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VALENCIA (EFE). El Ayuntamiento de Valencia ha presentado este martes la modificación del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI) para el barrio del Cabanyal, un proyecto que, según el vicealcalde, Alfonso Grau, refleja el "acuerdo político" pactado con el Ministerio de Cultura, al que se le presentará en su fase final para que "decida si hay expolio o no".

Tanto Grau como el concejal de Urbanismo, Alfonso Novo, han comparecido ante los medios para explicar el proceso que seguirá el Pepri del barrio Cabanyal. Alfonso Grau ha destacado que se ha aprobado una adaptación del proyecto "tal y como exige la orden del Ministerio aprobada en 2009".

El Ministerio de Cultura declaró en 2009 que el PEPRI del barrio marítimo de Valencia debía ser paralizado "en tanto no se lleve a cabo una adaptación que garantice la protección de los valores histórico-artísticos que motivaron la calificación de éste como conjunto histórico".

Esa orden ministerial establecía que se tenía que suspender cualquier actuación siempre y cuando no se adaptase al PEPRI. "La propia orden ministerial decía que hay que adaptarse, y eso es lo que hemos hecho", ha puntualizado el vicealcalde.

Según él, la trama histórica que se debe proteger "única y exclusivamente" corresponde a las alineaciones de las calles en paralelo en las que se mantiene la estructuración de las antiguas calles con barracas. En concreto, esa zona está delimitada por la calle Escalante (por el oeste) y la calle Doctor Lluch (por el este).

NUEVO PEPRI

La propuesta para el proyecto de aprobación del nuevo PEPRI contiene aspectos como iniciar el proceso de participación pública, solicitar informes relativos al plan y su evaluación de los efectos medioambientales y el traslado de las actuaciones al Ministerio de Cultura para que apruebe su realización.

Según Grau, lo que se ha aprobado es la consecuencia del "acuerdo político" al que llegó Barberá con el gobierno central hace menos de un mes.

Es por eso que en esta modificación del PEPRI se han modificado las alineaciones de las calles y se ha añadido como Bien de Interés Cultural la lonja de pescadores, "porque así lo había pedido el Ministerio".

Asimismo, Grau ha comentado que: "seguimos entendiendo que la orden ministerial del Gobierno fue abusiva" y que en todos los recursos presentados al proyecto anterior "en ningún caso se ha entrado en el fondo de la cuestión".

El renovado PEPRI se va a poner a exposición pública durante 45 días (el plazo máximo permitido según el vicealcalde), para que se tenga el tiempo necesario para "estudiarlo" y "presentar las alegaciones que se estimen oportunas".

A partir de ahí, se remitirá a sesión plenaria para su aprobación, tras lo que se mandará a la Conselleria de Infrestructuras para que con los preceptivos informes se valore la adecuación del proyecto a ley.

Una vez aprobada por la Generalitat, la modificación del PEPRI se mandará al Ministerio de Cultura.

Tanto el vicealcalde como el concejal de Urbanismo han reconocido que les gustaría que la primera medida que tome el Ministerio sea "el levantamiento de la suspensión de licencias", para que la zona del Cabanyal se pueda rehabilitar y así "se revitalice todo el barrio, con independencia de la aprobación".

Respecto a las posibles alegaciones al proyecto por parte de los partidos de la oposición, Grau ha mantenido que "están en su derecho legítimo de ir a los tribunales", pero ha asegurado que se "está planteando una falsa acusación contra personas sin pruebas, sin demostración ninguna".

El nuevo proyecto de remodelación del Cabanyal será aprobado el próximo viernes en pleno municipal e iniciará un recorrido legal que el partido popular espera que ayude a "sacar de la parálisis al barrio del Cabanyal".