VALENCIA (EFE). La investigación sobre el interrogatorio o "entrevista" que el jefe de los escoltas del president del Consell hizo al jefe de prensa del vicepresidente del Consell por las filtraciones de datos de Presidencia incluyó la toma de declaración a diez personas y consta de trece documentos.
Así lo ha explicado hoy en el conseller de Gobernación, Luis Santamaría, en respuesta a dos preguntas de PSPV-PSOE y Esquerra Unida en el pleno de Les Corts, donde ha defendido que las conclusiones evidencian que "no existía investigación policial alguna" sobre las filtraciones de documentos de la Generalitat.
Ha indicado que esas acciones fueron objeto de una investigación interna de carácter reservado que ordenó él mismo el 6 de octubre, en la que nombró como instructor al máximo responsable de la unidad adscrita del Cuerpo Nacional de Policía, tras lo que se acordó abrir expediente disciplinario, remitir los hechos a la Fiscalía y separar al agente de su puesto.
Santamaría ha resaltado que la investigación fue llevada a cabo por un profesional que lleva más de 34 años en el Cuerpo Nacional de Policía, ayudado como secretario por otra persona que pertenece al mismo Cuerpo.
Esos funcionarios han trabajado "con absoluta libertad" y "con independencia" en las labores de investigación, y sus conclusiones las ha asumido el conseller, por lo que todo lo demás -ha dicho- forma parte de "una fábula", de "imaginaciones" o "autos de fe" de la oposición, que no se ajustan a los hechos.
Santamaría ha defendido la "diligencia" con la que se ha tramitado el expediente y la "profesionalidad" con la que se ha desarrollado, lo que refuerza el "merecido prestigio" de la Unidad adscrita tras 22 años al servicio del pueblo valenciano.
Ha insistido en que las "entrevistas" llevadas a cabo por el inspector jefe "lo fueron a iniciativa individual, y dentro del ámbito de lo que él entendía como de su propia responsabilidad". El conseller ha instado a la oposición a que no busque en el PP "intrigas ni batallas internas", porque "bastantes problemas internos" tienen ellos, así como un "largo historial" de "escuchas, intrigas e investigaciones policiales paralelas".
El diputado socialista Rafael Rubio ha lamentado el "ridículo" y el "cachondeo" que supone esta situación, y ha calificado a Santamaría de ser "bastante inepto para llevar este asunto", por lo que le ha pedido que se deje "de inventos, actúe en consecuencia" y dé "toda la información".
Rubio se ha mostrado convencido de que el policía que llevó a cabo el interrogatorio lo hizo porque recibió "algún tipo de recomendación, orden o sugerencia de alguien de Presidencia", y ha considerado que la remisión de las actuaciones a la Fiscalía se ha hecho para "paralizar el expediente disciplinario" y luego "echar tierra sobre el asunto".
El diputado de EU Ignacio Blanco ha afirmado que "es difícil de creer" que el jefe de los escoltas del president "se extralimitara tanto en sus funciones" sin seguir ninguna orden, a pesar de lo cual "sigue siendo el inspector jefe de la Policía autonómica".
Además, ha preguntado si también se ha tomado declaración a Alberto Fabra y a José Císcar y si finalmente han descubierto ya "al topo que filtra documentos", mientras que ha considerado que "es una vergüenza para el pueblo valenciano tener un gobierno tan chapucero".
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