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VALENCIA. Este miércoles Tele 5 estrena a las 22.30 horas su gran apuesta para este año: La adaptación para televisión de la saga Alatriste de Arturo Pérez-Reverte. Es una producción de gran calado. La grabación concluyó hace un año y ocupó durante seis meses los estudios Korda en Hungría. Los interiores se grabaron en un estudio de 6.000 metros cuadrados mientras que para los exteriores se creó un set de 8.000 metros.

En la serie han trabajado miles figurantes a lo largo de las 27 semanas de rodaje. En algunas sesiones llegaron a superar los 250 actores y más de un centenar de técnicos. Es un proyecto ambicioso, internacional. Cuenta de hecho con la coproducción de la alemana Beta Film, además de las españolas DLO y Mediaset, y se emitirá a partir de abril en los canales ARTE de Alemania, Francia e Italia.

La grabación de Alatriste en Budapest no ha estado exenta de polémica. El TACE, sindicato de técnicos audiovisuales españoles, emitió un comunicado protestando por la decisión de llevar el rodaje a Hungría porque suponía "perder una enorme oportunidad para generar actividad en el sector audiovisual español".

Mediaset fue conciliadora y emitió a su vez un comunicado de respuesta en el que justificaba su decisión por una cuestión presupuestaria; "sería inviable si no contara con los decorados ya construidos en Budapest", aseguraban desde la cadena privada.

La realidad es que Mediaset y los productores de la serie quisieron rodar en España. Así lo confirmaron este domingo fuentes de la Generalitat quienes aseguraron que les constaba de los intentos de la cadena por no tener que salir del país. Otras fuentes, vinculadas a la industria audiovisual valenciana, iban más lejos y aseguraban que su primer destino fue Ciudad de la Luz. "Estaba programada para grabar en Aguamarga pero la negativa del director José Antonio Escrivá, por la sentencia de la Unión Europea [que obliga a vender Ciudad de la Luz], les obligó a irse a Hungría", relatan.

Ciudad de la Luz es, en cierta medida, la fruta prohibida: no se puede tocar. Nadie duda de la bondad de sus instalaciones. Son muchos los que quieren emplearlas. Sin embargo, están cerradas. Nadie puede traspasar la valla de entrada. Es un edificio muerto, como esperando a estrenar, donde sólo se puede ver pasear a los miembros de la seguridad privada y del mantenimiento de los jardines.

Las declaraciones el mes pasado de Ridley Scott lamentando que los estudios se encontraran cerrados se explican, dicen estas fuentes, porque hasta en dos ocasiones el cineasta británico habría intentado filmar en los estudios alicantinos. La primera con El consejero, que se rodó parcialmente en Alicante, y la segunda con Exodus (dioses y reyes). En ambos casos, Scott tuvo que oír que los estudios estaban cerrados.

Se da la circunstancia de que Exodus (dioses y reyes) es una producción española. Y es que el largometraje ha sido financiado por el Banco Santander, quien creó la Agrupación de Interés Económico Producciones Ramses, que se constituyó en Canarias el pasado verano para poder costearlo. Entre sus socios, Air Europa, Antena 3 Films y Dentoestetic. El presupuesto oficial de la película es de 140 millones de dólares, por encima de los 117 millones de euros.

Los elogios de Scott hacia el estudio alicantino, al que calificó como "el mejor del mundo", no han extrañado tampoco en la industria audiovisual española, donde son sobradamente conocidos los platós. "Son unos estudios magníficos", dice el productor Fernando Bovaira, quien ha rodado allí producciones como la serie Crematorio; "no he visto nada similar y conozco bastantes estudios en el mundo. Son fantásticos, pero al final la decisión de elegir un estudio en manos de un productor se hace a partir de la pregunta ‘¿cómo afecta esto a mi presupuesto y a mi plan de financiación?'. Eliges en función de eso".

Ése fue su caso con Ágora (2009), la superproducción que dirigió Alejandro Amenábar en la isla de Malta y cuyo rodaje se realizó en 2008. Ágora fue posiblemente la primera de las muchas superproducciones que han estudiado rodar en Ciudad de la Luz y finalmente lo desestimaron. "En Malta había una base de artesanos que no existían en Alicante entonces", se justifica Bovaira. A esto, se unía las especiales características de Malta. "Allí encontramos el Fuerte Ricasoli, que nos ahorraba mucho dinero en decorados", relata.

En la mayoría de las ocasiones que los rodajes han desestimado parar en Ciudad de la Luz ha sido por cuestiones meramente financieras. La falta de incentivos, el hecho de obtener más ayudas en otros países... Pero desde que la UE sentenció que las ayudas con las que se habían construido los estudios eran ilegales, el complejo se ha visto obligado a rechazar al menos una decena de producciones que sí que querían ir; costara lo que costara.

Así lo confirman desde la Generalitat, donde admiten este interés por parte de productoras extranjeras por utilizar Ciudad de la Luz en 2013 y 2014. El problema, dicen estas fuentes, es que los estudios no pueden volver a abrirse hasta que no se dilucide su futuro. "Desde el principio se ha dicho que tenían que estar cerrados", insisten.

Una opinión que no comparte un bufete de abogados valenciano, vinculado a una de la ofertas de capital español que se ha presentado para comprar el complejo. "En la norma que regula en la UE el procedimiento de recuperación de las ayudas ilegales de Estado", dicen, "en ningún caso impone el cese de actividad. Éste fue acordado unilateralmente por Ciudad de la Luz desde 2011, antes de que se produjera la resolución de la UE. De hecho la Comisión Europea ni siquiera exige un procedimiento concreto, sino que el objetivo es que se recupere el máximo posible de la cantidad declarada como ayuda ilegal", aseguran.

Sí hay, por el contrario, unanimidad en cuanto al perjuicio innegable que supone para la venta del complejo que siga cerrado. Algo que sostienen también desde el grupo de inversores norteamericano CineMar Partners & Santa Ana Corporación, en el que se encuentra el productor Fred Fuchs, hombre de confianza de Francis Ford Coppola a quien le ha producido películas como Bram Stoker's Dracula, El padrino III o Legítima defensa.

"Este grupo de inversores tiene interés ahora y lleva un año esperando", dicen los socios españoles de la operación, "pero no van a estar esperando siempre. La subasta debería salir lo antes posible si quieren tener las mejores ofertas", sentencian. El tiempo pues, corre en contra de Ciudad de la Luz. Como en una película de intriga.