VALENCIA. Nuevo equipo, nuevas políticas, nuevas caras. Así lo ha entendido el nuevo presidente de la Fundación para la Ética de los Negocios (Étnor), el empresario Francisco Pons (presidente y propietario de la firma Importaco, expresidente del lobby AVE y expresidente de Bankia, puesto éste que le ha supuesto una imputación judicial). A los cien días de su nombramiento al frente de la fundación, Pons ha decidido dar un giro al modelo de gestión de la institución para dotarla de un "tono más empresarial y menos académico", tal como señalan en el entorno de Etnor.
Este giro se ha traducido en la salida de la fundación de su anterior gerente, Roberto Ballester, quien llevaba más de una década en el puesto. Para reemplazarlo, Pons ha buscado -y encontrado- un perfil "menos académico" poniendo al frente del día a día de Etnor a un profesional con un mayor perfil empresarial.
Y parece que ha encontrado ese perfil en la persona de Purificación Baldoví, economista, master en Relaciones Humanas y en Innovación, licenciada en Ciencias del Trabajo y con 20 años de experiencia profesional en puestos de dirección. Baldoví ha sido directora de la Fundación Globalis y gerente de Avant i+e (Asociación de Empresas Innovadoras Valencianas), así como directora de Relaciones Humanas de la empresa Faurecia, proveedora de Ford Almussafes.
Asimismo, también se ha incorporado al consejo de la fundación la empresaria valenciana Agnès Noguera, quien junto con Pons y Baldoví tiene programado el reimpulso de las actividades de la fundación.
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