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VALENCIA. El Ministerio de Hacienda pondrá sobre la mesa de las comunidades autónomas un plan de reestructuración de la deuda que incluirá una rebaja del interés que les cobra por los préstamos de los distintos mecanismos de financiación a un tipo simbólico.

Este jueves se reúne la comisión delegada del Ministerio de Hacienda para Asuntos Económicos. Este puede ser el foto en el que el departamento que dirige Cristobal Montoro plantee su plan para reducir el impacto del endeudamiento de las regiones y que podría llevar aparejado un proceso de mutualización de la deuda auotonómica.

Fuentes de la Conselleria de Hacienda consultadas por ValenciaPlaza.com se mostraron prudentes este jueves ante unas propuestas que aún no conocen y que, formalmente, se presentarán en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera a celebrar antes de que acabe el año.

Aunque a lo largo del miércoles se sucedieron distintos rumores sobre el plan de Montoro que incluyeron dejar en cero el interés de los préstamos del Estados a las autonomías, desde la calle Palau se consideraba más posible que se reduzca a un tipo simbólico ya que no cobrar nada por un préstamo podría vulnerar la legislación europea de competencia.

470 MILLONES DE INTERESES PARA EL ESTADO EN 2015 

Para la Generalitat Valenciana, de confirmarse la rebaja, el impacto en sus cuentas podría ser relevante, más en un escenario de dificultad en la Conselleria de Hacienda para cuadrar los presupuestos de 2015 con una previsión máxima del déficit del 0,7%. Según fuentes oficiales del departamento de Juan Carlos Moragues, para 2015 la Generalitat tiene previsto afrontar intereses de 271 millones de euros por los créditos de los planes de pago a proveedores, 159 millones de euros por el Fondo de Liquidez Autonómica y unos 40 por los préstamos del Instituto de Crédito Oficial (ICO). En total, los gastos financieros de la Generalitat solo con el Gobierno central ascienden a 470 millones.

Reducir de forma considerable sería un alivio para las maltrechas cuentas de la Generalitat. Lo que está por conocerse es la letra pequeña que puede llevar acompañada esta medida del Gobierno y si la práctica eliminación de los intereses obligará al Consell a un mayor esfuerzo en su parte de gastos e ingresos para tratar de acercarse al máximo de déficit.

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