sus productos (antes de siete años) ahora se reducirá a cinco, y la incorporación de ciertos componentes se adelanta del cuarto al tercer año después de su salida al mercado.

Y respecto al gran debate de combustibles, Ruiz opina que "los vehículos eléctricos van a contribuir a reducir la necesidad actual de coches grandes. Su motor ocupa mucho menos, está colocado más abajo, y en lugar de un maletero podrás llegar a tener dos (uno trasero bastante grande y uno delantero más reducido)". Además, "el híbrido ha llegado para quedarse y quizás el que sí tiene fecha de caducidad es el puro de combustibles fósiles. El eléctrico será el vehículo más urbano y el híbrido lo utilizaremos para movilidades medias y grandes, sobre todo con viajes familiares".