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VALENCIA (EP). El exjefe de Policía Local de Riba-roja del Túria (Valencia) cumplirá siete años de inhabilitación para empleo o cargo público y dos años de prisión por quedarse con el dinero procedente del cobro de multas y de la grúa entre los años 2000 y 2002. En total, el acusado se apropió de 13.839,75 euros.

El letrado del agente ha llegado este lunes a un acuerdo con el ministerio fiscal por el que se le ha rebajado la pena hasta los dos años de prisión y siete de inhabilitación por un delito de malversación de caudales públicos. Inicialmente se le pedían cuatro años de cárcel. El acuerdo ha tenido lugar antes de comenzar el juicio con jurado que estaba previsto en la Audiencia de Valencia.

Según consta como probado, el acusado, quien ostentaba el cargo de jefe de la Policía Local del Ayuntamiento de Riba-roja del Túria, se quedó durante los ejercicios 2000, 2001 y 2002 las cantidades correspondientes al cobro de multas y grúa que debía haber ingresado a las arcas municipales.

La cantidad que se quedó el acusado asciende a 13.839,75 euros, correspondientes a cantidades pagadas por los particulares sancionados por multas y por la grúa, quienes hacían el ingreso correspondiente en el retén, de donde pasaba a manos del agente, quien nunca luego llevaba este dinero a su destino.

El acusado reintegró la cantidad adeudada al Ayuntamiento de Riba-roja el 7 de julio de 2010 como consecuencia de una condena del Tribunal de Cuentas de septiembre por alcance, con lo que esta entidad no reclama ya nada.

El fiscal entiende que los hechos son constitutivos de un delito de malversación de caudales públicos, por el que inicialmente pedía para el acusado cuatro años de cárcel y siete de inhabilitación absoluta. Sin embargo, finalmente se ha llegado a un acuerdo por el que se le ha rebajado la pena hasta los dos años de prisión y se le mantienen los siete de inhabilitación para empleo o cargo público.