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VALENCIA. Las espadas están en alto en la negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV). A punto de expirar el plazo a las doce de la noche del sábado 22 de marzo, la dirección ha lanzado un órdago a los sindicatos con una propuesta de 34 días por año trabajado hasta 30 mensualidades.
Esta propuesta tiene un coste de 83 millones de euros y se aproxima a la última realizada conjuntamente por los sindicatos, aunque esta también pasaba por reducir el número de afectados, recolocando a parte los trabajadores en otros departamentos de la Administración valenciana, algo que la dirección de la empresa no está dispuesta a aceptar.
Las formaciones sindicales se han dividido entre los partidarios de esta posibilidad y los que limitan la consulta a sus afiliados. De este modo, CSIF ha solicitado la convocatoria de una asamblea y la votación de la propuesta por toda la plantilla, mientras que en otros casos se ha convocado a los militantes, como ha sido el caso de Intersindical, donde han votado rechazar la oferta patronal con un 75% de votos negativos y un 25% a favor.
En todo caso, desde el comité de empresa se advierte que la negociación no debe limitarse a hablar de dinero ya que, si la dirección quiere una propuesta unánime, puede replantearse su decisión y recurrir a la consensuada por los seis secciones sindicales: CCOO, Intersindical Valenciana, CSIF, UGT, CGT y USO.
ROMPER LA BARAJA
En el caso de que los sindicatos vuelvan sin una decisión unánime a la mesa de negociación, convocada para este viernes a las 16:30, la dirección se plantearía, "para evitar un conflicto laboral", aplicar unas indemnizaciones de 20 días por año a doce mensualidades, como establecen los mínimos la reforma laboral.
Según ese planteamiento, sería preferible cumplir con los requisitos legales a la baja, que arriesgarse a la nulidad que pudieran exigir los sindicatos contrarios a la medida después del desembolso de los 83 millones.
En la última propuesta se ofrece indemnizaciones de 34 días por año trabajado con un máximo de 30 mensualidades para todos los trabajadores; un pago lineal de 6.000 euros a los trabajadores cuyo salario es inferior a 35.000 euros al año y de 3.000 euros para los que tienen un salario mayor; y 2.500 euros más para los trabajadores de la franja de edad comprendida entre los 45 y 55 años. En todos los casos, la suma de las cantidades no podría ser superior a la indemnización correspondiente al despido improcedente.
MEJORAS EN EL PLAN SOCIAL
La última propuesta de la dirección incluye un plan social que contempla el incremento hasta los 63 años en el coste del convenio especial con la Seguridad Social para mayores de 55 años y el lanzamiento de una línea de subvenciones para autónomos o emprendedores diseñada para favorecer a estos colectivos. La medida consistiría en 5.000 euros de subvención a fondo perdido para trabajadores procedentes de empresas en crisis del sector audiovisual.
Igualmente, la propuesta contempla la creación de un plan específico de acceso al Fondo Europeo de Adaptación a la Globalización (FEAG), que permitiría acceder a una política activa de búsqueda de empleo individualizado para cada trabajador, a través de la constitución de un fondo que podría valorarse en más de tres millones de euros para la búsqueda de acceso al mercado laboral. Por último, se propone un pago lineal de 2.500 euros a las personas con una discapacidad acreditada.
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