VALENCIA. (VP) El Grupo Aguas de Valencia ha inspeccionado 1.100 kilómetros de red de tuberías en 50 municipios del área metropolitana de Valencia en 2014, una distancia superior a la que separa la ciudad del Turia del principado de Mónaco.
Además de incrementar un 62% más la longitud de la red inspeccionada, han logrado detectar anticipadamente 474 fugas y proceder a su inmediata reposición, evitando la pérdida de agua. Así, gracias a la planificación de sus Equipos de Auscultación de Redes (EAR), este año, Aguas de Valencia evitará que el sistema hidráulico del área metropolitana y sus municipios pierdan 2.450 millones de litros de agua, cantidad equivalente a la almacenada en casi 1.000 piscinas olímpicas.
A tal efecto, el Grupo Aguas de Valencia creó hace más de un lustro un equipo de profesionales especializados en esta tarea (el grupo de trabajo EAR), siendo la planificación de la búsqueda proactiva de fugas y su inmediata reparación, incluso antes de que estas se produzcan, un valor añadido para la gestión eficiente de los recursos hídricos.
El EAR del Área Metropolitana está formado por un grupo de técnicos y operarios especializados en el control de los sectores y en la detección acústica de fugas. Los medios materiales empleados son contadores de control general de sectores, válvulas hidráulicas reguladoras, datalogger (equipos de medición en continuo de presiones y caudales y envío de datos) que con un sofisticado sistema de control supervisa y vigila las redes de abastecimiento, las 24 horas del día.
Posteriormente, una vez detectadas posibles anomalías en algún tramo de la red de tuberías, estos equipos especializados trabajan en la localización de las fugas in situ, revisándola aparatos de precisión (geófonos y correladores), procediendo de inmediato a su reparación y, por tanto, contribuyendo al ahorro de millones de litros de agua al año.
CONCIENCIACIÓN
También es importante la concienciación ciudadana en la revisión de sus propias instalaciones domésticas, como elemento fundamental para asegurar el ahorro de agua. Como ejemplo cabe señalar que una fuga de 2 centímetros de diámetro supone la pérdida anual de 132 millones de litros al año, equivalente a la capacidad de almacenamiento de 53 piscinas olímpicas. Si hablamos de instalaciones interiores, una cisterna de aseo que se quede enganchada tirando agua puede suponer la pérdida de 3,5 millones de litros de agua anuales, equivalente al agua que cabe en una piscina olímpica y media.
Actualmente no hay comentarios para esta noticia.
Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.