VALENCIA. La juventud llega pisando fuerte y la voluntad de recorrer otros países buscando un futuro acaba reflejado en el trabajo que desempeñan. Este es el caso de Barea+partners, un estudio de arquitectura valenciano que a pesar de llevar poco tiempo en marcha ya va a toda mecha gracias a la atención que dedican a sus clientes y al equipo multidisciplinar que se ha forjado, liderado por José Barea, su director. "Realizamos desde una imagen de marca hasta una dirección de obra", explica Barea. "Nosotros nos encargamos desde cómo llamar al negocio a las paletas de colores y eso no lo hacen todos los estudios".
Barea estudió ingeniería industrial, pero decidió que no era lo suyo y se fue a Milán donde se dedicó a lo que de verdad le gustaba, la arquitectura, terminando allí la carrera. Entonces pasó a trabajar dos años en un estudio en Londres para acabar volviendo a España y tras algunas malas experiencias empezar a realizar propuestas de arquitectura e interiorismo. Pero un día, hablando con un amigo le presentaron a Juan Planes. "Cuando le conté a qué me dedicaba y me comentó que estaba haciendo un concurso para la nueva imagen de las tienda de Pollos Planes para abordar el mercado catalán", explica Barea.
"El mercado catalán es más exquisito y no podían abordarlo con la imagen anterior", apunta. Ya son 12 las nuevas tiendas de la franquicia que han realizado para su expansión tanto en Cataluña como en la Comunitat Valenciana. Entregó una propuesta y les gustó y esto les ha dado mucha cancha para continuar creciendo y seguir consiguiendo encargos Desde tirar viviendas de lujo abajo y volver a edificarlas hasta realizar la imagen corporativa de una marca de aceite para China. "Para como están las cosas en este mundo vamos como una avión", destaca.
Pero no solo eso. También han decidido optar por la modernización de los procesos y han pasado a utilizar software que, normalmente, no se usa con proyectos pequeños sino a gran escala. "Cuando presentamos un proyecto, a parte de hacerle los dossiers normales que podría hacer cualquier despacho presentamos un modelo tridimensional", explica Barea.
Se trata de Tecnologías BIM, un programa mediante el cual puedes seguir el proyectos exacto de cómo va a ser tu establecimiento a través del móvil. "Lo construimos desde el ordenador y se puede ver hasta los tubos, todo tal cual se ha proyectado", destaca Barea. No obstante, insiste en que para ellos solo es su lápiz y que durante su estancia en Londres hacía uso de este programa, por lo que pensó que para su estudio era necesario tener presente esta tecnología.
El modelo permite entrar en el edificio antes de estar construido, explorarlo, interactuar con él haciendo comentarios sobre el diseño, los materiales y las especificaciones en tiempo real. Destaca que al ser tridimensional evita la realización de un montón de planos con cada una de las caras. "Garantizamos que las cosas salen como las hemos puesto y al final el cliente opina hasta de la última esquina", apunta. Eso sí, insiste en que ningún proyecto sale del estudio sin tener el visto bueno de sus cinco componentes.
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