BRUSELAS. En definitiva, lo que intenta Barnier es acabar con el control sobre el mercado ded auditoría que ejercen las Big For, es decir, Deloitte, Ernst & Young, KPMG y PricewaterhouseCoopers- que centre las cuatro ontrolan el 70% del mercado comunitario, tal y como informó ayer Valenciaplaza.com.
"Pensamos que esta concentración puede provocar riesgos sistémicos", alertó hace un par de días el comisario. Si quiebra una de estas compañías, entre el 20% y el 25% de las empresas europeas "no podrían presentar sus cuentas auditadas en el plazo exigido", insistió. El ejemplo más reciente, recordó, es la quiebra de Arthur Andersen tras el caso Enron.
Del mismo modo, la crisis financiera mundial, ocurrida sin el más mínimo preaviso por parte de uno de los encargados de ello, las firmas auditoras, ha puesto de relieve serios fallos en la configuración de estas firmas y sus relaciones con los clientes. Sea, pues, bienvenidos los deseos del comisariocon la esperanza de que no se queden en sólo eso, deseos.
Actualmente no hay comentarios para esta noticia.
Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.
Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.