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VALENCIA (EFE). Dos de las cuatro iniciativas empresariales acogidas a la figura de Actuaciones Territoriales Estratégicas (ATE), las de desarrollo turístico y deportivo del río Mijares y la promovida por el Valencia Club de Fútbol, están sufriendo retrasos e incluso paralización por falta de financiación.

Según ha reconocido la consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, en una entrevista a Efe, la primera de estas podría ser declarada desierta si los inversores no aportan financiación, mientras que la segunda esta condicionada a los grandes interrogantes que pesan actualmente sobre el Valencia.

El proyecto contempla el desarrollo de áreas de uso terciario en las inmediaciones del viejo y el nuevo estadio del Valencia, entre otras infraestructuras.

De los 14.000 empleos y 2.700 millones de euros de inversión que, según el president Fabra, generarían las ATE en la Comunitat, la del Valencia preveía un gasto directo de 626 millones y la creación de 3.433 puestos de trabajo. 

La ATE del río Mijares contempla una inversión directa de 34 millones de euros -otros 70 de forma indirecta- y la creación de 265 puestos de trabajo.

De todos los proyectos, el más avanzado es el de Alcoi Innova, que prevé una inversión de 80 millones de euros y la generación de 750 empleos (hasta 2.000 en fases posteriores).

Mediante el mismo se garantiza la continuidad de la empresa La Española en la ciudad, y contempla la instalación de un parque empresarial en las inmediaciones del parque natural de la Font Roja.

"El proyecto esta a punto de aprobarse -explica Bonig- y si se hace antes del verano la tramitación administrativa habrá durado menos de un año. Se trata de una inversión muy importante en una zona de alto valor medioambiental, por lo que se han exigido a la empresa fuertes medidas correctoras".

El cuarto ATE, el proyecto conocido como Puerto Mediterráneo, un complejo comercial y de ocio que se ubicará en Paterna, contempla una inversión directa de 500 millones de euros y la generación de 4.000 empleos.

"En este proyecto había dos escollos, el encauzamiento del barranco y los accesos, ambos se han solucionado por parte del Ministerio de Fomento y la tramitación esta ya muy avanzada", añade la consellera, quien reconoce que "muchos proyectos se han rechazado porque no encajan en la idea de ATE", aunque es posible que se apruebe un quinto "relacionado con la educación".

Los problemas de financiación afectan también a la iniciativa pública, tanto a la Generalitat como al Gobierno central, como reconoce la consellera que sucede con las obras de la Línea 2 de Metrovalencia, que requiere una inyección de al menos otros 150 millones de euros.

"No es momento de grandes inversiones, sino de acabar lo que ya esta empezado", insiste Bonig, quien subraya el compromiso de finalizar en la presente legislatura las obras de la A-3, la V-21, la ronda sur de Elche, el desdoblamiento de la N-340 a su paso por Vinaròs, Benicarló y Peñíscola, y el de la N-332 a su paso por Benidorm.

También existe un compromiso expreso respecto a las obras de rehabilitación del barrio de Ruzafa, en Valencia, para que estén finalizadas a final de año.

Según la consellera, han sufrido algún retraso debido a problemas administrativos y de financiación, "pero no se han paralizado".

Sobre la deuda de la Generalitat con los receptores de ayudas públicas a la adquisición, reforma y alquiler de viviendas, que supera los 200 millones de euros, la consellera afirma que "se ha dado un paso importante al contabilizarlas" y al haber elaborado una "orden de vulnerabilidad" que beneficia a quienes se enfrenten a un proceso de ejecución hipotecaria y que se actualizará el presente ejercicio.

"Estamos trabajando con la abogacía y la intervención sobre el procedimiento para el abono de estas ayudas y hablando con el ministerio para establecer un plan de pago realista. La voluntad es pagar y se trabaja para hacerlo. Se intentó a través del FLA (Fondo de Liquidez Autonómica), pero el Ministerio no lo admitió al tratarse de subvenciones. Trataremos de establecer un mecanismo financiero para abonar una parte importante de la deuda", concluye.