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VALENCIA. Más cerca, más real que nunca. La película basada en la serie L'Alqueria Blanca ya no es un proyecto, una intención, es un futurible. En estos momentos la productora está ultimando la financiación para un largometraje que esperan decenas de miles de aficionados de la serie más exitosa de la historia de la Comunidad Valenciana. Las negociaciones, explicaron fuentes de la industria audiovisual, van por buen camino y se maneja hasta un calendario.

Desde Trivisión prefirieron no confirmar este extremo este viernes, pero fuentes del entorno de la productora aseguran que existe un primer calendario de rodaje y que lo tienen ya algunos empleados de esta empresa. El rodaje de la adaptación cinematográfica comenzaría a mediados de noviembre y se extendería hasta final de año. El guión ya está escrito y el reparto sería el de la primera temporada de la serie, con nombres propios como Remedios Cervantes, Ferran Gadea o Juan Gea.

Otros, como Joan Molina, por el contrario, no podrán participar. El entrañable alcalde de la serie se encuentra en un delicado estado de salud y se da por inviable su participación en un proyecto en el que estaba muy ilusionado.

En el caso de cumplirse el primer calendario que maneja en Trivisión, el largometraje podría verse en las pantallas cinematográficas para la primavera de 2015. Sería una de las al menos cinco películas valencianas de ficción que verán la luz en un año que promete ser especialmente prolífico para la industria cinematográfica valenciana, con largometrajes como la nueva producción de Alberto Morais.

Tras la desaparición de RTVV, los esfuerzos de las contadas productoras que han quedado en la Comunitat Valenciana se han volcado en el área cinematográfica, donde se han puesto en marcha un plan estratégico que permitirá aliviar momentáneamente la ausencia del ente audiovisual.

La versión cinematográfica de L'Alqueria Blanca no tiene aún director claro, ya que en principio la productora quería negociar con algunos de los responsables de haber convertido a la teleserie en un fenómeno de masas. Tras las cámaras se encontrarían Alicia Puig, Jaume Bayarri, Claudia Pinto o Pau Martínez, cuatro de sus directores.

Creada por Martín Román y desarrollada por Manuel Valls, la serie ha contado también con el trabajo de otros directores como Santi Pumarola, Alberto Argüelles y Miguel Conde, y con guiones de escritores como David Casany, Paco López Barrio, Tirso Calero, Luis Eduardo Pérez, Pilar Paredes y, especialmente, Paco López Diago, "verdadero padre de L'Alqueria Blanca tal y como la conocemos", según un antiguo miembro del equipo de la serie.

AMBIENTADA EN LOS AÑOS SESENTA

La adaptación cinematográfica de L'Alqueria Blanca estará ambientada en los años sesenta, con el telón de fondo del inicio del turismo en las costas valencianas. La producción, que será una especie de Tonet conoce a las suecas, quiere jugar con lo que supuso para la mentalidad de los valencianos la irrupción de los bañistas extranjeros que llegaban a España atraídos por el sol y la playa.

La primera versión del largometraje se ubicó en la localidad de Peñíscola pero en los tres años que lleva el proyecto en marcha han cambiado varias cosas. La última ha sido la localización, después de que el ayuntamiento de Gandía confirmase que patrocinará el film con los servicios que puede aportar el consistorio. En concreto el municipio cederá espacios, dejará rodar en determinadas localizaciones y proporcionará funcionarios locales, además de colaborar en cuestiones como el catering.

Por el momento, y siempre según las fuentes consultadas, la productora está ultimando todo para que "lo antes posible" puedan iniciarse las primeras grabaciones. Aunque su argumento es localista y se entiende que tendrá interés principalmente en la Comunidad Valenciana, el hecho de contar con una legión de seguidores y la fidelidad de los mismos hace albergar esperanzas de que finalmente se reúna el capital necesario para empezar a rodar. Como señaló en su día uno de los productores de la serie, Ximo Pérez, L'Alqueria Blanca seguirá viva mientras quiera el público.