MADRID (EUROPA PRESS). Una de cada cuatro empresas españolas necesitaría el beneficio que consigue durante diez años para poder amortizar su deuda, casi el doble de la media europea, que se estima en 5,1 años, según un estudio realizado por la Fundación BBVA y el Ivie.
Si se consideran como las más vulnerables las empresas que tienen que hacer frente a unos gastos financieros superiores a sus ingresos netos, en España estas empresas tienen el 36% de la deuda empresarial.
Los sectores más endeudados y vulnerables son la construcción y las actividades inmobiliarias, que concentran el 44% de toda la deuda de las empresas más vulnerables, según este estudio elaborado por Joaquín Maudos y Juan Fernández de Guevara, investigadores del Ivie y de la Universitat de Valencia.
Por tamaños, son las pequeñas empresas las más vulnerables, ya que son las que soportan gastos financieros superiores a sus ingresos netos, y poseen el 50% de la deuda. En el caso de las medianas también el porcentaje de la deuda en poder de las empresas vulnerables es elevado (48%).
ALGUNAS DIFERENCIAS
Los datos muestran que las mayores diferencias en endeudamiento y vulnerabilidad financiera tienen lugar entre las empresas de un mismo sector o de un mismo tamaño. Una muestra es que el nivel de endeudamiento del 25% de las empresas españolas más endeudadas es 12 veces mayor que el del 25% de las menos endeudadas.
Durante la crisis, las empresas españolas apenas han conseguido rentabilidad suficiente como para hacer frente a sus obligaciones financieras. Así, si en 2012 las grandes y pequeñas empresas soportan un coste medio de la deuda similar (3,7% y 3,9%), la rentabilidad de las grandes empresas es muy superior (5,2% frente a 2,2%).
Y, precisamente, la baja rentabilidad supone un freno a la concesión de crédito y a la inversión empresarial. Además, la viabilidad futura de un porcentaje de empresas puede estar amenazada por la incapacidad para hacer frente al coste de la deuda. El 25% de las empresas españolas más vulnerables destinan el 60% de su margen de explotación a pagar gastos financieros.
Los expertos proponen sistemas de alerta cuando las empresas sobrepasan un determinado umbral, debido a que son las empresas más endeudadas y vulnerables las que más reducen sus niveles de inversión y con ello reducen su capacidad para pagar su deuda.
Hace cuatro años, por cada euro de recursos propios la empresa tenía 1,4 de deuda (recursos ajenos). Ahora la relación es 1-1. Es decir, como consecuencia, al haber dedicado el beneficio a la autofinanciación, la deuda de las empresas se ha reducido un 16% (328.000 millones de euros) y los recursos propios han aumentado un 18% (272.000 millones de euros).
Los recursos propios y los préstamos (bancarios y entre empresas del mismo grupo) son en la actualidad la fuente de financiación más importante tanto de las empresas españolas como europeas, si bien en España pesa mucho más el préstamo (40% frente al 31% en la eurozona).
En la actualidad, el 20% de la financiación total de las empresas es bancaria (7 puntos porcentuales menos respecto a su valor máximo en 2008), el 10,5% es crédito comercial (6 puntos porcentuales menos que antes de la crisis), y la financiación mediante la emisión de títulos de renta fija es marginal (0,6%).
Actualmente no hay comentarios para esta noticia.
Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.