VALENCIA. El pasado més de septiembre Instagram acumulaba 5.000 millones de fotos compartidas en una de las redes sociales crecientes. Facebook sorprendió a medio mundo con una compra de 1.000 millones de dólares absorviendo la compañía en ese momento. Meses después concluiría la compra de WhatsApp, en un consorcio acumulado de empresas que deja a la compañía de Mark Zuckerberg en una posición privilegiada con respecto a las tecnológicas instaladas en la costa Oesta estadounidense.
Desde su compra, la vertigionsa curva ascendente en el número de usuarios solo ha hecho que crecer. Al final del pasado mes de marzo, Instagram seguró poseer 200 millones de usuarios en todo el mundo, habiendo multiplicado desde su compra las fotos hasta los 20.000 millones. De esos 200, un millón de ellos publica al menos una foto al día en su cuenta.
LAS GAFAS INSTAGRAM ARRASAN EN SU CROWDFUNDING
Y con este espectro de interactividad, una propuesta surgida en Edimburgo, Escocia, ha revolucionado en los últimos días a los fans de esta red social. Tres diseñadores llamados Tom Welsh, Kris Reid y Marty Campana han decidido sacar adelante un proyecto por el cual venden las gafas de sol 'Tens'. Estas gafas de sol Instagram incluyen un filtro según el modelo elegido, algo que suponía un coste inicial muy alto por la fabricación en la variedad de colores popularizados por la red social, motivo por el que decidieron sacar su proyecto al sistema de micromecenazgo de Indiegogo.
Publicado hace tan solo unos días, el 7 de mayo de 2014, la cifra que necesitaban para ponerse en marcha y fabricar las 'gafas Instagram' Decenas era de 9,400 libras (11,532 euros). Sin embargo, en unas pocas jornadas alcanzó este umbral y sigue creciendo en la plataforma de crowdfunding superando en el momento de la redacción de este artículo las 126.000 libras (154.794 euros).
LA VIDA CON FILTRO INSTAGRAM
Los diseñadores, que han concedido una entrevista a Telegraph este mismo lunes, aseguran que realizaron un proceso de diseño previo, además de las correspondientes pruebas con el fabricante capaz de aplicar los filtros como Valencia, Brannan, Inkwell o Amaro a unas lentes protectoras de los rayos solares; en concreto, con una protección UV 400 gracias al plástico CR-39, habitual en la fabriación de este tipo de gafas de protección por su resistencia a ralladuras y golpes.
Convencidos de su éxito, las gafas Instagram solo podían ponerse en marcha con una importante base de clientes, por eso los diseñadores buscaron una financiación cercana a las 10.000 libras. Según declaran en la publicación inglesa, solo pretendían aproximarse a los costes de fabricación, sin embargo el primer día triplicaron esa cifra inicial. Una cifra que esperaban culminar el 6 de junio.
Por el momento, la empresa ya cuenta con 2.400 clientes, los que han aportado diferentes aportaciones al crowdfunding. Por el momento el crowdfunding sigue abierto hasta el citado día, por lo que su iniciativa podría marcar un récord en cuanto a la microfinanciación de un proyecto industrial. Lo que sí parece claro es que, por el momento, tanto las gafas (de nombre Tens) como los modelos evitarían entrar en conflicto con el nombre de los filtros de la ahora todopoderosa herramienta de Facebook.
El precio de las gafas en el mercado, una vez superen este proceso de microfinanciación, podría rondar los 44 euros teniendo en cuenta los precios propuestos en la misma campaña.
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