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VALENCIA. El momento más atractivo -y morboso- de cualquier precampaña electoral suele producirse cuando se dan a conocer las candidaturas de las diferentes formaciones que concurren a unos comicios. En unas elecciones europeas, una de las cuestiones principales en el ámbito autonómico gira en torno a la participación de dirigentes, en este caso valencianos, en las listas de los partidos.

En general, las diferentes formaciones con implantación en la Comunitat cumplieron el objetivo de integrar a dirigentes valencianos en las candidaturas. Ahora bien, llegados al ecuador de la campaña electoral, se percibe que existen diferentes roles adoptados por los candidatos que van del papel protagonista al de reparto.

Una de las pocas destacadas siete días después del inicio de campaña es la diputada castellonense Marina Albiol, que ocupa el número cuatro de la lista de Izquierda Plural, la coalición liderada por IU que tiene opciones de incrementar su representación y restar electorado al PSOE. Unos objetivos ya de por sí motivadores, a los que hay que añadir el que, según los sondeos, la parlamentaria autonómica tiene opciones de obtener escaño -les otorgan unos cinco eurodiputados-, un aderezo para la implicación en campaña.

De hecho, Albiol estuvo en Madrid en el arranque de la misma junto a Cayo Lara, e incluso es protagonista en solitario de cartelería, dado que es la segunda representante de IU en la coalición. La diputada, joven aunque ya experimentada -siete años en Les Corts-, pertenece a la disciplina del Partido Comunista del País Valencià y siempre se ha destacado por ser una parlamentaria agresiva. En cuanto a su discurso, centra sus argumentos en mensajes directos dirigidos a "romper con la Europa de las desigualdades y la Troika" y en alertar sobre el peligro de un gran acuerdo entre PP-PSOE.

El puesto preferente en la candidatura del PP de Esteban González Pons (número dos) le está otorgando un protagonismo obligado en la campaña nacional, que está intercalando con su presencia en la Comunitat Valenciana. El exconseller participa sigue las líneas argumentales en los grandes debates, como la oposición a la consulta catalana y el 'jugueteo' con el posible pacto PP-PSOE, aunque con poca aportación de mensajes netamente europeos o valencianos.

Más discreto es el papel de la otra integrante valenciana de la lista del PP con posibilidades de entrar en el Parlamento Europeo, Eva Ortiz (número 20). La dirigente de Orihuela está centrando su campaña en la Comunitat y especialmente en la provincia de Alicante, donde visita diariamente varios municipios. Además de transmitir los mensajes de carácter nacional que dispensan los argumentarios repartidos desde Génova, Ortiz se sirve de su experiencia como eurodiputada para introducir una línea discursiva que también incluye asuntos de la agenda europea.

Menos protagonismo están obteniendo otros candidatos. Por parte del PSPV-PSOE, quienes ya mostraron públicamente sus diferencias con la confección de la lista en boca de su secretario general, Ximo Puig, se conformaron en su día con la inclusión en el número siete de Inmaculada Rodríguez Piñero, del círculo de confianza de Alfredo Pérez Rubalcaba, y en el ocho de Enrique Guerrero. Las numerosas visitas de la cabeza de lista, Elena Valenciano, a la Comunitat, así como la presencia constante de 'pesos pesados' del PSOE para protagonizar actos en tierras valencianas, han dejado a Piñero en un plano más bien secundario. En cuanto a Guerrero, un dirigente que ha desarrollado casi siempre su carrera en Madrid y que todavía se encuentra realizando sus funciones en Bruselas, apenas se le ha visto, aunque protagonizará un acto con Ximo Puig la próxima semana.

A ello hay que unir otros factores que contribuyen a que Piñero, aunque protagoniza actos diarios, no esté destacando. Además del contratiempo físico sufrido -un accidente la obliga a ir en silla de ruedas-, la diputada nacional se ha encontrado con una campaña en la que Ximo Puig, que tiene el objetivo de ganar el pulso a Alberto Fabra, también pretende centrar el protagonismo y aprovechar esta campaña para seguir aumentando su visibilidad.

Una situación especial es la que vive el cabeza de lista de Primavera Europea y alcalde de Burjassot, Jordi Sebastià, de Compromís. En general, y pese a que la candidatura incluye a formaciones de carácter nacional como Equo, esta coalición tiene un carácter modesto y centra su fuerza en la Comunitat Valenciana. No obstante, y pudo observarse este jueves en Les Corts, la popularidad de Compromís depende en gran medida de la diputada Mònica Oltra, cuya expulsión de la cámara recientemente llevó a que ayer el hemiciclo estuviera plagado de medios de comunicación, muchos de ellos de carácter nacional. En este sentido, parece que Sebastià ocupa en este campaña un lugar secundario respecto a marcas como Compromís o Equo y que un buen resultado dependerá precisamente de ellas y del tirón mediático que pueda propiciar un referente como Oltra.

En cuanto otras formaciones como UPyD, el protagonismo de los candidatos procedentes de la Comunitat no está siendo especialmente destacado en la campaña dado que ocupan puestos muy retrasados en la candidatura. No obstante, la formación magenta sí está potenciando la presencia del cabeza de lista Francisco Sosa Wagner en tierras valencianas, especialmente en la provincia de Alicante, donde UPyD posee una buena implantación.

En lo que se refiere a otras formaciones de reciente creación como Vox, la valenciana Cristina Seguí ocupa el puesto número cinco y, pese a que las opciones de entrar en el Parlamento Europeo son casi nulas, sí está logrando adquirir un papel notorio en la campaña incluso de carácter nacional con su aparición en diversos medios de comunicación. En cuanto a Ciudadanos, no hay valencianos en los primeros puestos, aunque la número tres Carolina Punset, lleva siete años como concejal en Altea y está protagonizando diversos actos en la Comunitat.