VALENCIA. El 51,5% de las viviendas vacacionales compradas el pasado año en la provincia de Alicante lo han sido por ciudadanos extranjeros, más que en ninguna otra provincia española, según el último informe de la tasadora inmobiliaria Tinsa. En términos absolutos, se trata de 13.786 inmuebles de los 26.778 que han cambiado de propietario en este territorio en la Comunitat Valenciana.
La cifra es muy superior a la media autonómica, en la que un 34,7% de las operaciones las han realizado ciudadanos de fuera de España, y triplica a las realizadas en Castellón (16,9%) y cuatriplica a las cerradas en Valencia (12,2%).
Aunque la provincia del sur de la Comunitat es la que menos ha crecido entre 2012 y 2013, lo cierto es que también es la que menos ha caído desde el inicio de la crisis. Así, las compras por parte de extranjeros han aumentado un 14,8% en Alicante y el ascenso en Valencia y Castellón ha sido de un 31,5% y de un 21,3%, respectivamente.
A LA ESPERA DE LOS ESPAÑOLES
Por el contrario, si se toma como referencia 2006, las operaciones de ciudadanos extranjeros en Alicante han caído un 40,2%, mientras que en Valencia el descenso ha sido de un 73,4% y en Castellón, de un 71,1%. En la media nacional, el caso valenciano rompe la media a la baja y al alza, según qué parámetro se mire.
De hecho, el pasado año, los extranjeros compraron un 16,5% de las viviendas vendidas en todo el país, mientras que la mejora es de un 12,8% entre 2012 y 2013, y la caída resulta de un 60%, si se toma como referencia el año 2006. la situación económica de países como Alemania o Reino Unido se entiende como la causa principal.
Desde Tinsa, se asegura que el mercado de la vivienda vacacional español está empezando a dar síntomas de recuperación, sobre todo en las localidades turísticas tradicionales y más arraigadas. Sin embargo, este cambio de tendencia no se podrá considerar generalizado hasta que también se refleje en el comportamiento de los nacionales, que sigue sin avivarse.
RESISTENCIA Y CONTENCIÓN
El destino turístico que se sitúa en el precio medio por metro cuadrado más alto es Benicàssim, a 1.603 euros, aunque ha caído un 10,2% entre el primer trimestre de 2013 y el de 2014, y acumula un descenso del 37,6% desde el precio máximo, que se alcanzó en el cuarto trimestre de 2007.
Le sigue Benidorm, a 1.599 euros, con una caída del 11,2% en el último año. En este caso, la bajada desde el máximo logrado en el cuarto trimestre de 2007 es del 43,4%, uno de los más altos de la Comunitat, sólo superado por el de Peñícola, donde el precio ha caído un 50,4% desde 2007, hasta los 1.232 euros.
Calp es el tercer municipio con el precio más alto, a 1.543 euros el metro cuadrado de media, tras caer un 2,4% el último año y un 36,5% desde el máximo del tercer trimestre de 2007. Tras este destino se encuentra Dénia, a 1.423 euros, como resultado de caer un 9,1% el último año y un 42,6% desde el tercer trimestre de 2006.
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